Bullied |H.S| ✔️EDITANDO

Capitulo 17

Y allí estaba yo: parada frente al espejo que colgaba en la puerta de mi casillero, respirando hondo uno y otra vez y repasando el plan que había trazado toda la mañana por millonésima vez. No estaba del todo segura de lo que iba a hacer, pero, por primera vez en mi vida, tenía determinación y adrenalina mezcladas, lo cual me impedía hecharme para atrás a estas alturas. Y tampoco se trataba de algo fácil de llevar, no, lo que estaba a punto de hacer era demente, suicida, terrible en muchos aspectos, pero también era de locos pensar que, hace más o menos 11 horas y 30 minutos, yo y el chico más popular de la escuela, estábamos besándonos amorosamente en mi habitación. Pero no esa clase de besos fugaces que me había dado anteriormente, esta vez fue largo, tierno, inusual en alguien como él. Pasaron alrededor de 10 minutos y no nos deteníamos, por lo menos yo no tenía intenciones de hacerlo. Pero como siempre, él inesperado se separó lentamente de mí, me dio dos ligeros golpes en mi mejilla y así como apareció, desapareció en la oscuridad de la noche.

Lo había pensado bien. Esto ya no era cosa de, una o dos veces. El que Harry y yo nos hubiésemos besado por tercera vez sólo significaba una cosa: ... No estoy segura de que realmente, pero sé que era algo importante. Francamente ya estaba harta de no conseguir respuesta alguna al respecto, y, aunque también analizaba la enorme posibilidad de que anoche estuvo en un club nudista justo después de besarme, como back-up plan nuevamente, albergaba la mínima esperanza de que esto fuese trascendental.

Caminé por el pasillo en búsqueda de él, no tardé mucho, estaba rodeado de gente, dándome la espalda inconscientemente, y vestido con un jean color negro y la chaqueta del equipo, perfectamente limpia y presentable.

Quizá no sería bueno llevarlo a cabo enfrente de todos sus amigos, pero, demonios, nunca estaba realmente sólo, podría perder toda valentía si decido aplazarlo y, finalmente, entre su grupo social estaba allí Logan, quien, por más que fracase, nunca me dejaría sola.

-Hola Harry- Dije firmemente, llamando su atención golpeando su hombro apuradamente.

Pero este sólo me dirigió una mirada despectiva, con una ceja levantada y una completa aversión hacia mí en ese momento. No respondió nada, su mirada decía más que mil palabras. Pero continué.

-Oye, yo... Me preguntaba sí... Ya sabes, ¿quisieras salir un día de estos a ver una película o algo?- Mordí mi labio inferior, esperando una respuesta rápida: Sí o No. No importaba. Sólo necesitaba una opción.

Todos callaron inmediatamente. Harry cambió inmediatamente su mirada y carcajeó en mi cara con los ojos y la boca y bien abiertos y su dedo apuntándome.

-¡Ni en un millón de años!- Gritó y se echó a reír como un loco junto a todos sus amigos, a medida que yo me sentía cada vez más minúscula y patética al considerar, en algún remoto caso, que este plan resultaría.

Estos se marcharon entre burlas y humillantes comentarios hacia mí, a excepción de Logan, quien acertando, se quedó estático en su lugar.

Empezaba a sentirme enferma, intenté caminar lo más lejos posible, pero el chico de ojos azules me tomó de un brazo y me abrazó.

-¿Qué diablos fue eso?- Preguntó, con un tono atónito y completamente sorprendido.

-Oh, nada... Fue solo una demostración de cómo me dejé controlar por una fuerza increíblemente convincente dentro de mí que no sé cómo se llama, pero, al parecer, es una ilusa por completo.

-Pero Agnes- Me tomó de los hombros y me miró directamente. -No entiendo, como es que un día quieres alejarte de él y al otro... Lo invites a salir.

-No lo sé, yo...- Puse una mano en mi frente. -Yo tampoco lo sé, solo pensé que debería hacerlo, lo hice, fracasé y ahora me odio.

-Oye- Levantó su bien marcada ceja izquierda. -¿Acaso... sientes cosas por él?

-¡Logan Wade Lerman! Como crees que yo...- Pero me dedicó una mirada seria que me hizo cuestionar si debería mentirle o no. -Ah... Yo... ¿No lo sé?

-¡No te creoooooo!- Gritó femeninamente agitando sus manos. -¡No puede ser!

-¡Hey! ¡Cállate! Pareces una chica.

-Lo siento- Bajó su voz. -¿Cuándo, cómo y dónde?

-No lo sé. Es que no lo sé si realmente es... Eso. ¿Sabes? No, no logro pensar con claridad cuando él está cerca y siempre estoy nerviosa cuando él... Y... Y mis padres lo aman, y yo... Yo, no lo sé. Me besa y...

-¡Espera! ¿Cómo es eso de que te besa?- Interrumpió.

-Oh... Eso. -Sonreí exageradamente. -Olvidé decírtelo...

Le conté todo en detalle a Logan, desde lo de Kendra hasta lo de anoche, aunque estaba casi segura que había escuchado todo, afirmó que tenía sería sospechas sobre alguien, pero nunca de Harry. Debo agradecerle a alguna divinidad porque no enfadó conmigo por ocultárselo, incluso cuando realmente no fue así, solo que no hallaba el momento preciso para decirle tanto y tanto.

Y pasaron los días... una y dos semanas, en donde me cuestioné todo el tiempo sí habría espantado a Harry definitivamente, y debatía si aquello era bueno o malo. Cuando mis padres preguntaban por él, decía que estaba ocupado; tampoco quería escucharlos con el mismo boikot que armaba en mi cabeza. Pero no estuve deprimida todo el tiempo, quiero decir, me vi forzada a admitir que sentía algo por Harry después de todo, pero ni yo misma sé exactamente que es, y mientras estuviese apartado podría definirme mejor; además ¿no me la pasaba quejándome por él todo el tiempo y un descanso no me vendría bien?

Pero en caso de que me asteara de no verlo todo el tiempo en mi casa o en el balcón de mi habitación, y no me fuese suficiente conformarme con que en los pasillos me ignorara (porque ya ni bromas ni comentarios hacía), tenía mi arma secreta: Las guías de lenguas. Las cuales tenía que reclamarme tarde o temprano.

-Oye, Agnes-Dijo Logan deteniendo su paso por un momento y con la vista clavada en su teléfono.

-¿Sí?

-Harry dice que sí le podrías enviar lo de lenguas conmigo, que las necesita.

Bien... Se me habían agotado las opciones mientras, al mismo tiempo, había confirmado mi teoría: Lo había apartado de mí gracias a mis tontos y cursis impulsos que, debí deducir, dejarían en evidencia sentimientos que probablemente ni existen.

¡Ya!

¡Era suficiente!

¡Me había matado las dos últimas semanas pensando en todo esta situación, que me había olvidado en la realidad que actualmente habito! Y esa realidad es: Harry Styles jamás andaría con alguien como yo, y lo que sea que estuviese sintiendo por él, debía ser desechado de mi corazón y mente lo más pronto posible.

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Hola espero les haya gustado el capítulo

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Créditos a la escritora crece

Gracias . xx