Capítulo 19

6.8K 579 74
                                    

Capitulo 19

Al día siguiente de San Valentín, la rutina era la misma que siempre.

Una vez que Severus se fue a trabajar, Harry se estiró en el sofá son su hijo en el pecho.

-Tu papá y yo nos vamos a casar y después, él será legalmente tu padre. Seremos una familia de verdad. Estoy tan feliz mi amor. Hemos encontrado a alguien que nos quiere de verdad. Sev, se que tu padre te quiere mucho y dijo que tu le bastabas, pero me gustaría poder darle un hijo propio. Y a mi me gustaría tener una gran familia, como siempre he deseado y que mi pareja estuviese a mi lado disfrutando de cada embarazo. Por desgracia, amor mío, no pude disfrutar de mi embarazo de ti -dijo besándole la cabeza-. Me gustaría poder hacerlo y darte hermanos, pero no se que hacer. Tengo tanto miedo; por más que Severus diga que las cosas no van a cambiar, se que le gustaría tener intimidad conmigo. Pero no tengo el valor de intentarlo, no quiero tener que verme obligado a rechazarlo de nuevo y huir. Yo no se que hacer. -Harry se quedó unos minutos en silencio mirando a su hijo. En verdad le gustaría llegar a tener más hijos, pero el miedo no se iba. En eso metió la mano en uno de los bolsillos y sacó un trozo de papel. Ese papel era el mismo que Marion le dio para que la llamara; desde ese día, no sabía porque, lo llevaba en cima. -¿Crees que debería llamarla? Ella ha logrado casarse y tener una hija, después de aquello. Severus me dice que debería hablar con alguien y Marion me contó que aún hoy habla algunas veces con Severus. ¿Mi amor, estarás conmigo cuando haga esto? -Como si fuera una respuesta, Sev le puso una mano en la mejilla.

Pasaron un par de horas, en las cuales Harry intentaba armarse de valor para llamar. Intentó inventarse excusas para posponer la llamada, pero finalmente tuvo que hacerlo.

Se puso ante la chimenea y tiró los polvos flu.

-Casa de Marion Smith.

Después de unos segundos se asomó Marion.

-¿Si?

-Buenos días, soy Harry, nos conocimos...

-¡El Harry de Severus! -exclamó emocionada.

-Si.

-Me alegro de que me llamaras.

-Yo... ¿Tienes tiempo para hablar un rato?

-Si, claro. Dame cinco minutos y voy para allí.

-¿Eh? Vale, yo... -pero Harry no pudo seguir hablando, porque Marion ya se había ido.

Harry se apartó de la chimenea y fue a buscar a su hijo. Lo necesitaba con él en esos momentos.

Pocos minutos después Marion, con Chiara en brazos, salió de la chimenea.

-Hola Harry -saludó sonriente.

-Hola.

Marion pudo ver que Harry estaba muerto de miedo. Con cuidado se acercó a él y le puso una mano en el brazo.

-No te preocupes Harry. Iremos poco a poco, no hace falta que lo resolvamos todo ahora.

-Yo... ¿Quieres un poco de té?

-Claro.

Sin que ninguno de los dos soltara a sus hijos, fueron a la cocina. Con cuidado Harry hizo el té y dejó un plato de galletas sobre la mesa.

Después se sentaron un rato en silencio, mientras preparaban el té a su gusto.

Finamente, Marion tomó la iniciativa:

-¿Te puedo preguntar, porque has decidido llamarme?

-¿Eh? Lo siento, tal vez no debí... Tú dijiste que podía...

Un bebé nos unióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora