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*Leed la author note, por favor ❤️*

Hacía ya veinticuatro horas que Brad se había ido. Ya ni siquiera estaban en España. Por suerte, para combatir la depresión post-concierto, tenía a Lana. Estábamos en casa de esta, concretamente en su habitación. Me había quedado a dormir allí, ya que el sábado por la tarde no me apetecía nada volver a casa y mis padres me dejaron.

Nos habíamos pasado la mañana mirando series, comimos solas –ya que sus padres habían tenido que salir- y llevábamos varias horas ya sentadas en su cama con el ordenador.

- Lea, tú aún tienes que explicarme algo-dijo Lana de repente bajando la pantalla de su portátil.

- ¿Qué?

- Venga vamos, no te hagas la tonta. Algo te ha pasado con Brad. Y, como tu mejor amiga que soy, exijo saberlo.

- Tú aún me tienes que explicar lo que te ha pasado a ti con Connor-rodé los ojos.

- Explícame lo de Brad y te explico lo de Connor.

- Ni hablar, tú primero. Lo tuyo empezó en la discoteca. Además, vi con mis propios ojos como os besuqueabais.

Lana inspiró. Me negaba a contarle primero lo que me había pasado con Brad, ya que la curiosidad por saber que había pasado entre Connor y Lana me carcomía cada vez más.

- De acuerdo...

"Cuando vino Tristan a decirnos que no había más habitaciones disponibles, Connor me echó una mirada cómplice antes de coger mi mano y hacerme subir -con cierta rapidez e impaciencia- con él hasta su habitación. Milagrosamente, aunque estuve a punto de tropezarme con algún peldaño, llegué sana y salva.

Una vez estuvimos delante de su habitación, Connor abrió la puerta incitándome a entrar a dicha estancia. Oí como cerraba, dándonos la privacidad que no podíamos obtener en la discoteca donde estuvimos antes. Segundos más tarde, unos brazos rodearon mi cintura, mientras unos labios besaban mi mejilla. Me giré quedando así cara a cara, con una sonrisa en mis labios, viendo como él hacia el amago de una.

- Gracias...-susurró Connor rompiendo el silencio en el que estábamos sumidos.

- ¿Por qué?

- Aunque no lo creas, me has ayudado mucho... y te lo agradezco, de veras. Hace tres semanas ya que rompí con Luisa y... me sentía como si no valiera una mierda. Ha sido muy duro para mi tener que pasarme todo este tiempo fingiendo estar bien para no preocupar a nadie. Llevaba tres semanas sin sonreír de verdad, sin ser feliz totalmente. Ni siquiera los chicos habían logrado conseguir alegrar mi mala cara. Pero tú sí. El viernes cuando te conocí en el hotel y hablamos me hiciste reír como nunca. Y necesité besarte, Lana. Poco a poco me he ido dando cuenta de lo feliz que me has hecho en tan poco tiempo. Y me gustas, Lana. Me gustas muchísimo. Y, si no te hubiera conocido, no sabría qué hacer. Estaría perdido, deteriorándome lentamente. Te agradezco enormemente que hayas aparecido en mi vida, Lana... no sé qué habría hecho si no estuvieras en ella...

- Dios Connor...-dije con lágrimas en los ojos, las cuales se habían formado mientras le escuchaba- ni siquiera sé que decir... Te quiero, dios. Te quiero muchísimo. Y me haces muy feliz...

Finalmente, despues de un rato de silencio entre nosotros, rompí la distancia que nos separaba a Connor y a mí y le abracé, rodeándole fuertemente el torso con los brazos. Mi oído quedaba a la altura de su corazón, permitiéndome escuchar cómo éste le latía rápida y frenéticamente, siendo increíble para mí que un corazón pudiese ir a tal velocidad.

Remember Last Night [b.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora