Un bebé nos unió

Capítulo 23

Capitulo 23

A la mañana siguiente Harry despertó temprano y miró al que dentro de medio año iba a ser su marido.

Ese hombre le había demostrado que lo amaba de verdad; no lo había abandonado ni un momento, aún cuando él mismo había huido. Y eso es algo que no se podía perdonar, así que viviría para compensárselo.

Harry acarició el cabello de su amado y sin despertarlo se levantó de la cama. Se cambió y después de ver a su hijo dormido, bajó a preparar el desayuno.

Cuando más tarde Severus bajó con Sev, Harry lo tenía todo listo.

-Mmm. Mira Sev, papi nos ha hecho tortitas de chocolate.

-Las tortitas son para ti, ya que Sev tiene su biberón listo -dijo antes de besarlo.

-Si son para mi entonces puede que sean un soborno -dijo mirándolo burlón-. ¿Qué podría querer papi de mi, Sev?

-No lo había pensado, pero ya que lo dices... Quiero acompañarte a San Mungo.

-¿Eh? ¿Por qué, te sientes mal? -preguntó mirándolo de arriba a bajo.

-No, no es nada de eso.

-¿Entonces que pasa?

-Es para decirle a Hermione que ya tenemos fecha para la boda. Cuando no le conté yo mismo que me habías pedido que nos casáramos, me dio una gran reprimenda.

-Está bien, pero no la entretengas mucho.

-Prometido.

Después del desayuno, Harry preparó a Sev y acompañaron a Severus hasta San Mungo.

Una vez en la sección de pediatría vieron a Hermione y Harry la llamó.

-¿Qué hacéis vosotros dos aquí? -preguntó con una sonrisa al tomar a Sev.

-Necesitaba hablar contigo.

-¿Y el jefe lo permite?

-El jefe lo permite -dijo Severus en tono irónico-, pero que sea corto.

-Cinco minutos, te lo prometo -dijo Harry. Después cogió la mano libre de Hermione y la llevó al despacho de Severus.

-Bien, ahora dime porque tú y mi sobrino habéis venido a verme -pregunto ansiosa.

-Le di una fecha a Severus.

-¿Una fecha? ¡Una fecha! -dijo abrazándolo emocionada-. ¿Cuándo?

-El quince de agosto.

-¿El quince de agosto? Eso es poco menos de medio año.

-Si.

-Estoy feliz por ti, pero... ¿Harry estará bien que sea en agosto? -preguntó refiriéndose a la mala experiencia que tuvo Harry.

-Si, para mi es lo mejor; ya que después de ese día, el de mi aniversario de bodas me ayudará a recordad que sobreviví a eso.

-Esa es una buena idea -dijo con una sonrisa.

En eso entró Severus al despacho.

-Los cinco minutos han pasado.

-Oh venga jefe -se quejó Hermione.

-Al trabajo Granger.

-Esta bien -Hermione le devolvió su hijo a Harry y lo besó en la mejilla-. Nos estamos viendo.

-Pronto, espero -deseó Harry.

-Claro que si.

Una vez que se quedaron solos, Severus besó a Harry.