En esta ocasión vengo a hablaros de un tema que se está tomando demasiado a la ligera en esta plataforma y que está siendo glorificado en muchas novelas. Creo que la gente no se da cuenta de la seriedad del asunto, así que para que sepáis lo que se siente voy a contar mi experiencia personal.
Poneros en situación: Claire, trece años, segundo año de la ESO, está harta de ser molestada por sus compañeros y de ser considerada una "friki".
Así era yo con trece años, y empecé segundo de la ESO con la esperanza de que algo cambiara. Y vaya si cambió.
Empecé a ir mucho con una chica, llamémosla A, que estaba en el grupo de las personas "conflictivas", por decirlo de alguna manera, y terminamos haciéndonos muy amigas. La cosa es que también empecé a llevarme con sus amigos, y entre ellos había un chico que iba a mi clase, llamémosle M, que fumaba y robaba, entre muchas otras cosas. Él se sentaba delante mío, y hablábamos bastante durante las clases, hasta que un día me pasó una nota de papel donde ponía "¿quieres salir conmigo?". Yo, al ver que alguien me hacía caso y que por fin iba a tener un "novio", dije que sí. Y ahí empezó todo.
Recuerdo que un día quedé con él por la calle. Estábamos sentados en un banco y él dijo que quería liarse (besarse con lengua) conmigo. Yo le dije que no, que me daba mucho asco. Siguió insistiendo y presionándome hasta que accedí. Lo recuerdo como una experiencia asquerosa, siempre recordaré que él sabía a tabaco y era muy desagradable, pero no me dejó apartarme. No le di importancia.
Pero entonces empezó a acosarme. Me seguía hasta mi casa e intentaba colarse dentro, de hecho una vez lo consiguió y quiso liarse conmigo dentro de mi casa también, ya que no había nadie. Accedí, sólo quería que se fuera. Pero él sólo quería besarme y tocarme, no había manera de sacarlo de mi casa y tenía miedo. Al final se fue.
Recuerdo que, cuando le veía por la calle, corría intentando evitar que me viera. Me seguía a mi casa, a casa de mis abuelos, cuando iba al psicólogo (yo le decía que iba al médico porque me daba vergüenza que le contara a los demás que iba al psicólogo). Una vez me siguió hasta el portal de casa de mis abuelos, aunque yo le supliqué que no me siguiera porque no quería que mis abuelos vieran nada. Entró en el portal conmigo, me puso contra la pared y empezó a besarme, metiendo su lengua en mi boca en contra de su voluntad, pero al final cedí porque solo quería que terminara y se fuera. Entonces metió una mano dentro de mis pantalones y mis braguitas, tocando mis partes. Grité y agarré su muñeca, sacando su mano de ahí a la fuerza. Al principio se resistió a sacarla, pero al final lo hizo y me llamó "frígida" antes de irse.
A los meses, decidí que no podía más y rompí con él por SMS ya que tenía miedo de decírselo cara a cara. Sorprendentemente se lo tomó medianamente bien y me dejó en paz. Casi un año después, tuve relaciones sexuales por primera vez con otro del grupo, que también era amigo suyo, y se enteró.
Pasó un tiempo en el que me dejó en paz. Consiguió una novia, y además yo me cambié de instituto así que ya no le veía. Empecé a salir con un chico que me quería y me respetaba, y dejé de juntarme con el grupo de mi antiguo instituto. Pero cuando yo tenía quince años, M volvió a interesarse por mí repentinamente. Me escribía por Facebook, me dijo que él "aún me quería". Me propuso que fuéramos follamigos y yo le recordé que tenía novia. Él solamente dijo, "lo sé, pero no la quiero, yo te quiero a ti". Yo le dije que tenía novio, le dejé claro que él (M) ya no me gustaba. Él dijo que mi novio no tenía por qué enterarse, y cuando le dije que no quería, dijo cosas como que yo no quise acostarme con él, que era una cabrona por haberle dejado y (casi un año después de dejarle) haberme acostado con otro del grupo. Me pedía que quedáramos para vernos continuamente, me enviaba solicitudes de videollamada todo el rato, yo nunca contestaba. Además, me preguntaba constantemente sobre mi vida sexual con mi novio.
Un día me lo encontré por la calle, no hablamos demasiado (típico saludo y "cómo estás" de cortesía) y me fui. Al volver a casa, tenía un mensaje suyo diciéndome que había visto cómo yo le miraba y que sabía que me gustaba. Le dije que no me gustaba, él me dijo que yo a él sí. Luego me preguntó si quería sexo y volví a decirle que no. Entonces me dijo que si me volvía a encontrar por la calle, me violaría. Al rato rió y dijo que era una broma.
Le bloqueé de todas las redes sociales, él intentó volver a agregarme pero lo rechacé.
Hace ya tres años de eso, no he vuelto a saber nada de él, pero vivimos en la misma ciudad (que no es muy grande).
Nunca le conté nada de esto a mis padres porque no creí que fuera tan importante. De hecho, apenas lo tenía como un hecho relevante de mi vida. Pensaba "hay chicas que han sufrido cosas peores y no se quejan". Pero hace poco, mirando un proyecto contra las violaciones y el acoso sexual, vi que había historias parecidas a la mía. Mi familia no sabe nada de lo que pasó, solo una de mis primas lo sabe. Supongo que también me daba vergüenza admitirlo.
Lo que más me jode es que pensé que era algo normal, que los chicos eran así y que no debía comerme demasiado la cabeza. Ahora, con todo lo que he vivido y todo lo que he aprendido en estos tres años desde que me ha dejado en paz, es cuando me doy cuenta de que su comportamiento era despreciable e injustificable, y que me estaba acosando sexualmente.
La cosa es, que si alguien os obliga a hacer algo, os toca en contra de vuestra voluntad, os acosa por la calle y/o por internet, no le restéis importancia. No es normal, debéis decírselo a alguien que os pueda ayudar, incluso podríais denunciarlo a la policía. Pero no os quedéis calladas (o callados).
Y, antes de glorificar el acoso sexual en vuestras novelas, tened en cuenta lo que se siente. Nadie se enamora de su acosador. Es una situación agobiante, y más cuando eres adolescente. Y mi caso es bastante leve comparado con muchos otros que implican violaciones y acosos más serios, pero yo solo tenía trece años.
Con esto no pretendo victimizarme ni nada de eso, no tengo esa necesidad, y además es algo que ya tengo superado. Con esto pretendo concienciar, que sepáis que el acoso sexual es un tema serio y que os metáis en la piel de los demás antes de escribir cosas así.
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El mundo de Claire
De TodoToda la vida escuchando "vives en tu mundo, Claire" , y he llegado a la conclusión de que si paso tanto tiempo allí debe ser porque algo interesante hay. Aquí hablaré de temas tabú, temas que considero importantes, daré mis opiniones, os contaré m...