Escondiéndome de su mirada (Tom Hiddleston Fanfiction)

Capitulo 13

Mi celular resuena, tomo el aparato, al mirarlo veo que mi madre me está llamando, algo malo debe estar ocurriendo para que me llame a las siete de la mañana. Respondo somnolienta, mamá esta acongojada, trato de calmarla, pero no puedo, de repente escucho la voz de mi padre quien me dice que mi hermana Claudia desapareció, no saben en qué momento salió de casa, me quedo en silencio, un escalofrió recorre mi cuerpo en cuestión de segundos, siento pánico al presentir que algo malo ocurrirá. Me levanto y camino cabizbaja hasta la ventana, está nublado, mientras miro la ciudad a través del cristal me pregunto si Claudia estará cerca.

Me detengo y él también, miro para atrás y él me sonríe. Tengo una extraña mezcla de sentimientos, al mismo tiempo siento miedo y enojo, mi psicópata personal me está siguiendo por la calle, nos acabamos de bajar del autobús, como siempre, él va pisando mi sombra, me está hartando, resignada sigo mi camino, y él... sigue el mío. Llego a la entrada de la Universidad y me encuentro con un viejo amigo de la escuela, perdí todo contacto con él desde que hace cuatro años atrás volviera a Rusia, su país natal. Dimitri me saluda con un cariñoso abrazo, me siento tan feliz de volver a verlo, converso con él aun cuando me quede poco tiempo para llegar a la clase de Tom. Convenzo a Dimitri para que me vaya a dejar hasta la sala en donde tengo clases, no quiero subir las escaleras de emergencia escoltada por un psicópata. Falta un minuto para que la clase comience, Dimitri y yo nos damos un fuerte abrazo de despedida, al girarme para entrar a la clase me encuentro con Tom mirándome con el entrecejo fruncido, entro a la sala sonriendo, le hago una seña con la mano a Juliana y Alan mientras camino hasta la última fila de asientos para sentarme junto a la pared y así poder perder de vista a Tom, quien al parecer no ha tenido un buen día.

La voz de Tom llega como un débil susurro hasta la parte de atrás de la sala, debo hacer un gran esfuerzo para escuchar lo que dice. Estoy con la cabeza gacha atenta a cada palabra que dice; al rato comienzo a sentir que la voz del profesor se hace cada vez más fuerte, hasta que la siento cerca de mí, levanto la cabeza y ahí está Tom, mirando su reloj mientras nos dice que hará un receso de diez minutos. Lentamente algunas personas comienzan a salir de la sala para respirar aire puro, en tanto, Tom se acerca a mí y me dice inexpresivo que luego de clases lo debo acompañar a la facultad, al terminar de decir eso se va. Lo miro alejarse, siento una daga atravesar mi corazón cuando pienso que tal vez se decidió, mi voz interna me dice que no me elegirá a mí, pongo la frente en la pequeña mesa que tiene la silla dándome por vencida.

-¿Qué te dijo Hiddleston? – Escucho la voz de Alan quien se acerca junto a Juliana.

-Quiere que lo acompañe a la facultad después de clases. – Le digo levantando mi cabeza.

-¿Por qué? – Me pregunta con el entrecejo fruncido Juliana.

-No lo sé. – Le respondo encogiéndome de hombros.

-¿Segura? – Alan me mira con los ojos entrecerrados.

-Sí. – Le digo para levantarme de la silla, necesito aire puro.

Camino hasta la salida con la cabeza gacha, al salir me doy cuenta que mi psicópata no está. Me acerco al ventanal y comienzo a mirar la ciudad, si Tom dice que no quiere estar conmigo, no debería derrumbarme, hay cosas peores, como ver a mis padres sufrir por la muerte de mi hermana, me dan ganas de llorar al imaginar eso, Claudia ha tratado de aniquilarse muchas veces, en algún momento ella va a conseguir lo que quiere, <<Espero que no sea hoy>>, pienso triste. Estoy perdida en un punto del vidrio, mi concentración esta en el mayor nivel que alguien puede lograr, estoy a punto de alcanzar la iluminación, cuando alguien pone su mano en mi hombro, salgo de la obnubilación y mis ojos se encuentran con los de Tom, él me dice con seriedad que ya es hora de entrar a clases.