7. Café

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Café

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/Harry/

— Amm no quiero que sientas que te desprecio, ni a la pizza, sólo que no creo que sea correcto, te acabo de conocer y eso se podría mal interpretar y yo... —

Harry no termino de hablar cuando Nathan lo interrumpió.

— Hey hombre, tranquilo, está bien, entiendo, pero no me refería a mi cuarto, bueno, si es mi departamento, pero yo no lo estoy usando, vivo en una casa cerca de aquí y estoy rentando mi departamento, ¿Te interesa? —

Harry volvió a respirar, no era algo difícil de responder, era un completo desconocido, sólo tenía que decir...

— Si —

El rizado entró en pánico de nuevo, esas no eran las palabras que tenía que decir.

— Ok, si quieres te llevo, me queda de camino, y por lo que veo no tienes mucho dinero, o sentido de ubicación —

Nathan habló como si conociera a Harry desde hace años.

— Pero... ¿Estás seguro? —

El rizado no había vivido mucho en el mundo como para conocer la malicia o el crimen, él sólo pensaba que Louis podría ponerse celoso por que Harry aceptaba irse con alguien más.

— ¿Por qué no lo estaría? Espera, no contestes eso, mejor vámonos, mi esposa y Maly me esperan en casa —

El chico señaló con su mano su carro y ambos entraron en el, se abrocharon los cinturones y empezó el camino.

— ¿Quien es Maly? —

Comentó Harry tratando de hacer platica, una vez que escucho que Nathan estaba casado su preocupación por los posibles celos que Louis pudiera tener desaparecieron.

El ruloso se sentía en confianza, se sentía casi bien, su mente estaba en otro lado, divagaba mucho, pero ese chico le daba mucha tranquilidad, y eso se sentía bien, Harry nunca había tenido un mejor amigo, Nathan sería el primero.

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/Louis/

— ¿Qué se supone que debo hacer? —

Decía para sí mismo.

— Ojalá Harry estuviera aquí —

Susurraba mientras tallaba sus ojos debido a que empezaban a arder avisando que las lágrimas caerían en cualquier momento.

Siguió caminando hasta que se encontró en un parque, se tiró en el césped boca arriba para poder apreciar las estrellas, limpio con el puño de la sudadera que llevaba las lágrimas que rodaban sin permiso por sus mejillas, coloco sus manos bajo su cabeza, cerró los ojos con mucha fuerza para alejar todos los pensamientos tristes que se encontraban en su mente, no paso mucho tiempo hasta que se quedo dormido.

— "Ya están más cerca, sólo tienen que poner atención" —

Susurro una voz muy cerca de su oído haciendo que Louis se levantará de golpe, pero algo había cambiado a su alrededor, flores, muchas y hermosa flores habían crecido al contorno de la siluetas donde Louis había dormido.

Recordó la primera vez que toco aquella planta y ésta comenzó a crecer hacia su brazo, aún no controlaba sus poderes, y tenía que aprender a hacerlo pronto si quería encontrar a los demás Dioses y a su querido Harry.

Caminó por aquel parque hasta encontrar una banca, se sentó y comenzó a observar todo lo que tenía enfrente de él, por alguna razón ayer en la noche no había notado aquel edificio enorme, al parecer eran departamentos, pero algo más le llamaba la atención, desde donde estaba Louis se podían ver como unas cortinas se movían con mucha intensidad a través de una ventana.

— ¡Harry! —

Gritó lo primero que paso por su cabeza, sin pensarlo demasiado se acercó hasta aquel edificio dónde el portero lo detuvo pidiendo que se identificara, Louis no supo que hacer y decidió irse pero al momento de darse la vuelta choco con un chico de cabello negro y ojos grises, vestía muy formal y llevaba dos cafés.

— Lo siento —

Dijo Louis un poco molesto debido a que el portero no lo había dejado pasar.

— No te preocupes amigo, lindo día —

Ese chico era muy amable, demasiado para el mal humor de Louis.

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/Harry/

— Traje café —

Comento Nathan mientras entraba al departamento donde Harry había pasado la noche.

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/Liam y Niall/

— Viene detrás de nosotros —

Dijo un apresurado Niall mientras corría al par de Liam.

— ¡Ya los sé! Sólo sigue corriendo —

Contestó Liam con la respiración agitada.

— ¡Aquí! Por esta calle, vamos —

El rubio trataba de encontrar un atajo para llegar al centro comercial que se veía desde el muelle donde habían estado el día anterior.

— Llegamos, lo perdimos, ¿A dónde fue? —

El castaño trataba de que su respiración se tranquilizará mientras volteaba a todos lados en busca de lo que los perseguía.

— Antes que nada, ¡¿Que demonios era eso?! Y ¡¿Por qué nos perseguía?! ¡Eso no era Goltem! —

Niall se encontraba asustado pero más que nada alterado por no entender qué era lo que los seguía, no tenía un cuerpo pero se sentía una mirada, era una sombra, una sombra con ojos cafés, era una sensación de...

— ¿Recuerdas el 5to elemento? —

Liam dijo con suma atención a la reacción de su amigo.

— Si, ¿Pero no era sólo un mito? —

Niall habló con incredulidad.

— "Dijo el Dios del Agua" —

De manera sarcástica el castaño sonrío a su compañero, volvió a retomar la seriedad después del pequeño golpe que Niall le dio en el brazo.

— Bueno, es él —

Liam dijo como si fuera lo más normal del mundo.

Dioses elementales (Larry Stylinson) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora