I like to think about you

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32: Me gusta pensar en ti.

Pensar en él no cuesta nada, menos cuando no está a su lado.

A veces, y solo en contadas ocasiones, se dedica a pensar realmente en lo que significa él para ella. Se dedica a pensar en las sensaciones que le provoca cuando están juntos, y sus lindas palabras que suenan aterciopeladas en sus oídos.

A veces, incluso se permite sonreír y reír al recordar sus ocurrencias. O sus muestras de afecto. Se permite revivir esos momentos que parecen tan lejanos ahora, todas esas sonrisas, y esos momentos en que la seguridad y la imponente figura de Niall, flaqueaban ante pequeñas y tímidas sonrisas de su cuerpo. O cuando el nerviosismo le ganaba, y sus mejillas se teñían de un casi imperceptible color rosado.

Le gusta. Le gusta mucho pensar en él. En lo mucho que significa en este momento de su vida, y en lo grandioso que ha sido que haya llegado a ella. 

Jamás se le pasó por la cabeza, en ningún segundo, la mera idea de conocer a alguien como él. Jamás pensó en que estaría ahora, suspirando por un chico como él. 

Nunca pensó tampoco en enamorarse de él. No lo vio venir.

Pasó tan rápido, y de la nada. De un momento estaban hablando por teléfono, y sonriendo a la pantalla, y al siguiente estaban mirándose a los ojos diciéndose cosas que no podían ser pronunciadas por sus labios. O al menos por los de ella.

Y le asusta.

Siempre llega a la misma conclusión. El miedo. Ese lado oscuro dentro de su cabeza, que la tiraba en sus momentos de flaqueza. Ese lado que gritaba desgarradoramente cosas que debía y que no debía hacer. La incitaba a bloquearse y a cerrarse herméticamente en su propio mundo lleno de personas oscuras, con ojos rojos, que ni siquiera podía ver.

Sus peores momentos son cuando cae en esa oscuridad, donde ni siquiera la brillante luz de Niall puede sacarla de ese abismo; es imposible. Y cada vez, vuelve. Una y otra, y otra vez, porque es débil, y no puede afrontar ciertas situaciones.

Vive con el miedo latente, de cada vez poder volver a caer en ese oscuro lugar. Vive con el miedo de no ser suficiente valiente y fuerte como para salir de ahí por sí misma, y poder tomar la mano de Niall para salir por completo.

Nunca es suficiente valentía, y nunca es suficiente la fuerza que Niall pueda poner en salvarla como para sacarla entera. Siempre queda su último pie metido ahí dentro, donde esos ojos rojos y sus sonrisas cínicas tiran y vuelven a llevársela como una pluma en un día de viento.

Y por otro lado, está la que supuestamente es llamada razón. Esa pequeña vocecita que siempre rueda los ojos, y que siempre está susurrando en su oído que todas las promesas de amor son una mentira. Que nunca nada se cumplirá, y que el cuento de hadas que Niall ha creado es solo eso. Un mísero cuento de hadas, que no es más que solo ficción creada a partir de palabras bonitas y sonrisas, que no es nada real.

En que nunca habrá un para siempre, en que nunca habrá un final feliz. 

La razón siempre grita en negro, como si toda fuera tristeza y realidad, cruda realidad. Como si siempre tuviese que haber una nube negra sobre su cabeza, recordándole que no debe dejarse influenciar por las supuestas promesas vacías de Niall.

Y como no; siempre termina haciéndole caso a la razón.

Siempre se deja influenciar por las voces de su cabeza, y no por su corazón. Siempre intenta buscar lo mejor para no destruirse a sí misma, los argumentos y las acciones más racionales para no terminar con el corazón roto.

Hay momentos en su vida, donde está tan sumida en la oscuridad, que todo lo que sale de ella es negro. Y siempre termina abarcando a todos los demás con ella, llevándose su luz, y dejándolos oscuros y tristes. No entiende muchas de las cosas que hace usualmente, no entiende porque las acciones racionales siempre terminan hiriendo al otro, no entiende porque no puede brillar por sí misma, y debe brillar gracias a la desgracia de los demás.

Necesita aprender a hacer sus cosas por su cuenta. Y a darse cuenta de sus errores, a fijarse a quien le está haciendo daño, y como remediarlo. Necesita comenzar a actuar con su corazón, no con la razón.

Necesita poder deshacerse de su oscuridad, de una vez por todas.

Y mientras que no pueda hacerlo sola, tiene a Niall a su lado. Siempre ahí, acompañándola, sosteniendo su mano, y sonriéndole con ternura. Niall siempre está ahí, siempre estará ahí, nunca se irá, incluso si Jasmine así lo quiere.

Él es su única esperanza, su única salida a la luz.

Él es quien puede llevarla por el camino más oscuro, pero tomados de la mano, siempre llegarán a la luz. Y eso, es algo que Jasmine aún no quiere comprender.

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¡Hola! ¿cómo están? espero que bien :D. Espero que no sea una desilusión éste capítulo solo porque es muuuuy corto comparado con todos los demás :(, pero es un capítulo muuuy importante, contiene explicaciones de muchas cosas que quizá no quedaron totalmente claras en su momento.

Espero sus votos y comentarios -auncuandohanbajadonotablemente:(-, ya saben que pueden pedir dedicación, y/o entrar en el grupo de wsp ♥. Yyyy, lamento (? informarles, que desde aquí, o desde el siguiente capítulo más bien; comienza la recta final de Cinderella (todas lloran, ah 😢)

No sé cuantos capítulos exactamente quedan, pero ya son los últimos de esta gigante aventura ♥ espero verlas, o leerlas, hasta el final, y eso :) las amo infinitamente ♥

tw: blessedbylouist; por cualquier duda que tengan :)

xoxo, DanaHofer.



Cinderella. [Niall Horan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora