15. Final: Sombra y Virus

890 88 18
                                    

Se escuchan unos pasos en un hotel abandonado. En la sala principal una mesa con velas y una sonrisa se le forma al verla llegar.

―Tarde ―se burla Sombra.

―Mi trabajo es el doble, ahora no solo soy Virus, también soy Antídoto, así que te vas a tener que aguantar, cariño. ―Sonríe y juguetea con su cabello.

Sombra se levanta de su asiento y toma el mechón con el que ella estaba jugando.

―Las reglas fueron hechas para romperse.

―Qué lindo, no nos vemos hace meses y es lo único que me dices. ―Se muerde el labio inferior.

―Preparé toda una cena romántica para nosotros dos solos y me la desprecias, qué mala. ―Continúa sonriendo.

―Eres todo un caballero, pero... ―Agarra su parche y se lo quita―. Esta relación no puede empezar con mentiras, cariño.

El ojo descubierto es el rojo y el visible es el azul. Tiene ambos de diferente color y no iguales.

Él se tapa el rojo, preocupado.

―Es que yo...

―Cuando restauré el ojo sospeché que pasaría, no tienes que justificarte, tonto. ―Se ríe―. ¿Te asustaste? Eso solo lo puedo lograr yo, parece.

―No tientes a tu suerte. ―Sonríe y la empuja contra la pared―. Mi lado oscuro puede ser perverso.

―¿No te lo dije? La oscuridad me gusta, mejor dicho, amo a la oscuridad ―exclama refiriéndose a él y lo besa.

―Creí que íbamos a comer. ―Levanta una ceja.

―Podemos comer otra cosa. ―Vuelve a besarlo―. Algo más... caliente. ―Le desata la corbata y él la tira.

―Me parece bien. ―Se quita la chaqueta―. Nos debemos esto hace mucho, ¿no? ―Le besa el cuello.

―Mucho es decir poco.

Vuelven a besarse y disfrutan de una noche entera de pasión y lujuria. Una que se debían, hace mucho, pero mucho tiempo.

Amor elemental (S.E #5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora