Estas semanas han sido muy agotadoras, los ensayos de la Orquesta me dejan muy cansada, debo colocarme manteca de cacao en los labios para evitar mucho dolor y que éstos sé agrieten. Mis amigas y yo siempre estamos juntas pero esta tarde ellas no estaban, así que decidí entrar en un salón que estaba al lado del de Clarinetes para dibujar un rato..
Había dibujado una mariposa multicolor sobre una rosa en escalas grises, se veía muy linda, estaba sumergida en mi dibujo y no me había dado cuenta de que había una señora, ya algo mayor viendo lo que hacía.
- Dibujas muy hermoso - me sonríe - ¿Por que dibujas aquí donde nadie puede verte?
- Usted misma acaba de responder - esbocé una sonrisa - Porque aquí nadie puede verme, me siento más cómoda así
- Un don como este no merece ser escondido, es más, deberías pintar unas decoraciones para esta Orquesta, tengo un alumno que también dibuja y seria una magnífica idea que ambos le añadieran un toque especial a las paredes de esta instalación
- Lo tendré en cuenta, señora..
- Mariel - río tiernamente
Cuando la señora se retiro fue cuando me di cuenta, ella era la profesora de flauta transversal, una señora muy querida y reconocida en esta institución, gran músico y alguien muy humilde, de buen corazón y ahora que lo pienso, no sería mala idea pintar las paredes de este lugar, pero soy muy tímida y no me gusta que me vean mientras dibujo, siento que observan cada detalle y cada movimiento, me estresa..
Por otro lado la idea de dibujar con alguien más se escucha muy buena, podría aprender de otra persona sobre sus técnicas de dibujo, pero soy mala con los temas de conversación y no quiero llenarlo de preguntas, bah me odio..
Recogí mis cosas y me marché del salón, caminando por los pasillos hacía la salida vi a aquel chico con el que me había topado en la plaza, alto, delgado, moreno, con un rostro de pocos amigos, sus ojos cafés se conectaron con los míos y sentí una corriente eléctrica en mi columna vertebral, me dio algo de miedo y seguí caminando hacía la salida.
- ¡Hey Aqua! - grito Dan desde el otro lado de la Orquesta y corrió hacía mi
Dan era un amigo de percusión, algo escandaloso pero una buena persona, alto, delgado, de piel blanca, cabello liso oscuro igual que sus ojos, usaba lentes desde hace unas semanas, tenía una risa muy contagiosa que la mayoría adoraba.
- ¿Como estas Dan?
- Con hambre, pero el ensayo es en unos minutos y tendré que esperar
- Bueno ya me tengo que ir, mi madre me espera afuera.
- Espero que muy pronto toques con la Juvenil, sería genial tenerte como compañera de ensayo - sonríe tiernamente y no puedo evitar devolverle la sonrisa.
Ya en casa, subo a mi habitación para cenar un yogurt de fresa y pensar si aceptar esa oferta de arte o no, luego recuerdo que dibujar con otras personas es incómodo, por otro lado las personas podrían notar mi talento, pero luego habrá tiempo para eso, por ahora quiero lograr ser parte de la Orquesta Juvenil.
- Aqua ¿Ya decidiste lo que quieres para tu cumpleaños? - pregunta mi madre asomándose
- Faltan 4 meses para eso mamá y no quiero nada, no hay nada que me llame la atención en éstos momentos - me encoji de hombros
- Bueno, cualquier cosa me avisas si, quiero que tengas un bonito regalo - me dio un beso en la frente y cerró la puerta
Apenas se fue mi teléfono empezó a sonar, era Carlos, un amigo que tocaba el fagot y estudiaba medicina, mayor pero sólo unos pocos centímetros más alto que yo, serio y divertido al mismo tiempo, no se si me expliqué bien..
"Aqua, mañana quédate en el ensayo de la Juvenil, hay buenas y malas noticias, luego te explico bien"