9

10.1K 1.2K 545
                                    


Louis.

Louis, habitaba en su cabeza desde que se fue de su casa la noche anterior, sentía la incontrolable necesidad de poder verlo nuevamente. Quería apreciar sus bellos ojos azules, deleitarse con esa tierna sonrisa alojarse en la comisura de sus labios y sobre todo quería sostener su mano, y acariciarla.

—joder, joder, joder... —susurró exasperado cuando notó que louis venía caminando en la acera de la otra calle para su casa, por lo que rápidamente se corrió de la ventana para caminar con sus muletas hasta su repisa y esparcirse algo de su perfume (que sabía que louis amaba), sintiendo tiempo después, cuando se sentó en su cama, que el timbre sonó oyendo como su madre caminaba hasta la puerta principal y comenzaba a hablar con alguien. Que claramente Harry sabía que era Louis, por lo que arreglo su cabello, lanzo las muletas y busco que tomar para simular que hacia algo, por lo que cogió un libro que había cerca de su mueble de noche y lo abrió en una página cualquiera para luego sentir su puerta y soltar un despreocupado "pase" que hizo sacar una espontánea sonrisa en louis, del otro lado de la puerta.

Y fue cuando sus miradas se encontraron que harry volvió a sentir ese cosquilleo, y esa pequeña adrenalina recorrer sus venas. Tan solo con ese simple acto, que puso sonrojado a ambos.

—ho-hola... —susurro el ojiazul cerrando la puerta a su espalda y Harry dejo el libro sobre sus muslos para mirarlo apoyarse en la puerta, un tanto nervioso.

—hola. —habló de pronto el rizado— Pensé que no ibas a venir...

Louis soltó una risita nerviosa y miró sus delicadas manos jugando levemente con sus dedos para luego mirar nuevamente a Harry.

—jamás dejaría de venir. —admitió avergonzado y harry sonrió mostrando los hoyuelos, para luego apuntarle con su palma la cama a su lado.

—ven... —susurro sonriente y Louis camino hasta su lado, sentándose a una distancia prudente, mirando aquel póster con la película que ambos amaban. Harry miro su perfil y sonrió al notar que lo tenia a su lado— ¿como estas?.

Louis volvió a la realidad y giró su rostro para mirarlo. Vio sus ojos verdes y sintió algo en su pecho, algo incontrolable que iba en crecimiento.

—b-bien. —susurro nervioso.

—¿estas seguro? —louis asintió.

—claro. —miro el libro que este tenia en sus piernas y sonrió al leer el título.— ¿Por qué lees eso?

Harry desvío su mirada del rostro de louis para mirar el libro y sonreir prontamente cuando leyó la portada del libro.

—n-no lo sé... —admitió.— Creo que me gusta saber el tejido, ya sabes... Me gusta ayudar a mi madre.

¿qué demonios hacía el libro de tejido de su madre en su alcoba? —se pregunto el rizado y Louis rió.

—eres un gran hijo. —harry lo miró y se avergonzó, pues sus mejillas sin evitarlo estaban sonrojadas.— ¿sabes tejer algo?.

—no, en verdad no. —el ojiazul asintio— ¿y tú?.

—tampoco, no soy muy bueno haciendo cosas manuales. —hrry asintió y dejo el libro en su mesita de noche para luego recargar su espalda a la pared, y superar. Louis lo imitó en silencio. Y harry sin más preámbulos tomo su mano, la acaricio y Louis sonrió sintiendo su pecho bombear frenético.

—me gustan tus manos, son suaves y calidas. —admitio el rizado y louis sonrió avergonzado, acomodó sus gafas y sintió su pecho inflamarse.

—gracias, a mi las tuyas... —sonrió sincero.

Endúlzame. (l.s.) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora