21. Cuentos de Hadas

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Cuentos de Hadas

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/Harry/

El rizado siguió caminando por el lugar, era como una especie de prado seco y vacío, estaba a punto de rendirse cuando cayó a través de un hoyo en la tierra cubierto por hojas y pasto para evitar que se viera a simple vista.

Harry caía y por más que trataba de agarrarse de algo no había nada de qué detenerse hasta que se puso a pensar en aire... El aire se acumuló bajo el haciendo su caída más lenta hasta tocar el piso.

— Al fin llegas —

Una voz ronca y femenina llamó la atención de Harry quién se levantaba del piso mientras se sacudía un poco y se peinaba.

— Teahla... —

El rizado estaba nervioso, no sabía dónde estaba ella, sólo escuchaba su voz y pasos, se escuchaban pasos por todos lados.

— ¿Qué necesitas? ¿Por qué estás aquí? Oh espera... Lo sé, ya se dieron cuenta que Goltem terminara con la raza humana y ahora quieren deshacerse del trato que hicimos, ¿Cierto? —

Teahla apareció entre las sombras y lo que más resaltaba eran sus ojos rojos llenos de poder y de maldad.

— S-si, Si, ¿Hay alguna manera? Debe haberla —

Harry comenzó algo tímido pero recordó que debía mostrarse fuerte y así lo hizo, su tono cambió a uno más grave y seguro, cruzó sus brazos y miro directamente a la bruja.

— Hagamos un trato, yo dejaré vivir a los humanos y tu... ¿Recuerdas qué es lo que los trajo aquí? —

Teahla se sentó en una silla frente a una mesa café rojiza llena de papeles y cosas extrañas e invitó a Harry a sentarse en la silla de adelante a lo cual éste se negó y se mantuvo de pie frente a la mesa sin dejar de ver cada movimiento de la bruja.

— Tú —

El rizado escupió la palabra mientras miraba fijamente los ojos de la mujer de manera desafiante.

— Ja-Ja que gracioso eres Styles, ¿Quieres hacer el trato o no? —

La bruja fingió reír durante unos segundos antes de endurecer sus facciones y levantarse de manera brusca de la silla para esperar una respuesta.

— Bien, si quiero el trato..., nosotros firmamos un contrato porque queríamos estar juntos, porque nos amábamos... nos amamos —

Harry tuvo que ceder ante la presión y la intensa mirada de Teahla.

— ¡Exacto! El amor, y bueno, ¿Has visto cuentos de hadas, peliculas o algo así? ¿Recuerdas cuál es la manera en la que destruyen los hechizos? —

La bruja tomó asiento de nuevo y obligó al ruloso a sentarse en frente de ella ésta vez sin preguntar.

— Con un beso —

El rizado retomó la expresión seria mientras que en la mujer aparecía un sonrisa de oreja a oreja dejando ver sus dientes blancos, ella rompía los estereotipos de brujas feas verdes y nariz grande, ella podría fácilmente ser una modelo de Victoria Secret.

— Pero no cualquier beso... ¡Un beso de amor verdadero! Qué bonito, un poco cliché ¿No crees? Bueno, no importa lo que creas, esa es tu solución porque quiero y puedo —

Teahla suspiró para luego ver sus uñas en modo de superioridad mientras de reojo veía la reacción confundida de Harry.

— ¿Un beso de amor verdadero? Pero... Un segundo... ¿Por qué me estas ayudando? ¿Qué ganas? —

El rizado se levantó de golpe al darse cuenta de lo que sucedía.

— Nada, no gano nada... y es por eso que estás aquí —

Teahla se levantó de la silla y estaba a punto de caminar cuando Harry la detuvo.

— ¿Aquí? Es una trampa... ¡Es una trampa! T-tú me trajiste aquí, tu puedes evitar que te encuentren, sin embargo, me dejaste verte, me dejaste llegar aquí y luego.... No hay salida ¿Cierto? —

El rizado comenzaba a comprender todo y su cabeza daba vueltas, sin embargo, se mostraba serio, ocultaba todo el terror que se manifestaba en su interior.

— Cierto —

Comentó la bruja sin ver a los ojos al Dios.

— Estoy atrapado, genial, siempre siendo tan estúpido creyendo y confiando en todo el mundo —

Harry se giró y pateó con fuerza una de las sillas donde estaba.

— Cierto —

Teahla se giró y volvió a sonreír cínicamente.

— ¡Hey! No tienes que ayudarme tanto —

Se quejó el rizado.

— Bueno, ya que te diste cuenta me tengo que ir, tengo tantas cosas que hacer... —

Teahla retomó su camino pero Harry, de nuevo, la hizo detenerse.

— Espera... ¿Cuánto tiempo llevas planeando esto? ¿Por qué incluiste a Goltem? Él tenía un trato con los Dioses y podrá ser muy malo pero siempre cumple su palabra, ¿Qué hiciste? —

Miles de dudas y preguntas se formulaban en la cabeza del rizado.

— Ustedes lo liberaron —

Soltó como si nada la bruja antes de dar otro paso para alejarse.

— ¿Nosotros? Louis y yo... Pero, se necesitan las 4 firmas para deshacer el contrato —

Harry avanzaba hasta donde la mujer para evitar que se fuera sin antes contestar sus dudas.

— No, con la mitad basta y 2 es la mitad de 4, ¿Estamos bien con las matemáticas? Noté que te costó trabajo aprender a usar el teléfono ¿Necesitas ayuda? —

La bruja se dio por vencida y regresó a su silla mientras una risa burlona se colocaba en su rostro.

— Ja-Ja si está bien —

Harry respondió con sarcasmo.

— Cuando firmaron no era realmente un contrato para transportarlos a tierra en forma de humanos, era la liberación de Goltem —

Teahla tomó algunos papeles de la mesa y los acomodó mientras buscaba uno en especial.

— Tú conocías nuestra desesperación por ser humanos, tú nos utilizaste para tu propio beneficio, bruja —

Los ojos de Harry comenzaban a cristalizarse por el coraje y sentía cómo su sangre hervía, se sentía usado.

— Y eso que no te he dicho que ustedes se enamoraron por causa mía —



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N/A:

Perdón por no publicar, tenía una especia de bloqueo creativo y quería terminar la historia antes de publicarla ya que soy muy indecisa y cambiaba una y otra vez los capítulos y la trama pero bueno, ya casi tengo escrito el final, sólo me falta redactarlo bien, con suerte mañana lo subo y si no el martes ya está.

De nuevo una disculpa y espero les guste.

Dioses elementales (Larry Stylinson) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora