Malvadamente inocente.

Capitulo 3.

Verano del 2002.

Todos los humanos viven a la espera de algo que les cambie la vida, que tome su mundo y lo ponga de cabeza. Yo también solía hacerlo; solía esperar cada noche que el cielo se oscureciera para quedarme por ratos mirando por los grandes ventanales de la casa, esperando por algo que cambiara mi vida, mi forma de ver el mundo que me rodeaba.

Soulsland no era exactamente el lugar mas divertido que pudiera existir para un niño de mi edad. Yo quería salir del bosque, ir a la ciudad, a los parques, a la escuela; tal y como lo hacían mis primos. Sin embargo, siempre supe que había algo en ese bosque que nadie me estaba contando.

No sabia por que, pero las noches en el bosque siempre me habían cautivado, tocaban el botón de mi curiosidad. Yo deseaba quedarme hasta la madrugada viendo por las ventanas, hasta encontrar algo, porque sabia que allí, en la oscuridad de la noche, había algo que nadie me decía, y que yo moría por saber.

***

Pase toda una semana, planeando como iba a sacarle la información a mis padres, pero todo parecía imposible.

Hasta que una loca idea se apodero de mi cabeza. A mis padres siempre les gusto salir y explorar la naturaleza conmigo, pero de todos modos, sentía que estaban ocultándome algo, y tenia que ver con la noche. Así que decidí que los iba a convencer de ir a acampar cerca del lago.

Y bien, luego de portarme bien por toda una semana, halagar mucho la comida de mi madre y decirle a mi padre lo importante que seria para mi ser normal como los otros niños que acampaban con sus padres; supongo que ablande lo suficiente sus corazones, porque estos aceptaron.

***

Mi padre termino de armar la gran tienda de campaña, mientras mi madre y yo buscábamos la leña suficiente para hacer una pequeña fogata para mantener una buena temperatura y no acabar resfriados por ''el pequeño capricho de Niall'', palabras exactas de mi madre, que aun no estaba muy convencida de que pasáramos aquí la noche.

-¡Mami! ¡Mami! Mira, allí hay un montón de leña.- señale acercándome a la pila de troncos secos que había cerca del lago.

-Niall, no te alejes demasiado.- grito mi madre, dejando la leña que cargaba cerca de nuestra tienda.

Asentí hacia ella y espere hasta que dejara de verme para acercarme aun mas al lago, pero algo escrito en un árbol llamo mi atención. Eran unos símbolos extraños, nunca los había visto antes en mi vida, pero mi tío Darren nos había contado a mis primos y a mi una historia sobre espíritus que habitaban en Soulsland, específicamente en una zona del bosque, y que donde ellos estaban siempre habían símbolos raros.

Me quede embobado con esos dibujos en el árbol, quería tocarlos. Así que cometí el peor error de toda mi vida, levante mis pequeñas manos delgadas y los toque, siguiendo los trazos que tenían los pequeños símbolos.

De repente sentí un escalofrío recorrer todo mi brazo, y como niño al fin, aleje el brazo corriendo y trate de volver a donde estaban mis padres. Sin embargo, sentía miedo, mucho miedo, ni siquiera se por que, ya que no había nada raro en el ambiente, solo recuerdo que no podía mover los pies, y cuando por fin pude hacerlo, una gran nube negra arremetió contra mi pequeño y flacucho cuerpo y me tumbo al piso.

Recuerdo que las lagrimas brotaban como locas de mis ojos, y se perdían en mis mejillas, mientras intentaba hacer que mi cerebro reaccionara y poder salir corriendo, o pedir auxilio. El día ya no era hermoso, se había vuelto completamente gris, con un montón de nubes negras revoloteando por los aires. El aire se sentía denso, se me dificultaba respirar y mis sentidos estaban completamente paralizados.

Quería correr, pero cada vez que lo intentaba una sombra me golpeaba y no lograba cumplir mi misión. Trate de aguantar todo lo que mi pequeño cuerpo pusiese, quería vivir, aun estaba joven, quería tener una familia igual de hermosa que la mía, tener hijos para jugar como mi padre lo hacia conmigo, o para que su madre los enseñara a cocinar y a pintar como la mía lo hacia. Pero mis defensas ya no daban mas, y lo ultimo que recuerdo fue la voz de mi madre gritando mi nombre.

***

Al despertar me encontraba en mi cama, sentía un dolor fuerte de cabeza y un paño húmedo posaba sobre mi frente.

Al parecer mis padres no se habían dado cuenta de que estaba despierto. Porque seguían hablando de un tema del cual no entendía nada, lo único que sabia y estaba seguro, es de que era con relación a lo sucedido.

- Debemos decirle-, insistía mi madre.

-Aun es un niño, apenas tiene 11 años, no lo va a entender- se oponía mi padre.

-Yo conozco a mi pequeño mejor que nadie, pienso que tiene la edad suficiente para saber todo sobre este bosque, y las cosas que lo atacaron-,cuando mi madre menciono estas ultimas palabras, unas lagrimas traviesas empezaron a caer.

-¿Que pasa mama?- Ambos se sorprendieron un poco al verme despierto, mama limpio sus lagrimas rápidamente, tratando de disimular

-Pequeño Niall, despertaste- se acerco mi madre.

-¿Por que estabas llorando?- interrogue.

-No pequeño, no estaba llorando, que cosas dices- mintió, fingiendo una sonrisa.

-Bueno, tienes que volver a dormir, para que así puedas descansar mejor- exhorto papa.

Luego recuerdo que se dirigieron hacia la puerta apagando la luz, y en voz baja al unisono dijeron "Buenas noches Niall".

Esa noche no pude dormir nada, pensando en las cosas que me habían pasado hoy, y esas palabras que había dicho mi madre "Todo sobre este bosque" y "Las cosas que me atacaron", yo siempre sube que en este extraño bosque pasaban cosas raras, y lo sucedido hoy me lo confirmo aun mas.

***

Al día siguiente, me levante de mi cama, ya me sentía mucho mejor, comparado con la noche anterior.

Pero cuando baje a la sala, encontré a mi madre sentada, esta se encontraba cabizbaja, no se por que razón pero lo único que se me ocurrió preguntar fue:

-¿Donde esta papa?-.

Hola!! ¿Como han estado?, espero que bien. Bueno esta sera una nota de autoras super corta.

Como ya se podrán haber dado cuenta, fue un capitulo un poco corto, nos disculpamos por eso, y también por la tardanza. Ya pronto terminamos este semestre, y escribiremos mas seguido. Gracias por todo su apoyo. Besos y abrazas XOXO