Efímero - Damie

Capítulo 16

Jamie POV.

-Jamie, Jamie, Jamie.

-Duérmete Dakota.

-¿Jamie?

-¿Sí?

-Me gusta Jamie.

Fue una larga noche, pero cerca de las cinco finalmente la fiebre no volvió y la pequeña gótica cayó rendida, no me quise arriesgar y me acosté a su lado en la enorme cama, a pesar de que estaban echadas las cortinas en algún momento la luz me despertó de nuevo, debían pasar de las diez de la mañana, debía levantarme y prepararle algo de comer, pero no quería, Dakota estaba acostada a mi lado echa un ovillo, llevé mis labios a su frente, estaba fresca, buena señal.

-¿Estás dormida?

Gruñó y se dio la vuelta, volvía a estar gruñona lo que quería decir que ya estaba bien, volvió a hacerse un ovillo pero seguía suficiente cerca de mí como para que su trasero rozara mi entrepierna cuando se giró, luego se acercó más a mí, aquello no debía sentirse tan... bien. Pasé mi mano por su cintura para que se quedara quieta pero era como si no pudiera dejar de sentirla contra mí, joder, ¿No podía estar a su lado sin tener una erección cada dos por tres?

Recordé como decía mi nombre anoche, ya no era James, era Jamie para ella.

Mis pantalones estaban por explotar, me levanté para ir a arreglar mi situación... a mano.

Dakota POV.

Escucho a Jamie soltar un gruñido antes de levantarse de la cama y salir de la habitación, apenas un segundo antes estaba tan cerca de mí y ahora, huía, como siempre.

La garganta apenas me dolía esta mañana gracias a las medicinas y los cuidados de mi enfermero personal, fingí que estaba dormida para que siguiera en la cama pero ahora se había ido, me levanté de la cama pero permanecí sentada en el borde hasta que pasó el mareo por la debilidad que sentía, luego caminé de puntillas hasta su habitación, la puerta estaba entreabierta y volví a escucharlo gruñir dentro, asomé la cabeza y lo me quedé sin aliento.

Sus pantalones yacían desabrochados hasta por debajo de la cadera, una de sus manos se aferraba a las sábanas y la otra... bueno, estaba dándole un uso que probablemente necesitaba.

No sé si hice algún sonido, yo sentía que estaba más quieta que un cervatillo pero entonces encontré su mirada en la mía, su mano dejó de moverse pero él estaba jadeando.

Mierda.

-Ven aquí –me dijo.

Jamie POV.

No se movió, seguía allí parada con su diminuto pijama. Pero ella quería algo, lo pedía a gritos desde hace semanas, y si solo nos restaba un mes juntos, lo mínimo que podría hacer por ella, era esto.

-Ven, Dakota.

Apartó la mirada, estaba seguro que iba a echarse atrás, pero luego dio un paso al frente y mi cuerpo se puso en tensión.

Dakota POV.

Valor Johnson, valor. Mis piernas temblaban a cada paso que daba, pero finalmente estaba de pie delante de él, vi aquello que sostenía en la mano y tragué saliva, no es que nunca hubiera visto a Jamie desnudo en las sesiones de fotos pero nunca lo vi... así.

-¿Te sientes mejor? –Asentí- Siéntate.

Obedecí, me senté a su lado con la mirada baja, vi que apartó sus manos y ambas se aferraron a las sábanas.

-Tócame.

Jamie POV.

Ella soltó un jadeo, luego, una de sus manos se levantó con decisión aunque temblorosa, cuando me tocó fue como si una corriente eléctrica recorriera mi cuerpo.

Control Dornan, control.

Dakota POV.

Nunca había hecho esto, nunca había tocado a ningún hombre así y sin duda no quería hacerlo con ningún otro, una de sus manos cubrió la mía y me mostró la presión y la forma que quería que lo acariciara, mi mirada iba de su miembro a su rostro, sus ojos estaban entrecerrados mientras jadeaba suavemente.

-Así, hazlo así.

Obedecí, quería complacerlo como él había hecho conmigo, era una sensación nueva, extraña y excitante, le gustaba, podía sentirlo tensarse cada vez más, podía ver sus manos apretando con fuerza las sábanas, sus caderas temblaban y yo lo acariciaba cada vez más rápido, en un instante apretó los dientes con un gruñido y se estremeció con violencia, algo cálido cubrió mi mano y me quede quieta mientras Jamie empujaba sus caderas hasta que aquello paró y de dejo caer en la cama jadeando.

Jamie POV.

Joder si esto no había sido la cosa más caliente que me había pasado en la vida.

Solo pudo ser mejor si ella hubiera estado de rodillas frente a mi.

Dakota POV.

¿Y cuándo sería mi turno?

¿Qué hacía con la cosa pegajosa que tenía en la mano?

¿Debía soltar ya al amigo de Jamie?

¿Qué se supone que debo hacer ahora?

Se incorporó despacio y me tomó de la nuca para atraerme a él y besarme, cuando me soltó sonreía.

-Limpiemos este desorden.

Me pasó su camisa para limpiarme y me dijo que fuera a cambiarme mientras él se duchaba, obedecí de mala gana abrigándome bien y me fui a la cocina, me sentía cansada pero logré poner la tetera en la estufa antes de que él apareciera y comenzara a moverse por la cocina preparando la comida.

-Sé que no la compré yo –dijo picando algunas verduras- Pero haré la compra más tarde.

-No es necesario.

-Sí lo es, perdí la apuesta –sonrió.

-Bueno, puedo sumarle una buena noticia a tu buen humor.

No le había dicho que había hecho que mi madre enviara una cinta de Jamie a un amigo director suyo y quería contactarlo enseguida.

-Dímelo.

-Vas a hacer tu primera película.

El cuchillo resbaló de sus manos y vi su cara de asombro un segundo antes de que corriera a mi lado y me alzara para darme algunas vueltas por la cocina, me reí como una boba de verlo tan feliz, me dejó en el suelo y me besó con ganas hasta que me arrinconó contra el refrigerador, sus besos eran adictivos y deliciosos.

-¿Cómo puedo pagarte todo lo que has hecho por mí?

Ámame, pensé.

-Cuidándome como hasta ahora.

-Eres... especial.

-Tú lo eres también para mí –acaricié su mejilla- Mucho.

Nos quedamos abrazados un largo rato, hasta que la tetera silbó y nos separamos aun sonriendo, sirvió dos tazas y después de tendérmela alzó la suya a manera de brindis.

-A disfrutar el tiempo que nos queda juntos.

-Ojalá fuera para siempre –dije.

-Nada es para siempre en esta vida efímera, Dakota... excepto quizá, nuestra amistad.

El sonido de las tazas chocando selló nuestro compromiso.

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Final 30 de abril.