CAPITULO 8º: PERDIDA EN RECUERDOS:

10.2K 371 9
                                    


Camila llegó a su casa y Lucas no estaba, lo agradeció, no tenía ganas de enfrentarse a él. Se dio una ducha y recogió. Hacía tiempo que no dedicaba tiempo a su hogar.

Al fin y al cabo aquel piso era suyo, allí se había criado y allí tuvo que volver cuando el banco le quitó su propia vivienda.

El móvil la distrajo de sus recuerdos, cansada se dirigió hasta él para contestar la llamada.

-Señorita Jiménez en media hora tenemos reunión en el club, todos los empleados.- Ordenó una voz oscura y dominante.

-¿Y usted quién es?- Preguntó molesta porque un desconocido le diera ordenes.

-Soy Brendan O'Brien, hermano de Marc O'Brien. A partir de ahora participaré en las decisiones del local. Y no esta yendo como yo quiero. Y como tengo el cincuenta por ciento tengo derecho a hacerlo.- Explicó el desconocido.

A Camila le dio mala espina que el hermano de Marc quisiera participar en el club cuando nunca lo había hecho.

Mandó un mensaje a su amante avisándole y llamó a Nora para decirle que pasaría por ella y Johnny.

Fue a vestirse, eligió un sencillo vaquero y una camiseta blanca de cuello alto. No se molestó en peinarse. Ni en ponerse tacones, se calzó unas sencillas bailarinas rojas.

Cogió el bolso y las llaves para bajar al garaje a buscar su coche. No estaba nerviosa, no le preocupaba perder su empleo, al fin y al cabo no lo necesitaba.

Pero sus amigos dependían de ese trabajo y le preocupaba que lo perdieran. Y haría todo lo que estuviera en su mano para ayudarles.

Llegaron al club y después de aparcar se dirigieron a toda prisa, el tráfico no les había permitido llegar antes.

Un hombre de pelo negro y ojos azules les observó cuando entraron, eso la puso nerviosa.

-Llegan tarde.- Dijo autoritariamente Brendan.

-Lo siento su excelencia pero si avisa con tan poca antelación yo no puedo hacer milagros con el tráfico.- Protestó Camila, no se iba a dejar amilanar por Brendan.

Él sonrió, esa mujer era un soplo de aire fresco para él, nunca nadie se había atrevido a plantarle cara de esa manera.

-Bueno decía que estamos perdiendo clientes y tenemos que hacer variaciones en el show, variaciones que espero ver esta misma noche si no quieren verse en la calle.- Informó cruelmente él.

-¿Es todo?- Preguntó Camila mirándose las uñas, algo le decía que provocar a Brendan era buena idea.

-Por mi parte si señorita, si tiene prisa puede marcharse.- Contestó sonriendo él.

-Bien mi marido me está esperando.- Dijo Camila sin saber porque había querido decir que Lucas estaba esperándola.

Marc entró en ese momento en el club mirando a su hermano con el ceño fruncido, pero se paró unos instantes a mirar a su amante, sin importarle quien estuviera mirando, marcó su territorio.

Besó su mejilla con posesión, demorándose, mirándola con deseo. Ella reaccionó con anhelo de sus besos y caricias.

Se mordió el labio resistiendo la tentación de tirarse en sus brazos, Brendan no perdió detalle de la reacción de Camila ni la de su hermano.

Supo enseguida que su hermano andaba en líos con aquella chica que a él le había impactado. Sonrió, ya sabía cómo provocar a Marc.

Después de ese beso intenso Camila cogió la mano de Nora para llevársela. Sabía que Johnny las seguiría.

AlboradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora