No confiaba en absolutamente nadie. Hoy en día, sigo desconfiando de mucha gente.
Éramos cinco, contándome. No éramos muy amigos, y yo nunca llegue a confiar totalmente en ellos; aun así, les conté lo que nunca le conté a nadie. Pero, cinco amigos guardan bien un secreto, si cuatro de los cinco, están muertos.
