CAPITULO III - Confusión

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Regresé en un instante al rincón de mis sueños, en un abrir y cerrar de ojos me encontraba contemplandola nuevamente, la suave brisa acariciaba mis mejillas mientras en el ondo la oía cantar, un canto extraño, una lenguas que no comprendía, un lenguaje que sólo los lunáticos sabían interpretar.

Le pregunté que quería decir eso de "paso a paso irás más seguro", pero no recibí respuesta alguna, insistí nuevamente y noté que enmudeció, luna se enfureció; tanto que puso delante de ella una nube gris y pesada.

Recordó que la ignoré, recordó que desplacé nuestra camaradería por una nueva amiga, la redonda sabía que mis intensiones con la nueva amiga era más que una amistad, tanto se enojó que a través de las nubes la oí llorar y sus lágrimas llegaron hasta mí.

Rápidamente busqué una gran hoja y con ella me cubría de las fuertes gotas que caían del cielo, una de ellas alcanzó a golpearme en el entrecejo y dolió. Grité: "¡Luna perdón!, no volverá a pasar", pero ella indignada siguió ignorandome. Al cabo de unos minutos me dormí bajo una espesa lluvia de lágrimas.

Cuando desperté, Luna no estaba, un viejo amigo con el cual no tenía mucha gracia, estaba mirándome y brillaba mucho más que Luna. Él era un poco gruñón y a penas descubrió que lo miraba me dijo, "todas son iguales, lloran por todo" y soltó una carcajada.

No dije nada, sólo le sonreí y luego insistió en hablarme y lo que dijo me dejó aún más confundido, "no te arriesgues a perder, puedo oler que sólo te quiere por placer".

¿por placer?, ¿arriesgarme a perder?, ¡qué quería decir!. Ahora quien se enoja soy yo. Soy tan malo tratanto de entender y comprender con facilidad los consejos que me dan y más si se trata de amor. Tomé aire profundamente y empecé a analizar cada frase. ¿arriesgarme a perder?, veámos; quizás ella sólo quiere jugar conmigo, hacerme entender que soy su amigo e ilusionarme de a poquito. Pero no importa, podría sacarle besitos de a poquito, jeje, interesante situación.

Pero aún mi mente se negaba a pensar en amistad, mi mente quería algo más. Y que quería decir, ¿por placer?, ¿se refiere a sexo?, Podría ser también una situación más que interesante pero no quería eso, quizas era tenerme para satisfacer la necesidad de ser escuchada, algún tipo de ayuda que yo le podría brindar, satisfacer sus berrinches y pataletas cuando quería.

Aún sigo sin comprender el significado de esas frases, lo que si tengo claro y sé que lo voy a hacer es ARRIESGARME, sea a perder o ganar, quiero saber que se encuentra detrás de esos ojos que me paralizan y esa sonrisa que me derrite cada vez que esos blancos dientes se asoman entre sus dulces labios.

ENTRE LUNA Y YO -Primera TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora