¡No Soy Rara, Soy Diferente! (PAUSADA)

Capitulo 30

Salimos del estilista ya con mi nuevo look, la verdad me sentía renovada, no digo que no extrañara mi antiguo look, ya que lo lleve durante un par de años y me siento rara llevando el cabello de un color “normal”, pero realmente ya necesitaba un cambio radical, mi antiguo look ya se había vuelto predecible y algo infantil, además este look me sentaba de maravilla, resaltaba mi piel y mis ojos, o eso era lo que decía Ana, mi intención era solo arreglar mi cabello e irme a mi casa a descansar un rato antes de la cita, después de todo Miguel me había dado el día libre cuando le comente que había quedado con alguien, así que debía aprovechar para darme un pequeño descanso, ya que mañana seguro volvería a mi rutina.

Seguí caminando junto con los chicos hasta que sentí que se detuvieron, o mejor dicho, Ana se detuvo y como James iba sujetándola de la mano, se detuvo con ella, estaban frente a una tienda con ropa muy... Llamativa, Ana tenia un sonrisa tan grande que incluso pensé si no le dolía el rostro, enserio daba miedo, sobre todo cuando enfoco su mirada en mi y su sonrisa creció aun mas y se convirtió en una sonrisa malévola, después de eso todo paso muy rápido, Ana me arrastraba dentro de la tienda, sin que yo pudiera evitarlo, y cuando me di cuenta tenia un vestido (si es que esa cosa se podía llamar así) amarillo pollito que me quedaba mas arriba de las rodillas y con un escote que mostraba más de lo que yo quisiera.

- Ana, que mierda me has puesto, dije removiendome incomoda.

- pero si te queda lindo, dijo ella aplaudiendo.

- cariño, parece un pollo, dijo James.

- ¡Gracias!, al fin alguien coherente, quitame esto, ¡Ahora!, dije cubriendo mi parte expuesta.

- ok ok, esta bien pero fuera del color, el vestido resalta su figura, insistió Ana.

- si, pero creeme que nadie resistiría mirar ese vestido por mas de 2 minutos, su color es un distractor y no permite ver más allá, dijo James.

- además tiene demasiado escote y no me siento cómoda, y en primer lugar, si mal no recuerdo, yo ya había dicho que no haríamos esto, dije y me metí al probador a quitarme esa cosa.

Cuando salí, Ana estaba parada cruzada de brazos como una niña a la que acaban de regañar, y James cargaba una montaña de vestidos que le estaba entregando a la encargada de la tienda, yo le entregue el que me acababa de probar y ella cuando lo vio coloco cara de desagrado, luego me miro y sonrió como si nada, en realidad me dio un poco de risa, ni siquiera la encargada de la tienda disimulaba su desagrado por ese vestido, pero es que de verdad era feo, quien podría comprar algo así, ni siquiera se porque Ana lo eligió.

- Necesita ayuda?, me preguntó la encargada sacándome de mis pensamientos.

- oh, no gracias, dije.

- lo siento es que como la vi midiéndose vestidos y escuche a su amiga decir algo de una cita, pensé que tal ves necesitaba algo.

- si, bueno, es que si tengo una cita, y mi amiga me esta convenciendo de que debo verme perfecta por eso me trajo aquí, solo que la ropa es muy llamativa para mi y no me encantan los vestidos, dije rodando los ojos.

- pues ven, creo que yo te podre ayudar, tengo justo lo que necesitas.

Ella comenzó a caminar a otra sección de la tienda, y yo la seguí, me sorprendió un poco que antes no había visto esta parte de la tienda, supongo que los coloridos vestidos me distrajeron, pero es que fue inevitable, con tantos colores podría haberme mareado, la sección a la que me llevo la encargada no tenía vestidos, ni colores llamativos, era mas ropa de mi estilo, y podía decir que no estaba nada mal, habían algunas prendas que llamaban mi atención, así que examine un poco la ropa y termine eligiendo varios atuendos, entre esos, el que me pondría para esta noche, creo que no dure ni quince minutos en ese proceso, pague la ropa y salí de la tienda donde me esperaban los chicos, Ana aun seguía con su pose de niña malcriada y James me miro negando divertido.