No podría besarle, no soy tan valiente como para hacerlo. Así qué, en vez de eso, me recosté sobre su hombro. Pude notar su reacción, no estaba incómodo pero si le sorprendió que me recostara en él. Igualmente no hizo ningún movimiento, y siguió viendo la película.
Me desperté y tenía a Mangel a unos centímetros míos, no recuerdo cuando ni como me quedé dormido.
- ¿Q...qué haces? -Le pregunté sorprendido y algo extrañado-
- Solamente te veía dormir, eres tierno. -Me dijo algo sonrojado y riendo-
- Qué tonto eres, en serio. ¿Hace cuánto me quedé dormido?
- Desde que te recostaste en mi hombro, has estado aproximadamente unas dos horas dormido.
- Ya veo... ¿Y ahora cómo dormiré de noche? Ya no tengo sueño.
- No lo sé, son las 10:30, ¿se te ocurre algo para hacer?
- Claro, jugar videojuegos, ¿qué pregunta es esa?
- Otra cosa, Rubiuh, siempre piensas en eso ¿eh? Y si mejor... ¿Invitamos a Vegetta y Willy para hacer algo?
- Está bien, también a Alex y Stax.
-Bueno, yo los llamaré. Tú encarga unas bebidas así hacemos algún juego o algo así, no preguntes, solo compra alcohol.
- Está bien, voy a hacer eso, y cambiarme.
Pasaron los minutos, el alcohol había llegado y Vegetta con Willy también.
Yo estaba sentado junto a Mangel, Vegetta y Willy en frente nuestro, estábamos conversando de cosas triviales, cuando suena el timbre.
-Mangel, abre tú. -Le dije mirándolo tiernamente-
-Está bien, iré.
Cuando me quedé a solas con Vegetta y Willy, me preguntaron que pasaba con Patrick y tal, les comenté que siempre le estaba mandando mensajes y que no pasaba un día en el que no hablaran. En eso, escucho la voz de Mangel.
- ¡¡Amigos!! Miren quién ha venido, es Patrick.
Mis ojos se cristalizaron completamente, pude notar la mirada de Vegetta sobre mí, lo miré y me hizo un gesto como que me quedara tranquilo. Y así fue.
-Hola, Patrick. -Le dije en un tono frío-
Me giré hacia Mangel y pregunté: -¿Qué hace aquí?
-Ha venido porque me ha dicho que se ha sentido solo en la casa y ha decidido venir a visitarnos, y yo le dije que se quedara, ya que van a venir nuestros amigos también.
-Exacto, era noche de amigos. ¿Recuerdas? Amigos. -Las palabras se me salieron solas de la boca, noté la mirada de todos sobre mí-
-¿Qué coño te pasa Rubiuh?
-Na... -justo en el momento más incómodo de mi vida suena el timbre, y creo que es la primera vez que estuve tan feliz de que el timbre sonara- Yo abro. -dije con rapidez y salí camino a la puerta-
Eran Alex y Stax, los saludé y pasaron a el living donde se encontraban todos. Pero algo me llamó la atención, Patrick estaba sentado en mi lugar junto a Mangel, y yo no tenía sitio donde sentarme. Saqué mi lado perra de adentro y decidí sentarme encima de Mahe, MI Mahe.
-Ya que no tengo lugar para sentarme, me sentaré sobre tus piernas Mahe, ¿puedo?
-Claro que sí, Rubiuh, ven. -Me dijo feliz, aunque el gesto en la cara de Patrick me lo dijo todo, el no estaba feliz, estaba molesto conmigo. Y eso me dio placer.-
-Bueno, ya que estamos todas las "parejas" aquí -dijo Mangel riéndose- Hagamos un juego de parejas ¿qué dicen?
-Claro, ¿a qué jugamos? -preguntó Stax-
- A verdad o reto, pero solamente con reto. ¿Qué les parece? -Nos preguntó Mahe-
Todos asentimos, así que comenzamos a jugar, y yo era el primero.
- Vegettita... -dije con voz de pícaro y con una cara malévola- te tendrás que besar 12 segundos con Willy y el beso debe ser con lengua.
Estaba más que claro que más que un reto era un favor, inmediatamente comenzaron a besarse, eran tan tiernos.
Ahora, claro, era el turno de Vegetta. Quién también "odiaba" un poco a Patrick, más que nada por mi, y porque shippeaba Rubelangel más que cualquiera.
-Patrick... Te reto a que te partas un huevo en la cabeza. -Al decir esto me miró sonriendo, y le dediqué otra sonrisa. Parecíamos las típicas mejores amigas odiando a una chica.
Y así lo hizo, no voy a mentir, disfruté viéndolo hacer eso. Autohumillarse.
-Mangel... -dijo con un tono malévolo, y mi corazón palpitaba a mil- Te reto a besarme durante 5 segundos.
Mi corazón palpitaba rápido, mis ojos se llenaron de lágrimas y lo único que pude hacer fue ver la respuesta de Mangel.
- No voy a hacer eso -dijo en tono frío, y a mi parecía que me volvía el alma al cuerpo-
- ¿Por qué no? Es un reto, además, estamos jugando. -Le respondió en tono sobrador-
- Porque si tengo que besar a alguien en esta habitación, al único que besaría sería a Rubius.
Mis cachetes se quedaron rojos y no sabía que reaccionar frente a lo que Mahe había dicho. Fue tan tierno.
-Vamos, es un juego -Dijo nuevamente el pesado-
- Si él no quiere no lo va a hacer. -Le dije mirándolo mal y con ira-
- Para ti puede ser un juego, pero lo que siento por Rubén no es un juego y no quiero cagarla haciendo estas gilipolleces. -Pude notar su seriedad al decir esto, el en serio sentía algo por mi, me quería, era la primera vez que lo escuchaba decir "Rubén" en un tono serio y joder que sonaba hermoso con su voz. Él era hermoso, era jodidamente hermoso.