Las semanas han pasado en un abrir y cerrar de ojos ya han pasado dos meses y medio desde que empecé a trabajar en el bar y ya pronto empezaré mis clases, lo que me desanima porque eso significa que tendré que dejar el trabajo, y sinceramente ya me acostumbre al empleo y a las compañeros y claro también a Miguel, además de que debo decir de que el dinero no me viene nada mal y solo debo trabajar hasta media noche, en el trabajo todo ha seguido normal desde el pequeño encuentro con aquel chico, Adam creo que se llama, los he seguido viendo en el bar, e incluso he tenido que servirles varias veces, pero nada ha pasado, y con el chico de la voz sexy y los increíbles tatuajes solo he intercambio un par de miradas.
Me estaba preparando para salir a trabajar, cuando me llego un mensaje de Ana, mi mejor amiga, últimamente no había hablado mucho con ellos, y cuando nos reuníamos compartía muy poco porque prácticamente tenia que salir corriendo para llegar a tiempo a mi trabajo, hace días habíamos quedado en que ellos irían al bar a verme trabajar, sip que grandes amigos, y aparentemente hoy seria ese día, respondí un simple ok y me dispuse a ir a mi trabajo, cuando llegue como es de costumbre salude a los demás, cambie mi camisa y me puse mi delantal.
En menos de una hora el bar ya estaba lleno y todas las empleadas corriendo como locas llevando los pedidos, en un momento me acerque a la barra y volví a llenar mi bandeja para que me indicaran a que mesas irían esos tragos, cuando siento unos brazos rodear mi cintura, de inmediatamente me sobresalto, suerte que no estaba cargando la bandeja porque de lo contrario todos los tragos habrían terminado en el piso, rápidamente me volteo para enfrentar a quien había cometido tal atrevimiento, era julian un amigo de los que iría hoy con Ana, el chico era... Como decirlo sin que suene feo, umm digamos que el chico era cariñoso, demasiado para mi gusto, pero era excelente persona.
- eres idiota o que, casi me matas del susto, dije dándole un ligero empujón en el hombro, haciéndolo reír.
- tranquila charlie, no soy un violador,dijo en medio de carcajadas.
- no, pero eres un acosador, dije divertida.
El resto de los chicos se acercaron a nosotros y me saludaron alegremente, en ese momento alguien carraspea a mis espalda y giro para ver a Miguel.
- lamento interrumpir charlie, pero hoy estamos full, lleva estos tragos, y después atiende a tus amigos para que puedas conversar un poco con ellos, ah y que las chicas no se den cuenta, no quiero tener que aguantar sus reclamos, dijo Miguel.
- enseguida jefe, dije agarrando la bandeja sirviendo los tragos, serví otras tragos mas y luego localice a los chicos, quienes estaban en el reservado con el grupo de chicos en el que estaban Adam y el chico de la voz sexy y los increíbles tatuajes, tal ves debería aprender su nombre,seguro seria mas fácil.
Me acerque a ellos y vi a Ana sentada al lado de el chico de la voz sexy y los increíbles tatuajes, y los demás distribuidos por los demás muebles, Ana al verme me hizo seña con la mano y me acerque a ella.
- oye charlie, ya llevaste los tragos, julian no ha dejado de reír por el susto que te dio y creo que es justo que te defiendas,dijo ella, yo solo Sonreí con maldad, haciendo que julian deje de reír.
- oh no,esa sonrisa no me gusta nada, dijo julian.
- ¿porque, que tan malo podría pasar?, dije aún con la sonrisa.
- bueno recuerdo que la ultima ves que sonreiste así termine con un gran trauma, y con muchas citas con la psicólogo.
- teníamos 15 años, ya superalo, dije burlona.
El iba a responder cuando aparece una de las chicas informandome que Miguel me necesita, así que me di la vuelta y me acerque a la barra, donde Miguel me esperaba con una bandeja llena de tragos, me la tendió con una sonrisa que me tranquilizó, y me señaló una mesa, lleve la bandeja hasta allí y deje los tragos, estuve al rededor de 1 hora repartiendo mas tragos y solo miraba de reojo a donde estaban los chicos, ya cerca de las once Miguel me hizo una seña, así que me acerque a el.
- oye porque no vas con tus amigos, me dijo mas como sugerencia que como pregunta.
- aun hay mucho trabajo, tal ves en un rato, dije restándole importancia.
- anda ve un rato, yo te cubro, si te necesitó te llamo, dijo dándome otra bandeja con los tragos para esa mesa, le agradecí con los ojos y me retire, me alegraba tener un jefe como Miguel, pero tampoco era mi intensión abusar de su confianza.
Camine hacia la mesa donde estaban los chicos y le serví los tragos, y me percate que junto a ellos estaba una de mis compañeras sentada como otra cliente mas.
- oye, yo que tu no tentaría la suerte, Miguel anda de buen humor pero eso no evitara que te despida si te ve aquí, le digo sin interés, la verdad no me importa, pero trato de ser buena compañera.
- no me importa, si no te ha reprendido a ti, porque a mi si, ah ya recuerdo eres su chica preferida, pero sabes que charlie, ese tipo solo es bueno contigo porque te quiere llevar a la cama si no fue que ya lo hizo, dijo arrastrando las palabras, esta chica si que esta borracha.
- mira por mi te puedes ir a la mucha mierda, solo trate de ser amable contigo, y sinceramente no creo que esas sean las intenciones de Miguel, tal ves le agrado porque no soy tan zorra como tu y no trato de meterme con los clientes, yo si vengo a hacer mi trabajo, dije viéndola con cara de asesina.
- tranquila charlie, deja a la chica tu ya cumpliste con advertirle, ahora ven y te presento que antes no pude hacerlo, ellos son justin, drake, Adam, sebas, y el es Blake foster mi primo, dijo señalándolos a todos y por ultimo al chico de la vos sexy y los increíbles tatuajes que ahora se que se llama Blake
- mucho gusto, soy Charlotte Williams, pero todos me dicen charlie.
- oh, que bueno ya se me hacia raro que te llamarás charlie, Charlotte es mucho mejor, pero... ¿pero porque charlie y no otro apodo?, dijo Adam, quien ahora es mas amable conmigo.
- porque los demás me parecen estúpidos y muy comunes, charlie es mas original, mas como yo.
- chica si que eres rara, de verdad que si, volvió a decir.
- no, yo no soy rara, simplemente soy diferente.
Así es como se veía Blake esa noche
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¡No Soy Rara, Soy Diferente! (PAUSADA)
Teen FictionDurante la mayor parte de mi vida, he sido una persona incomprendida, los demás me consideran "rara", por el hecho de que no soy una chica común, siempre me han gustado las cosas diferentes, mientras a las demás chicas les gustan los colores rosa, f...