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Edith entró en la casa de los padres de Drake, directamente fue al salón donde estaba viendo el televisor Ulises.

- Hola príncipe. *Dijo entrando en la sala, con las manos en la espalda*

- ¡¡¡HOLA!!! *Grito felizmente al verla*

- Cierra los ojos. *Le pidió amablemente, el pequeño no rechisto y los cerro*

- ¿Que pasa? *Preguntó incocente el pequeño. Mientras ella le ponía delante un peluche en forma de dinosaurio*

- Abre los ojos.

- ¡¡¡¡¡¡¡¡AAAAAHHHHH!!!!!!! *Grito emosionado* ¡¡¡¡¡ME ENCANTA!!!!!*Su grito era eufórico*

- Me alegra que te guste. *Dijo acariciándole el cabello, el chico con su dinosaurio de bajo de su brazo, se tiro al cuello de ella y la abrazo* Te quiero pequeño. *Dijo abrazándolo devolviendo el abrazo al pequeño*

Llegó la noche, Drake y Edith estaban agotados de jugar con el pequeño. Y ahora tenían que ir a por las pizzas y coger alguna película para ver con Luís. Así que ni en sus sueños podrían dormir.

- Papá. *Ulises tiró del chaleco de su padre*

- Dime hijo. *Le miró con dulzura*

- ¿Tengo 3 abuelos y 3 abuelas ahora? *Dijo bajito para que no lo oyeran*

Drake se echo a reír y su hijo se puso sobre él tapándole la boca.

- ¡No te rias! *Ordenó el niño mosqueandose*

- Perdón, perdón. *Le quitó las manos de su boca, y lo abrazó* No te enojes mocosito.

- Papá, no tengo mocos. *Hizo una mueca*

- Ulises, ¿De que se ríe tu papi?

- Por que pregunté, si tus papis son mis abuelos también.

- Claro que sí. *Dijo Luis* Así que vente con el abuelo que voy a ir a por patatas fritas, gusanitos y esas cosas a la cocina.

El chico corrió con "su nuevo abuelo". Edith miró mal a Drake.

- ¿Por que me miras así?

- Por que le quitas la ilusión de tener otros abuelos.

- No dije nada. Sólo me reí por tal comentario. ¿Seis abuelos? ¿En serio?

- Sí, ahora tiene seis. Por que yo sere como su mami ¿No?

- Tú serás lo que quieras. Pero hay una cosa que serás sí o sí.

- ¿Lo qué?

- Mi esposa. *Agarró la cara de la chica con sus dos manos y la beso*

- ¿Tendremos un bebé?

- Tranquila, ya lo tendremos.

- Como digas que soy chica te cruzó la cara.

- Calmate *La abrazó apoyandola en su pecho* no es por eso, es que estas estudiando, y es lo mas importante.

- Vale, pero a los 18 tenemos uno.

- Ya lo hablaremos. *Señalo al techo* A dormir.

- ¿Como a dormir? Yo quiero terminar de ver la película, haber si vienen para darle al Play.

- Vale, pues la terminamos de ver. Luego no digas que tienes miedo.

- No me da miedo las películas así. A parte SAW la vi como 1.000 veces. Y yo soy buena.

- Edith, te amo. *La miró con miedo a lo que le respondería, ya que hacía poco que se conocían y que estaban juntos*

- Es algo raro que tan rápido se sienta tanto ¿Verdad? *Sonrió mirandolo* Pero yo también siento eso.

- Gracias por aparecer en mi vida. *Besó los labios de la joven, hasta que Ulises los separo*

- Vas a pintarte los labios papi. *Dijo preocupado*

Todos a oír al pequeño con ese tono, se echaron a reír y Edith lo abrazo dándole miles de besos.

EL CAMBIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora