Una chica en 5sos (Luke Hemmings y Tú)

Capítulo 37: "Despedidas, Comienzos y dulce verdad" {Final}

Todo esto es tan complicado. No se en que momento sucedió todo esto. Hace algunos meses atrás era una chica normal, con una vida tranquila hasta que fui a ese concierto, donde mi vida cambió inesperadamente, para bien.

Miré las dos manos extendidas hacia mí. Dudé por un corto momento, aunque no sirvió de nada porque siempre elegiría a Luke, sobre cualquier hombre en el mundo. Sin embargo, no puedo elegirlo, no hasta que arreglemos las cosas completamente, amo a Luke pero no estoy dispuesta a aceptar su desconfianza.

Wes es un gran chico, es guapo y tiene una personalidad tentativa y debo aceptar que si no amará a Luke, saldría con él. Aunque tenga una procedencia para nada culta. Puede que algunas veces me ponga nerviosa pero nunca es igual, Luke despierta en mi la más grandes emociones, sentimientos y deseos.

Di un paso atrás. Me sentía presionada, acorralada y todo comenzaba a asfixiarme. Luke me observaba con preocupación, con miedo y confusión. Wes en cambio permanecía calmado, sereno y hasta tranquilo, lo cuál me sorprendió.

Negué con la cabeza y me alejé de ellos. Me sumergí entre la multitud de personas borrachas, otras sobrias y la mayoría casi inconsciente. Llegué al patio trasero de la inmensa casa sintiéndome cansada. A lo lejos noté un columpio y no tarde ni un segundo en ir para poder sentarme.

¿Quién lo diría? Una chica como yo, novia de Luke. Nunca creí que podría llegar a suceder, la vida da giro tan sorprendentes. Ahora que tengo a Luke soy feliz, sin embargo, no del todo. Su desconfianza duele, se que él se preocupa por mí pero no puedo tolerarlo.

Suspire pesadamente cuando el viento rozó cada facción de mi rostro, cuando acarició mi piel. Recordé la fiesta de Katherin cuando Luke me defendió de aquél chico que quiso sobrepasarse. Como olvidarlo. Sonreí sin poder evitarlo.

—Me sorprende que estés aquí, bueno, la verdad no es nada inesperado encontrarte en éste lugar tan... Tú.—Escuché una voz cerca de mí.

—Me sorprende más que tú estés aquí, y no con cualquier chica haciendo lo que sea que hacen.—Lo miré expectante.

—¿Qué te puedo decir? Ya hay una chica con la que me gustaría hacer eso pero ella está lejos en estos momentos.

Su tono fue suave pero sarcástico. En lo más profundo de mí, sentí que fue una indirecta y por alguna razón me causó gracia.

—Supongo que esa chica es inteligente.—Me burle aguantando la risa.

—Supongo que sí.

Dejé de reírme. Me sorprendió su reacción, lo dijo con sinceridad. Se encontraba mirando al vacío, como siempre, seriamente. Algunas veces me pregunto que habrá en su cabeza, que pensamientos cruzarán por ella.

—¿Estás bien?—Le pregunté con sutileza.

—¿Por qué no habría de estarlo?
—Seguro que tu chica te espera.—Traté de animarlo pero fracasé en el intento.

—Eso es imposible. Ya ella tiene por quién esperar.—Sonrió para luego clavar su mirada en mí.

Abrí la boca para decir algo pero escuché a Luke gritar mi nombre. Wes se rió con amargura y me guiño un ojo antes de girarse para salir.

—Y ya su tiempo de espera se esta agotando.

Sin decir más nada, se fue. Me sentí mal por él, era un chico lindo y merecía a una chica que lo quisiera de verdad. Suspire meciendome en el columpio con rapidez.

—Tn, al fin te encuentro.—Llamó Luke con cansancio por correr tanto tiempo.

—¿Qué pasa, Luke?—Fruncí el ceño.