Historia sobre ruedas

Capítulo 13

- Sí quieres mañana puedo acompañarte por la tarde. - me sugirió Tayler.

-Vale, muchas gracias. - le miré a esos preciosos ojos con los que puedo ver su alma desde el exterior.

"Estúpida, no puedes volver a caer. Todos son iguales."

Me recordó mi conciencia, y en parte tenía razón.

- ¿Vas a ir ahora al concurso de talentos? - me preguntó.

Mierda.

Se me había olvidado, el señor Looky cambió el día y coincidía esta noche. Apenas había ensayado, pero poco se podía hacer ya.

-Sí, de hecho...creo que debería ir a prepararme.

Me dedicó una sonrisa.

-¿Quieres que te pase luego a buscar?

Si!

"No!"

- No hace falta, Vanesa iba a venir a buscarme para apoyarme.

"¿No se te ocurría nada mejor? Vaya excusa"

- Oh vale, pues entonces allí nos vemos.

Parecía. ..¿decepcionado?

Una vez nos despedimos fui a mi habitación y allí me esperaba Vanesa.

Con un vestido rojo pegado al cuerpo, un pelin por encima de la rodilla y de mangas largas pero hombros descubiertos. Lo acompañó con unos tacones negros, labios nute y cabello suelto y laceo.

- Muy arreglada, ¿a quien vienes a ver?

- A ti obviamente. Y a ayudarte a elegir ropa porque no pienso dejarte salir con sudadera.

Contestó mientras abría la puerta.

Ella la cerró tras de sí y se puso a rebuscar en mi armario y ha hablar sola.

- Pantalones no, falda de pliegues no.. ¿vestido? Puede. Alaaa no tienes ni un solo vestido. Pues falda entonces.

- Estamos en diciembre y voy en silla, no quiero helarme. Mi armario se basa en cosas cómodas y calentitas.

- Ya, pues entonces ¿ Cómo quieres impresionar a Tayler? - me hecho una mirada de obviedad.

-No me interesa impresionarle.

"No sabes ni mentir"

- Escúchame Layla. No te digo que te cases con él, pero no te cierres tan en banda. Sino nunca volverás a amar a alguien por culpa de ese gilipo****.

Sonrió y me cogió la mano.

- Y ahora. .. a tunearte.

Comenzó a sacar ropa y más ropa.

Terminé con una camiseta que imitaba la parte de arriba de su vestido solo que en blanco. Una falda de tubo negra y unas manoletinas negras clásicas.

Por lo demás, no hubo mucho cambio, tampoco quería demasiado. Mi pelo largo y liso natural y un poco de brillo en los labios.

★☆

- Tía eres la siguiente. - me avisó muy emocionada mi amiga.

Cuando la gente terminó de aplaudir al mago que había estado haciendo diversos trucos de ilusionismo, fui por la parte de detrás del escenario para subir por la rampa y ponerme ante el piano.

Los nervios me podían y me temblaban las manos, parecía que tenía parquinson y mi pulso se aceleraba.

Busqué a Vanesa entre las 20 filas de gente que había. Me estaba saludando con la mano muy exageradamente para que la viera.

Levantó los pulgares hacia arriba en un gesto de aprobación y me calme un poco al saber que contaba con su apoyo.

Solamente cerré los ojos, hice que mis dedos se deslizaran suavemente por las teclas y me dejé llevar.

Al terminar, mis nervios se desvanecieron por completo junto con una ovación de aplausos y bajé con Van de nuevo.

Me estrechó entre sus brazos.

- Has estado genial, tienes mucho talento.

- Gracias, al menos ya estoy calmada. No llegas a estar y me da algo.

El señor Locky anunció por el micrófono el siguiente participante.

O más bien, los siguientes. Le tocaba el turno al grupo de Tayler. Se llamaban "Broken Stones" y tocaron un tema original suyo.

Me sorprendió lo bien que lo hacían. Además a Tayler se le notaba como disfrutaba tocando la guitarra.

Mientras anunciaban a Stef, la cual iba embutida en un "vestido", que más bien era un trozo de tela que tapaba lo necesario en amarillo, me acerqué (por orden de Van) a hablar con Tayler.

-Lo habéis hecho muy bien. - le sonreí.

- Gracias Lay, tu has estado perfecta, cantas como un ángel.

Me ruboricé. Era imposible no hacerlo con él al lado.

- Tampoco tanto, pero en serio tocas muy bien.

Metió su guitarra en la funda y me miró directamente un tanto burlón.

-Rugby, guitarra, futuro abogado, cantante... me falta la cazadora de cuero, no crees?

-Totalmente

- Alomejor también un par de tatuajes. - dijo una voz a mi espalda.- No como a mi, que podría decirse que me sobran.

Damon.

Se apoyó en la parte de atrás de mi silla y me rodeó los hombros con los brazos.

-¿Qué haces? - dije totalmente seria.

- No puedo venir a felicitarte, valla.

- Estábamos hablando Damon. - contraatacó Tayler molesto.

-Me importa una mierda rarito.

- No le hables así y vete a ver a la rubia oxigenada que tienes por novia. - dije cansada de él.

-¿Estas celosa empollona? -sus aires de superioridad me enervaban.

- ¿De qué? Lo único que podría tenerle envidia a esa es que no le hace falta ayuda para andar. pero ni eso me preocupa.

Damon le hizo señas tras de mi a Tayler y este se fue.

-¿ Qué le has dicho?

-No he hablado.

Me liberé de su agarré e intenté irme, necesitaba saber que le había dicho, no me daba buena espina.

Pero me frenó.

Enseguida vino Van.

-Wow ya tardabas en entrar en escena, vete.

-Oh que?

-Oh nada porque no volverás a ver la luz del sol.

-Algún día no estarás acompañada de tu amiga Layla Jones.

¿Me había amenazado?

Al minuto Damon desapareció entre el gentío y se lo agradecí a Van, mientras anunciaban al ganador.

- ¡¡Layla Jones!!

Mi nombre, que segundos antes había salido de boca de Damon en una amenaza.

Espero que os guste el capítulo jejeje cada vez odio más a Damon, a pesar de que yo soy quien le hace ser así.

Es muy creído. ¿Qué pensáis vosotros?

Y Layla ha ganado! Era muy predecible o solo un poquito?
;)

♥♡♥