Después de rellenar mi formulario, fuí con Haru a la zona de las duchas, donde, a su vez, se encontraban las taquillas. La mía era la 31 y la de Haru la 32.
-Son todas iguales menos la de allí al fondo...-dije con curiosidad.
-Sí... -
-¿Alguna vez en tu vida podrás contestar algo más que no sea, si o no?-
-Sí.-
-¡AAGH, YA NO SE COMO DECIRTE LAS COSAS! -dije mientras hacía gestos bruscos hacia arriba y hacia abajo con las manos.Haru se acercó lentamente hacia mi, apoyó su brazo izquierdo en mi hombro derecho,y con la otra mano detrás de la oreja,me susurró :
-Con amabilidad... -
Con esas palabras me dejó,y se fué por la puerta de la duchas.
A mi me ha recorrido un escalofrío por toda la columna vertebral, y me he quedado sin palabras...-¡E-E-ESPERAME! -
*Antes de salir,debo asegurarme de no estar rojo cómo un tomate,ya que Haru sospechará algo...*
Pensé para mis adentros.Cuando salí fuera Haru se estaba quitando la camiseta.Me acerqué lo más normal que pude,ya que estaba rojo,nervioso y tembloroso.Al llegar a su lado,se estaba quitando el cinturón pero...
-¡H-H-HARU ANTES DE HACER ESO TIENES QUE PONERTE EL BAÑA-!-
-Lo llevo debajo.De todos modos, ¿qué problema hubiera habido en que me vieses sin los pantalones? -dijo con tono burlón.Me quedé de piedra,no tenía planeado que lo llevara debajo. Y sin poder responder, vino el mismo chico de la entrada, repartiendo las chaquetas del club.
-Aquí tenéis las chaquetas, cuando queráis, podéis meteros en la piscina.-
Después de irse Haru tiró su chaqueta por los aires y se lanzó a la piscina. Era impresionante, parecía que su piel era de porcelana, una musculatura increíble y el bañador le quedaba muy apretado.
Yo me quedé con la boca abierta...
Dejé su chaqueta y la mia en un banco que había cerca y yo me acerqué al borde de la piscina, me senté y con los pies en remojo, Haru y yo, esperamos al entrenador...~---Fin del capítulo 8---~