*narra Kuroo*Nada. Llevaba unos 17 minutos mirando la ventana y nada. Usualmente Kenma se lanzaba a jugar videojuegos sobre su cama después de comer algo en cuanto llegábamos del instituto; en esos momentos me gustaba hablar con el y meterme a su casa a jugar videojuegos. Extrañamente hoy no había visto siquiera asomarse la sombra de Kenma.
Quizás había sido mi imaginación el verlo algo aislado en los recreos y en el camino a casa, Kenma siempre está en su propio mundo, pero hoy se sentía mucho más lejano.Cansado de esperar, me levanté en su búsqueda. Crucé al otro lado de la ventana y pasé al tejado de su casa; hacía tanto tiempo ya que entraba de la misma manera, que ya era prácticamente automático. Otra cosa extraña: la ventana estaba cerrada, Kenma siempre la deja abierta para mi...quizás se olvidó esta vez. Me asomé. Kenma estaba jugando videojuegos en el suelo bastante alejado de la ventana, era obvio que no podría verlo desde mi cuarto si se escondía tanto. Golpee suavemente el vidrio pero no hubo respuesta, Kenma seguía allí tirado; volví a golpear otras dos veces hasta que al fin se puso de pie y abrió la ventana.
- No creo que haga tanto frío como para cerrar la ventana - Dije algo molesto en cuanto abrió.
- Me molestaba que esté abierta - Contestó volviendo a su posición anterior y regresando a su juego.
- Mentiroso, nunca cierras la ventana, sabes que es una puerta más para mi~ - Contesté riendo por lo bajo mientras me acostaba sobre la cama y miraba como jugaba.
- ...¿Qué pasaría si algún día dejo de hacerlo?...- Aunque fue más bajo que un susurro, logré escucharlo, ¿realmente Kenma dijo eso?.
- ¿Qué? - Pregunté en un tono algo severo.
- No dije nada... -
- Ah, habré escuchado mal... - Contesté sin quitarle la vista de encima.
Seguimos así por un buen rato, Kenma no dijo ni una sola palabra y a pesar de que usualmente era algo callado, cuando estábamos los dos sólos nos entreteniamos bastante con nuestras charlas. Tampoco hablé, estaba demasiado sumido en mis pensamientos.
Oh vaya, llegó "la hora del cambio" Kenma al fin se abrumó de jugar tanto con su consola y dejó el mando de lado para sumergirse en su celular, quizás sea una buena oportunidad para romper el hielo...
- Kenma, vayamos a dar un paseo! - Intenté sonar lo más positivo posible, pero aún asi Kenma giro el rostro y negó levemente con su cabeza.
- Lo lamento gatito, pero no es tu decisión! - Grité sonriendo, levantandolo de un tirón y arrastrandolo del brazo hasta la puerta. Recordé que una vez usé esa frase cuando aún éramos niños, Kenma no quería ir a comprarse el equipo cuando empezó a jugar volleyball, así que prácticamente lo obligue a ir hasta la tienda, fue divertido ver sus reacciones mientras le explicaba para que le serviría cada cosa.
Caminamos la primera cuadra en total silencio; anteriormente tenía en cuenta que Kenma se esté comportando así porque se sentía algo mal, pero ahora notaba que realmente no tenía intención de hablarme, parecía estar rogandome que me fuera, incluso se veía apenado de eso. Me detuve frente a el.
- Hey, Kenma ¿Te sientes bien?... -Pregunté; El mencionado miró hacía arriba, topandose con mi mirada y ladeo la cabeza a la izquierda.
- Supongo...No me pasa nada en especial... - Contestó esquivandome y siguiendo el camino, deteniendose luego para esperarme.
- Ya veo... - Me giré y avance hacía él lentamente - Creo que te conozco lo suficiente ya cómo para saber que algo te molesta... -
- Ya dije que no. - Luego de esas palabras, rebusco en sus bolsillos. Con la salida repentina no alcanzó a llevar el celular, inmediatamente se dio cuenta y colocó ambas manos en sus bolsillos.
Ya no puedes ignorarme, gatito?
- Mentiroso, dime que te molesta ¿Tengo algo que ver, verdad?
- No es una mentira.
- Sí que lo es, yo se que sí~
- No hay forma de que lo sepas.
- Claro que la hay, lo sé porque se trata de ti.
- Siempre crees que sabes todo de mi.
- Entonces hay algo que me estés ocultando?
¿Cuando fue que la atmósfera se volvió tan tensa? Ahora ambos permaneciamos en silencio, recalculando y buscando el sentido de lo anteriormente dicho. Kenma sólo se limitó a mirarme y darse la vuelta, renaudando el paso.
- Hey Kenma, respondeme... - Ahora sí estaba empezando a preocuparme seriamente, jamás vi esas expresiones en Kenma, quizas si hay cosas que no se sobre él...
- Ya detente Kuroo, éstas siendo muy insistente. -Quizás si lo era, pero no pensaba dejar esto así, aunque se enojara conmigo.
- No te cuesta nada decírmelo de una vez, ¿Qué ganarias dejando que me muera de curiosidad?- Sostuve su brazo, obligándole a frenar.
- Basta Kuroo, no hay nada que decirte!- Con un brusco movimiento se soltó de mi agarre.
- Díos, Kenma! ¿Porqué es tan complicado hablar contigo?
- ¡¿Y como quieres que lo sepa?! Yo no tengo tu facilidad, no puedo ir con un grupo de desconocidos y volver con un monton de amigos! No tengo tu talento para hablar con las mujeres! Mi único mejor amigo tiene millones como yo! Y a mí sólo me queda mirarte! En el club, con los de otras escuelas, con tus compañeros de clases y con esa chica que ya debe de ser tu maldita novia! ¿Acaso sabes lo mucho que duele eso? No! No lo sabes! - Contestó gritando con el rostro enrojecido y los ojos vidriosos.
- Claro que no lo sé! Jamás podría saber tus sentimientos de la nada!! Y no tengo una novia! No sé de quien diablos hablas! -
- Claro que lo sabes! Siempre viene a buscarte en los recreos y después de las prácticas y actuas cómo si yo no existiera! Te ví abrazandola esta mañana! Y la escuché hablando con su amiga de lo mucho que le gustabas! - Ahora las lágrimas se asomaban por el rabillo de sus ojos. No resistí el impulso de abrazarlo fuertemente.
- Sueltamee! - Gritaba revolviendose entre mis brazos.
- Estoy feliz - Dije ignorando sus comentarios, escondiendo mi rostro en su hombro y sintiendo cómo dejaba de moverse - Siempre intentas actuar tan distante, como si realmente nada te importara, me alegra que estés celoso, quiere decir que te preocupas por mí -
- Y-yo... - Cubrí su boca evitandole seguir.
- Nos conocemos desde niños, nadie puede tomar tu lugar, Kenma, siempre fuiste el número uno... No, ¿En que puesto pensabas que estaba esa chica? - Pregunté esbozando una sonrisa, Kenma ya no lloraba.
- Eh? Si es tú novia debería de estar en el primer puesto, verdad? Aunque supongo que en una lista de chicas, ya que pondrías primero a tus amigos en una lista de chicos...
- Okey, parece un buen puesto, ahora deja de pensar eso y colocate en el puesto de la chica.
- Eh? Que?...
- Es una declaración, Kenma, pensé que eras inteligente! - Contesté riendo al ver a Kenma sonrojarse. - Y bien? Quieres ser mi número uno en todas las formas?
- P-Pero Kuroo, nadie puede tomar tu puesto...
- Lo sé - Dije abrazandolo aún más fuerte sintiendo cómo sus brazos se enroscaban en mi cuello y esta vez Kenma hundía su cabeza en mi pecho.
- Hey, Kenma, te amo -
- Yo también, idiota... -
- Oh Kenma, acabo de darme cuenta que es la primera vez que me gritas, ¿sabías que te ves suuuper tierno haciéndolo? Realmente hay cosas que no sé, eh?...Kenma, recién me dijiste idiota? Estas creciendo muy rápido! Adónde vas? Kenma, esperame!!
-
Deben de odiarme por el atraso, lamentablemente el ritmo va a seguir así hasta que pueda tener un capítulo listo antes, tengan paciencia! Gracias por sus votos!, muchos están agregandome a sus listas, de enserio les agradezco! El KuroKen ahora esta confirmado (? Gracias una vez más y nos vemos en el siguiente capítulo! ^^
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One More Time
FanfictionHinata Shouyo es un estudiante de la secundaria Karasuno y un jugador en el equipo de voley de este. Sin embargo algo lo estaba incomodando desde hace un tiempo, y esto involucraba a su compañero, Kageyama Tobio, de una manera que jamás imaginaria...