Habibi Sayyíd

capitulo 14

Bajé corriendo rápidamente las escaleras, pero cuando llegué a la puerta me quedé paralizada y no abrí, mi reacción fue de rabia enojo y furia.
-Nat, abre la maldita puerta.
- no, lárgate Sttepford.
- no seas infantil y abre la puerta.
- no, vete déjame en paz.
Oí que se alejó espere un rato y abrí la puerta para comprobar que se había ido y para mi sorpresa, cuando estaba a punto de cerrar la puerta el la detuvo, empuje con todas mis fuerzas para impedirlo, pero él fue más fuerte que termine estampandome de espaldas contra el piso.
-aaauuuuuch!!!
-Nat estás bien.
- Déjame, no me toques
-Habibi lo siento.
- No me llames así.
Intenté reincorporarme, pero el golpe me hizo soltar un gemido de dolor, su cara realmente era de angustia y preocupación, se agachó pero no me tocó.
- Tranquilo estoy bien, no fue nada.
Me miraba aterrado y seguía sin decir palabra, me paré aunque hizo un gesto de dolor y cerré la puerta, al voltearme el seguía en el suelo mirándome estupefacto le tome la mano y lo obligue a levantarse, estando de pie le acaricie el rostro, el tomo mi mano y la besó.
- estoy haciéndote daño y es lo que me temía, dijo tristemente cerrando los ojos.
-Nathan fue sólo un golpe estoy bien no te preocupes.
- vamos a tu cuarto.
Wooouuu sus palabras hicieron que los músculos de mi vientre se contra hieran y esbocé una pícara sonrisa.
- quiero revisarte ver qué tan duro fue el golpe.
- no es nada, dije dándome la vuelta y de pronto me agarró por detrás, me levanto sobre sus brazos, subió las escaleras me miró y le señale el cuarto del fondo, abrió la puerta y me acostó lentamente sobre la cama.

- date la vuelta y quitate que la blusa dijo mientras entraba al baño.
Hice lo que me pidio, me di cuenta que no volvía, recostar mi cabeza sobre la almohada de pronto sentí que se unió a la cama y ahi estaba él junto a mí, me miraba pero no hacía nada.
- bien cómo está mi espalda. -Está muy roja puedo tocarte.
- sí claro.
- encontré esta pomada para que se te quite el ardor.
Sus suaves dedos desabrocharon mi sujetador y sus manos comenzaban a masajear mi espalda lentamente, la sensación era placentera, me gustaba en mandaba pequeños calofríos a mi vientre cuando terminó acercó su boca mi espalda y plantó un suave beso y me hizo estremecerme, y soltar un pequeño gemido.
- tienes una piel hermosa Nat.
Abrocho de nuevo mi sostén.
Por favor ponte la blusa de nuevo, me causa mucha tentación tenerte aqui asi y creo que debemos hablar.
Dios cómo puede decir eso y si tengo muchas cosas que decirle me vestí rápidamente.
- si estoy segura que merezco una explicación.
-Nat yo nunca imaginé que Hanna y tú se conocieran.
- si pensabas engañarla más bien la engañamos los dos, sabes cómo me siento respecto eso,Hanna es casi como una hermana para mí y la traicione.
-Nat, tú no la engañaste y mucho menos la traicionaste, tú no sabías qué relación tenía yo con ella.
-Nathan respóndeme sinceramente por favor,  Lo que digas me hará tomar una decisión.

Me miró alarmadamente y asintió.
- porque jugaste conmigo, de todas las jóvenes de la escuela; fui yo a quién elegiste como tu nuevo juguete.
-Nooooo.
- no qué Nathan.
- tú no eres mi juguete, nunca te he visto de tal manera, sé que te estoy lastimando y me duele verte así en este estado.
- cuál estado.
- estuviste llorando, tienes los ojos hinchados y aunque lo niegues sé que he sido yo el causante de tu dolor.
-mira Nathan, sí es cierto he estado llorando, en parte es por ti y en parte es la culpabilidad que siento hacia Hanna porque sé que debo decirle lo que pasó entre nosotros, nunca le he guardado secretos y la culpa me va a matar si no le digo, sé que me odiará y que puedo perderla a ella y sé que también te perdería ti si su compromiso se hace serio, ayer comprendí que puedo luchar por ti contra cualquiera, pero no contra ella y también decidí que debo al...
-shhh no hables más, sé que estás pensando, pero no puedes, ni debes hacerlo, sabes he estado preocupado por ti al no verte en mi clase hoy, les pregunté a tus amigas por ti y no quisieron decirme nada, pero Yazmine me grito frente a la clase, la está pasando muy mal por tu culpa, y en ese momento me di cuenta que ayer me comporté como un patán.
- me dolió ver que la besaras enfrente de mí, no sé cómo pero te has metido bajo mi piel y sé que voy a sufrir intentando sacarte pero no tengo otra opción, debo dejarte ir para que ella sea feliz a tu lado.

  Se acercó y me abrazó fuertemente contra su pecho y susurró.
- no quiero a nadie más a mi lado que no seas tú, no sé cómo pero te he llevado en la piel desde que llegaste tarde al salón de clases.
Lo abracé fuertemente, me quiere como yo a él pero no quiero lastimar a Hanna, nos perdimos una eternidad abrazándonos, pero fue él quien nos sacó del hechizo.
- hablaré con Hanna, sobre nosotros sé que lo entenderá.
- no quiero que la hieras, pero tampoco quiero ocultarle nada.
- tranquila no la lastimare.
Me levantó la cara para mirarlo y me besó tan dulcemente como no lo había hecho antes, me tumbó sobre la cama y la intensidad del beso fue mas fuerte, su boca haciéndole a la mía eso que tanto le gusta, cuando nos separamos me miró y dijo.
- déjame amarte Nat, quiero hacerte el amor y demostrarte cuán importante eres para mí.

Mi tierna y dulce Habibi...