Qué esperar cuando no estás esperando ➳ JiCheol

Are you coming?

La mañana del martes comenzó con buen pie, levantándose tarde. Ese día no tenía clases aunque no sabía exactamente la razón, en la universidad le habían dicho que no tenía que ir ese día y más nada, era algo sobre una reunión del consejo escolar o algo así. Se despertó en una cama vacía dentro de una casa silenciosa, SeungCheol y sus sobrinos debían estar en sus respectivas clases, así que estaría solo por unas cuantas horas más.

Después de asearse y vestirse de la forma más cómoda posible bajó hasta la cocina dispuesto a hacerse un desayuno, encontrándose una nota en el refrigerador que avisaba que había comida para él en el microondas. Sándwiches de jamón y queso. Mientras comía no pudo evitar ponerse a pensar en todas las cosas que habían ocurrido ese mes y un sonrojo floreció en su rostro al recordar los sucesos del pasado fin de semana, SeungCheol era su novio. Su estomago se sacudió y un hormigueo serpenteó por su columna vertebral, el sólo pensar en el mayor hacía que se sintiera como si tuviese quince años otra vez.

Aún no había solucionado las cosas con SooHyun, la niña había empezado a evitarlo y en situaciones en las que no podía hacerlo, se limitaba a ignorarlo. Jihoon ya había dejado pasar su conmoción y preocupación a lo dicho por ella porque SeungCheol ya le explicado cómo era todo, pero simplemente no podía encontrar la manera de acercarse otra vez a ella. Así que la dejaba tranquila, ella le hablaría cuando le quisiera hablar, punto.

Después de comer el vago pensamiento de querer limpiar el poco desorden de la casa llegó a su cabeza, pero lo desechó al instante diciéndose a sí mismo que era mejor ser vago durante todo ese día. Tal vez después podría limpiar. Recordando que aún no les había dado la "gran noticia" a sus amigos, optó por buscar su portátil y ver si SeungKwan y JeongHan estaban conectados al Skype. Sólo JeongHan estaba disponible.

—¿A qué se debe tu llamada? —preguntó el pelilargo al conectar la video llamada.

—Si, hola para ti también. —respondió Jihoon irónico—. Quería hablar contigo y con SeungKwan, pero por ahora sólo seremos tú y yo.

—Soy todo oídos, ¿sabes que pude haber ido a tu casa? No estoy haciendo mucho estos días, conseguir trabajo se ha vuelto una tarea horrible ¿Acaso esta ciudad no necesita de diseñadores de interiores?

Jihoon apoyó su rostro en una mano mientras oía al mayor parlotear, de alguna manera JeongHan siempre se las arreglaba para girar la conversación a su favor y cada que charlaban, los problemas o chismes del pelilargo tomaban más protagonismo.

—SeungCheol es mi novio. —interrumpió el castaño.

JeongHan se ahogó con su propia saliva y miró a la pantalla boquiabierto, sin creerse aún lo que su amigo le había dicho. Jihoon disfrutó ver la expresión impactada en el rostro del pelilargo y no ocultó la sonrisa que apareció en sus labios.

—Estaré en tu casa en media hora. —dijo JeongHan antes de cortar la video llamada.

Media hora después, en la que Jihoon se había entretenido únicamente viendo televisión, JeongHan estaba de pie frente a la puerta, golpeándola de forma apresurada como si fuera a tumbarla en cualquier momento. Jihoon no se molestó en apurarse para abrirle, en su lugar tomó su tiempo para hacerlo llegando incluso a quedarse de pie frente a la puerta por varios segundos sólo para exasperar al mayor.

—Tumbarás mi puerta. —se quejó el castaño luego de abrirla.

JeongHan entró como si se tratara de su propia casa, quitándose los zapatos sin cuidado para luego mirar a Jihoon como si no se creyese lo que el menor le había dicho a través de Skype media hora atrás.