Seducción • Jimin •

Capítulo 9: Cállate Kim

Bajé de mi auto. Me colgué la mochila en el hombro y caminé hacia la entrada. El convertible rojo de Seolhyun se estacionó junto al mío. Me giré a verla, se veía sexy en el corto vestido azul que portaba. Sus tacones como siempre, altos, haciendo juego a la perfección con lo que vestía.

-Bebé -saludó Seolhyun, acercándose lentamente a mí.

-Qué sexy -susurré lo suficientemente alto para que ella me escuchase.

-¿Se puede saber dónde demonios te metiste ayer, durante todo el día? -preguntó, ahora alejándose de mí. ¡¿Por qué todas son así?!

-Yo te lo puedo responder, Seolhyun -una voz conocida habló a mis espaldas. ¿No es... ? -Verás, Kim, resulta que a Jimin no le fue suficiente nuestra aventura en el armario del conserje... así que... bueno, hemos ido a mi casa a divertirnos un rato... ya sabes, ¿no?.

Se acercó lo suficiente para tenerme frente a ella. Sin previo aviso, acercó sus labios a los míos y nos juntó en un beso lento. ¿Qué hacer? No me puedo dar el lujo de perder a Seolhyun, ella es diferente a las demás, pero ¡diablos! El sabor típico de chocolate y menta de los labios de ______ me hipnotiza. Sin saber bien cómo, mis manos ya estaban en su cintura, las de ella amenazaban con tocar bajo la sudadera. Nuestro alrededor desaparecía, estábamos solo los dos, disfrutando del contacto que ambos nos brindábamos. ¿Y Seolhyun? Pero, ¿quién es Seolhyun? Profundizamos el beso, sentir su lengua rozar la mía era totalmente embriagante. Al separarnos, una sonrisa de superioridad apareció en los labios de ______. Observó a Seolhyun de arriba a abajo, me dio un pico y caminó meneando sus caderas de un lado a otro. Busqué a Seolhyun con la mirada. Pero nadie estaba en el estacionamiento. Por lo menos, nadie había visto la escena.
¡La has cagado, Jimin!

~*~

-¡Jimin! -exclamé al otro lado del pasillo. La mejor amiga de Seolhyun se giró a verme. Me abrí paso entre los tipos, y caminé hasta estar frente ella.

-¿Qué quieres, Park? -preguntó, en tono enojado. Vale, Seolhyun ya ha ido de bocazas.

-¿Dónde está Seolhyun? -pregunté lo más amable que pude. No estaba de humor, pero si quería saber donde estaba ella, tendría que tener al enemigo cerca.

-¿Por qué no le preguntas a ______?

¿Eso fue un reproche?

-Jimin, por favor

-Yo que sé, Park. Arréglatelas para encontrarla y recuperarla, si es lo que quieres.

-Hablas como si fuera mi novia -bufé.

-Eres un estúpido, Park. ¿Acaso creías que el J&S era porque Seolhyun aprecia bastante a su mejor amiga?

~*~

-Fíjate por dónde caminas, Park -advirtió frío el estúpido Kim. ¿Quién se cree? El hecho de que sea el hijo del director y creador de la escuela no le da derecho a hacer todo lo que le plazca y hablarle a todos como el quiera.

-Fíjate tú, Kim. -advertí en mismo tono. La conversación con Jimin no me había ayudado en nada, incluso empeoró mi humor. ¡Llevo año y medio acostándome con alguien que yo suponía solo me deseaba sexualmente!

-¿No perdiste algo? Los chismes viajan rápido, y más tratándose del casanova del colegio.

-Tú no eres muy santo, Kim.

Me miró mal.

-Cuida lo que dices...

-No -le corté -Cuida tú lo que dices y haces. Ve que no me importa quién es tu padre...

-Pues debería -afirmó. Su actitud estaba comenzando a frustrarme. -Y también deberías cuidar a Seolhyun, Park... hay muchas fieras hambrientas fuera, he escuchado que tiene un cuerpo tremendamente bueno, y que en la cama...

Estampé mi puño en su mandíbula. La adrenalina corría por mis venas. Al igual que el enojo. Me estaba metiendo en un problema grande. No me importaba.

-Cállate, Kim. Cállate o conocerás a Park Jimin -advertí y caminé lejos de él.