Marco POV
El Light Orbe, es un objeto tan raro y antiguo, con un poder inmenso, mucho mayor que el de la Varita Mágica de los Butterfly. Muchas personas desean su poder, lo anhelan, pero es prácticamente imposible de encontrar, solo existe uno, y está perdido desde haces siglos.
Saber que mi "padre", me quería solo para una misión imposible, o bien, suicida, me molestó, por lo cual sin pensar un poco en mis acciones, me levanté rápidamente, empujando la silla en el progreso.
—¡Estas loco ¿o qué te pasa?! — grité en su cara, era una idea absurda la que pasaba por su mente — ¡¿Cómo piensas que encontremos eso?! ¡Eres un demente!
—¡¡Para!! —levantó Ludo la voz, ocasionando que tragara en seco, y una gota de sudor cayera por mi frente —¡Soy tu padre, no lo olvides! ¡Me respetas o te irá mal y sabemos que un castigo de mi parte no es algo que quieres vivir de nuevo! ¡Solo eres un inútil que solo es mitad monstruo, y yo soy el Rey! ¡¡Cállate y siéntate Marco!! —sin rechistar un segundo hice lo que pidió.
Asentí mientras bajaba la mirada, mi padre era alguien de temer, increíble guerrero, con o sin armas, además hay que agregar que nunca en toda mi vida le he vencido, mucho menos en un momento como este en el cual no tengo armas.
— Bien —sonrió mostrando sus dientes al verme obedecer —pasaré este momento por alto — me señaló con su dedo índice —¡solo está vez! Porque la misión es importante, ¿de acuerdo? — su voz era calmada.
Pero, yo sabía que por dentro hervía de furia.
Asentí de nuevo.
— ¡¿De acuerdo?! — gritó, de nuevo, ahora con voz molesta.
— ¡Si señor! —era mi padre, y nunca le llamé de esa manera.
— Bien —volvió con su horripilante sonrisa, para caminar alrededor de la mesa y detenerse detrás de la silla donde me encontraba.
Sabía que le divertía todo este asunto.
— Ahora vete — las ordenes salieron de una manera tan natural y dura de su boca — mañana por la mañana entrenaremos, tú, yo, y obviamente tus amigos, así que llámalos y asegúrate de que asistan, ¿bien?
Mi preocupación creció al recordar que mis amigos estaban involucrados, mi mente se perdió un momento.
—Entendido — acepté.
Ludo se colocó delante de mí, y dejo salir las últimas palabras que escucharía de él el día de hoy:—¿Qué esperas? El tiempo es oro.
Salí de manera veloz, pero a pasos seguros, no debía que mostrar algún signo de debilidad delante él.
Caminé un poco por el reino hasta que choqué con alguien, haciendo que botase algo al suelo.
— Lo lamento —me disculpé mientras tomaba el artefacto.
Gruñí al notar que era una radio, transmisor, o algo por el estilo, no conocía del todo su funcionalidad, pero si de donde era.
— Eres de Mewni Light — susurré para levantar la vista y verle.
El extraño comenzó a correr, aunque fue inútil ya que rápidamente el atrapé, se puede decir que por dos motivos, el primero es que no soy un simple, punto a mi favor, y el segundo es porque su velocidad era lenta incluso para una persona normal.
—No te muevas, no digas nada ni hagas movimientos bruscos, solo avanza junto conmigo, ¿entendido? — él asintió, cosa suficiente para mi.
Tiré el artefacto al suelo, lo pise para que fuera destruido, y lo coloqué en una bolsa de aquel sujeto, para seguir avanzando camino al bosque.
Tenía que sacarlo antes de que alguien se diera cuenta de que no era de este reino.
—¡Marco! —la voz de alguien me hizo maldecir por lo bajo, y detener el paso —¿cómo fue todo con tu padre? —murmuró Grobet en cuanto llegó a mi lado —, ¿algo interesante?
Pensé un momento la excusa perfecta, Grobet era un buen amigo mio, y alguien de fiar, pero no podía revelar aquel plan delante del guardia que observaba todo curioso.
—Bien —mentí con una sonrisa, para tranquilizar a mi amigo —ya sabes, solo quería un reporte de mi trabajo matutino.
—Déjame adivinar — una sonrisa burlesca apareció en su cara — no los asesinaste, de nuevo.
— ¿Qué? — reí —¿qué te hace pensar eso? — me detuve al ver en su cara una expresión que claramente me decía "no me mientas, Díaz", —vale, no lo hice.
Grobet sonrió orgulloso —lo sabía, por cierto, ¿quién es él? —señaló al guardia que seguía en silencio.
— ¿Él? — bufé mientras reía — nadie importante, un recluta, supongo, solo tengo que llevarlo a algún lado, y se me hace tarde — comencé a andar con el sujeto a mi lado— ¡adiós!
Mis pasos aumentaron su velocidad ignorando a mi amigo, que probablemente dijo algo que no escuché. Cuando por fin llegamos al bosque, le solté.
—Te puedes ir —hice una mueca y me giré camino a mi hogar.
—Eres tú —murmuró sin mover un músculo.
—Soy yo —hablé con ironía — y tú eres tú, es obvio.
Negó con la cabeza para hablar de nuevo: —eres el que nunca asesina a los de nuestro reino que son enviados aquí, llegan heridos, pero nunca muerto. Y aparentemente hijo de Ludo.
Le di un golpe en el pecho, molesto, sin saber porque.
— Suena loco, ¿cierto? — me giré — el hijo de Ludo, el que muchos temen, no asesina, pero ¿sabes qué? Eso no cambia, y no puedo cambiar eso ahora...
Le miré a la cara, solo para ver más confusión en su rostro.
¿Por qué?...
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Editado.
-Lizy
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Me enamore de mi enemigo - Starco (En edición)
FanficMewni, una tierra que antes era paz y tranquilidad, un hermoso reino donde habitaba la armonía y la tranquilidad entre los pobladores. Se encuentra en otra dimensión, donde la magia es real, habitan los monstruos y los humanos, sin conflicto alguno...