Capitulo 6: Parte 2

817 75 9
                                    

Mini maratón 2/2

***

La mañana estaba helada, los arboles se encontraban cubiertos de la hermosa nieve blanca.

Baje los escalones, sin encontrarme a ninguno de mis padres en la trayectoria, a lo cuál no le di mucha importancia, seguro aún estaban en su habitación. Tome una de las cajas de cereal que había, y verti una parte en un razón, puse la leche y me concentré en comerlo.

Este día estaba algo aburrido y aún no veía a mis padres, decidí ir al pequeño estante que había en la sala y tomar algún libro para leerlo.

Mientras iba hacía la sala, empezaron a tocar la puerta, los golpes se escuchaban más fuertes y mas desesperados en cuanto los segundos pasaban, me iba acercando para abrir la puerta pero antes de que lo hiciera mi padre salió de la nada, echándome a un lado y abriendo la puerta.

- Allan Schmith!!-, una voz bastante masculina se alcanzaba a escuchar, mi padre bloqueaba la puerta de tal modo, que no pudiera mirar hacía a fuera.

-Alexander Rosccovich!!- musitó papa,-Así que el mismo rey en persona tuvo que venir en mi busca, pues para no hacerlo desperdiciar su preciado tiempo, puede marcharse desde ahora, porqué ya lo he decido no lucharé en una batalla que es obvió que perderemos-.

- Por favor, no nos hagas suplicarte, sabes que este bosque completó nos necesita-, alego.

- Si Alexander, o debo decir su Majestad, sabe usted muy bien que nosotros estamos perdidos contra esas malditas sombras-.

-Nada es seguro Allan, nada es seguro!!-.

-Hermano!!- Al instante reconocí ese tono de voz, era mi tío Darren,-En parte estoy de acuerdo contigo, pero piensa bien, si corremos con la suerte de acabar con las sombras ya todo este caos se acabará tu familia estara a salvó, podrán hacer cosas que jamas han hecho, sabes que somos pocos soldados y uno mas nos serviría mucho, eres el mejor estratega que tenemos, y tu ayuda nos serviría de mucho, Soulsland te necesita-, note como mi padre colocó una de sus manos en su cara, mientras movía la cabeza con desaprobación. Luego de un momento, este cerro la puerta, dejando a mi tío Darren y a los que sea que se encontrarán allí, fuera.

- Que pasa, papa?-.

-Nada que tenga importancia hijo, vete a tu habitación!!-.

- Que me vaya a mi habitación, asi de simple-, musité,-PORQUÉ NO ME CUENTAS NADA, TENGO DERECHO A SABER PAPA, YA NO SOY UN NINO-, zarandee sin ninguna brusquedad su cuerpo.

Mirándome a los ojos volvió a repetir lo que dijo en un tono que pareciera que saboreaba cada una de las palabras que iba a decir.

-Ve-te a tu ha-bi-ta-cion-.

Pense sus palabras por un instante, pero a mi lo único que me quedaba es hacerle caso. El hecho de que me faltará poco (Con poco me refiero a 2 años) para ser mayor, no tenia el derecho de desobedecer, a la persona que me ha acompañado y ha estado ahi toda mi vida.

Cuando subia las escaleras, escuche que la puerta se abrió, y despues de unos segundo se volvió a cerrar, indicándome que mi padre había salido o que alguien ha entrado, me incliné un poco, para buscar la manera perfecta de mirar a la sala, y lo logré, obteniendo como resultado que alguien ha entrado a la casa, por supuesto esa persona era Darren.

Me sentía bastante desanimado cómo para quedarme escuchando una conversación a la cual no me invitaron.

"Que ironía de mi parte".

Así que terminé de subir las escaleras, y me encerré en mi alcoba. Tenía suerte de qué aun conservaba en mi mano el libro que estaba por leer, así que me tire en mi cama, y empecé a leerlo.

Malvadamente inocente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora