Fast Enough -parte 2 | The Flash (En edición)

Capítulo 11

-¿Qué hora es?-mi padre estaba algo mareado por los medicamentos que le ha dado.
-Es medio día.-dije riéndome.-Tienes que seguir descansando.
-No, necesito reforzar la seguridad del laboratorio.-intentó levantarse.-Mi cuerpo...-se quejó.
-Quédate ahí.-lo detuve para que siguiera acostado.-Te traeré algo de comer, lo necesitas.

Le di un beso en la frente y caminé hacía el cortex donde estaba Cisco, con una hamburguesa de Belly Burger para mi padre.

-¿Cómo sigue?-Cisco me dio la bolsa donde estaba la comida.
-Mejor.-le sonreí.-Por favor, modifica los códigos de seguridad del laboratorio. Mi padre ha estado insistiendo con eso.
-En seguida.-me guiñó el ojo.
-Por cierto, ¿y Barry?-me señaló hacía la habitación donde está la corredora cósmica.-Gracias.

Caminé hasta la habitación y me quedé observándolo desde la ventana para no interrumpirlo.

-¡Ouch!-Barry cayó de la caminadora, estrellándose contra la pared fuertemente.
-Barry...-corrí hasta él para auxiliarlo.-¿Estás bien?
-Si, gracias.-se levantó con cuidado. Volvió a subirse para correr y de nuevo se tropezó.-Esta vez puedo levantarme.
-¿Qué intentas hacer?, ¿volver a lastimarte la espalda?-dije un poco enojada.
-No lo entiendes.-se sentó en la orilla de la caminadora.-Necesito ir más rápido.
-Creo que te estás mortificando demasiado.-me di la vuelta, no quería discutir con él.
-¡No!-gritó.-Nina, Zoom es más rápido que yo y ya me lo demostró de la peor manera.-me miró fijamente.-¿Qué es lo que sigue?, ¿dejar que te mate enfrente de mi como lo iba a hacer la otra noche?
-Barry...
-De todas las cosas que puede hacer, eso es lo que menos le voy a permitir.-se hizo un lado y salió de aquí.

Toda esta situación me duele, primero Barry, luego mi padre, ¿quién sigue? Solo no quiero que les pase algo a Cisco y a Caitlin, a ellos los quiero mucho como para tener que aguantar otra situación como ésta.
Salí de la habitación y caminé hacía Cisco que ya estaba desocupado.

-Acompáñame a Jitters.-él me miró de una manera extraña.
-¿Qué?
-Necesito que platiquemos de algo serio.-le guiñé el ojo. Busqué mi mochila que estaba en una de las mesas de metal y la tomé.-Vamos, tú conduces.-le aventé las llaves de la camioneta del laboratorio.

Quería que Cisco entrara en confianza con respecto al tema de sus poderes. Desde que Harrison lo divulgó, no se ha vuelto a tocar el tema, y él, al igual que todos los meta humanos, necesita práctica para desarrollar sus poderes.

-Bien... Aquí estamos.-tomamos asiento en una de las mesas del fondo.-¿De qué querías hablar?
-Sobre ti.-empecé a buscar algunas cosas en mi mochila.
-¿Sobre mi?-se rió nerviosamente.-Oh, ya veo a dónde va todo esto... Quieres hablar sobre mis poderes.-dijo en voz baja.
-Claro.-le guiñé el ojo.-Necesito que practiques con esto.-le puse en la mesa una pulsera con una estrella de mar mía, una pelota de béisbol de Barry y el casco de Jay.
-Espera, ¿trajiste el casco de Jay?-se alteró.
-Si, pero él no lo notará.-mentí.-Necesito que los percibas.
-¿Aquí?-asentí.-No puedo, es un lugar público.
-Tienes miedo.-dije retándolo.-Alguien es una gallina.
-No tengo miedo, es solo que...
-Gallina.-seguí.

Me miró algo molesto, y tomó primero mi pulsera, la tocó cuidadosamente y cerró los ojos para concentrarse, al final los abrió y sonrió.

-¿Qué viste?-sabía perfectamente lo que él había percibido.

~*~
Flashback
-Ten contigo siempre esto.-me puso en mi muñeca, una pulsera con una estrella colgando.-Tenla siempre que me eches de menos, ¿de acuerdo?-me dijo dulcemente.
-Si mami.-me dio un pequeño beso en la nariz.
~*~

-Esto te lo dio tu madre, ¿cierto?-me miró tristemente.
-Fue el día que fuimos a la playa con mi papá.-me la puse.-Desde ese día, siempre la tengo conmigo.-sonreí.
-Lo siento.-me tomó de una mano en forma de apoyo.
-No te preocupes, ahora, necesito que percibas el casco de Jay.-lo puse en medio de la mesa.

Cisco estaba por tocarlo, pero recibió una llamada de Barry. De seguro Jay ya se había dado cuenta que había tomado su casco sin permiso.

-Alguien está en problemas.-me miró seriamente.-Vamos.

Me ayudó a guardar las cosas de nuevo en mi mochila de manera rápida para volver. Durante el camino, lo único que podía pensar era en la excusa que podía darle a Jay.

-¡Tomaste mi casco sin permiso!-el gritó de Jay retumbó por todos lados.
-No te permito que le grites así a ella.-Harrison se puso a la defensiva cosa que me sorprendió.-No lo volverá a hacer.
-Lo siento Jay.-dije algo apenada.-Solo quería que Cisco practicara con sus poderes.
-¿Viste algo?-miró a Cisco de una manera nerviosa.-Responde por favor.
-No, yo no vi nada.-se defendió.
-Simplemente, no lo vuelvas a tomar sin permiso.-Jay respiró profundamente y salió del cortex sin mirar a nadie.

Miré hacía dónde estaba mi padre para ver si había despertado después de todos estos gritos, pero se encontraba dormido con tantos analgésicos que Caitlin le recetó.
Todos regresaron a lo que estaban anteriormente y yo, me fui detrás de Harrison para agradecer que haya calmado a Jay.

-Muchas gracias, Harry.-le sonreí.
-De nada, no merecías que te gritara de esa manera.-tomó unos guantes y siguió trabajando en algo.
-¿Qué haces?-me acerqué hasta donde estaba él.
-Intensifico el suero.-era realmente interesante lo que hacía.-¿Te gusta la ciencia?-asentí.-Me alegra.
-Harry...-estaba deseando que la pregunta que iba a hacer, no lo incomodara.-¿Cómo es Jesse?, digo, ya sé que es como yo pero...
-Jesse no es tu doble.-me respondió. Eso hizo confundirme.-Es ella.-me mostró una foto de ella que tenía en su billetera.
-Es linda.-es de tes blanca, de estatura media, cabello corto.-Sabes, a mi madre también le gustaba el nombre de Jesse.
-Si, Tes le puso ese nombre.-sonrió, tomó la foto y la volvió a guardar.
-Entonces, cuéntame cómo soy en tu tierra. Quiero saber todo, si soy meta humana, si soy mala o buena.-estaba realmente intrigada.
-Lo único que tienes que saber es qué estás viva, te fuiste de casa y ya.-su sonrisa desapareció y volvió a trabajar con el suero.

No volví a molestarlo, me volteé y noté que Caitlin ya estaba junto con mi padre verificando que todo estuviera en orden con él así que caminé hasta donde estaba ella.

-Hola.-le sonreí.-¿Todo bien con él?
-Si Nina, ya estoy mucho mejor.-contestó mi padre frustrado.-Solo quiero levantarme de esta camilla.
-Lo hará Dr. Wells.-le hizo unas últimas revisiones a los golpes que tenía en la cara.-Él ya está mejor.-me guiñó el ojo.
-Eres muy impaciente.-comencé a reírme.
-Dr. Wells, han dejado esto para usted.-Barry le entregó un sobre.
-Es una invitación.-dijo él al abrirlo.-Es para la fiesta que había dicho la Dr. Mcgee.
-¿Cuándo es la fiesta?-dije entusiasmada.
-Pasado mañana.-dijo triste.-No estaré bien para ese día. Creo que no iré.
-Yo me puedo hacer pasar por ti.-Harrison se paró a un lado de un estante.-Somos iguales y creo que nadie lo notará.
-¡Es una fantástica idea papá!-traté de animarlo para que aceptara.
-¿Qué dices Wells?
-Está bien.-Harrison le dio la mano.-Pero, más te vale que no arruines esto.
-Lo prometo.