Capítulo 25

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Capitulo 25

La mañana en la que empezaban los días libres de Severus, Harry se levantó muy temprano y con cuidado de no hacer ruido, tomó a Sev de la cuna y tapándolo bien con su manta. Silenciosamente bajó al piso de abajo, fue hasta la puerta y a abrió.

-Buenos días Hermione -la saludó Harry con una sonrisa.

-Buenos días. Ya era hora, empezaba a tener frio.

-Perdona, aquí tienes a Sev -dijo pasándole al bebé aún dormido y la bolsa de Sev que siempre estaba cerca de la puerta-. Muchísimas gracias por este favor, de verdad.

-Es un placer pasar todo un día con mi sobrino.

-Mañana en la mañana iremos a buscarlo.

-No te preocupes por eso y espero que todo salga bien.

Después de despedirse, Harry respiró hondo antes de volver a subir.

Una vez en la habitación, Harry miró a su prometido; estaba un poco preocupado por lo que tenía planeado hacer. Esperaba estar actuando bien.

Harry volvió al lado de Severus y se estiró junto a él, tomando una de sus manos.

Cuando Severus se despertó y vio a Harry mirándolo, le sonrió.

-¿Qué hacías ya despierto?

-Te miraba mientras dormías -le dijo con una tímida sonrisa.

-¿Ha sido entretenido?

-Si.

-¿Fue nuestro hijo quien te despertó?

-No, yo... Sev no está en casa.

-¿Qué? -Severus se incorporó en la cama sorprendido-. ¿Dónde está?

Harry se incorporó ya no tan seguro de que su idea haya sido buena.

-Le pedí... le pedí a Hermione que lo cuidase hoy.

-¿Por qué? -preguntó sorprendido.

-Yo... yo... -Harry empezó a temblar-. Lo siento, yo no quería que Sev estuviera si esto no salía bien.

-¿Qué...?

-Perdona, ahora mismo iré a buscarlo -dijo levantándose de la cama-. Debí saber que era una estúpida idea.

-Harry -Severus también se levantó de la cama.

-Ya voy a buscarlo.

-Espera -Severus tomó a Harry de los hombros y lo acercó a él-. Harry por favor, explícame que está pasando.

-Quería... tan solo quería intentar... que nosotros... No deseaba que Sev estuviera presente, si las cosas salían mal como la otra vez -Harry respiraba con dificultad.

Preocupado, Severus tomó el rostro de Harry y lo besó. Eso hizo que Harry, obligado a respirar por la nariz, empezara a calmarse.

Poco a poco Severus separó sus labios de los de Harry y lo miró.

-¿Mi amor qué pasa?

Harry se apartó un poco de él y con manos temblorosas se quitó la parte superior de su pijama.

-Hazme el amor.

-¿Harry que...?

-Por favor -suplicó-. Necesito saber. Antes de casarnos necesito saber que puedo estar contigo.

-Harry no tienes porque forzarte a esto.

Harry tomó una de las manos de Severus y la apoyó contra su mejilla.

Un bebé nos unióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora