Disaster • Dylan O'Brien

Cuatro.

No pude dormir durante toda la noche, observe la hora en mi pequeño reloj y marcaba exactamente las 7:46 am, decidí hacer mi cama, ordenar un poco mi habitación entre otras pequeñas cosas que me faltaba hacer aquí.  Cuando tuve todo perfectamente en su lugar, entre al baño que se encontraba en mi habitación y me di un baño con agua fría para poder despertar. El sueño me consumía pero el problema era que no lograba dormir.

Cuando terminé, decidí por ponerme una falda negra ajustada que llegaba hasta las rodillas, una blusa blanca y unos tacones altos negros. Me tomé el cabello en una coleta alta, me mire al espejo y lucía realmente bonita y formal. Eran las 8:43 am, en 12 minutos más tendría mi segunda sesión con Dylan, hoy sería puntual. Tomo mi delantal blanco, mi agenda, un lápiz y el informe de Dylan.

—Espero que hoy no seas demasiado difícil, O'Brien —dije para mi misma.

Salí de mi habitación dejándola con seguro y me dirigí a la sala donde me tenía que encontrar siempre con Dylan, la sala 504. Estaba un poco nerviosa y no sabia el porqué.

—¿Señorita Thompson?

Al girarme me encontré con el señor Blair, tan formal y elegante como siempre.

—Buenos días señor Blair —le sonreí— Me dirijo a mi sesión con Dylan O'Brien en estos momentos —señale con mi pulgar hacía atrás de mi.

—Oh si, no se preocupe, no le quitare mucho tiempo —camino a mi lado y le seguí— Quería saber como estuvo la sesión de ayer con Dylan. ¿Fue muy difícil?

—Ayer.. Estuvo bien, de apoco tengo que hacer que me tenga confianza y poder hablar en profundidad sobre los problemas que tiene él y bueno, su mente —mordí mi labio incomoda y parando fuera de la habitación 504.

—Si el paciente se comporta de una manera realmente extraña, tiene que solo llamar a seguridad —me entrega un pequeño objeto que al centro tenía un botón rojo— Presionando este botón, llegara de inmediato seguridad ¿lo entiende?

Claro que entiendo, no soy estupida.

—Lo entiendo perfectamente señor Blair —le sonrío— Ahora con su permiso, tengo que entrar a mi sesión con O'Brien, nos vemos y gracias —señaló el botón de seguridad.

—De nada, que tenga suerte con el paciente —al decir esto, se retira. Pongo mis ojos en blanco y entro a la habitación.

Idiota, ¿porque todo el mundo mira a Dylan como un loco desquiciado? Se que está un poco loco pero, al verlo no lo puedo ver así, el es distinto. Distinto en todos los sentidos.

Suspire poniéndome el delantal blanco y me senté en mi lugar, deje mis cosas sobre la mesa y revise el informe de Dylan, mire la fotografía que había de él y sonreí.

FlashBack.

Me encontraba mirando la televisión cuando en las noticias dicen que un niño de tan solo 13 años asesino a su familia de una manera terrible, me acerque a mi madre que se encontraba cocinando y le pregunté.

—Mami, ¿porque alguien mataría a su familia?

Ella se impresionó ante mi curiosa pregunta, a lo cual ella me sonrió y se agachó para estar a mi altura.

—Por que hay gente que nace o con el tiempo tienen problemas de aquí —señala su cabeza— Y necesitan que los atiendan unos doctores especiales en eso, ellos se llaman psiquiatras o psicólogos.

—Ah —arrugo mi pequeña nariz— Yo jamas te haría daño, mami.

Fin FlashBack.