Esta es la última vez que te pido esto
Encabeza con mi nombre tu lista
Esta es la última vez que te pregunto "¿por qué?"
Rompes mi corazón en un abrir y cerrar de ojosHabía tantas cosas en la mente de Jos. Tantas que le provocaban jaqueca.
Llevaba al menos media hora afuera de la casa que compartía con Villalpando. Sin embargo, le era imposible el poder salir de su coche.
Pensó en Alonso, en como era tenerlo cada noche para él mismo, pensó en el repiqueteo de su corazón acelerado cada vez que lo tenía cerca. Pero también pensó en sus miradas frías cuando éste quería al menos tocarlo frente a otras personas. Alonso no permitía que por ningún motivo Jos lo abrazara frente al público, «no quiero levantar sospechas». Pensó en el dolor en su pecho, y trató de encontrar una razón lógica para el miedo irracional en Alonso por dar a conocer su relación.Jos sabía que había algo más que el poder acabar con la carrera de ambos, lo veía en los ojos llenos de terror en el rostro de Alonso, ¿era por su familia? Esa posibilidad quedó desechada, ambas familias lo sabían y no parecían oponerse ante aquello. ¿Eran las fans? Al menos la mitad de ellas apoyaba la posible relación entre ellos. ¿Los chicos? ¿Los managers? ¿Qué era?
El no poder obtener respuesta le ocasionaba un nudo en la garganta a Jos quien quería desesperadamente poder entender a su novio.Su reloj marcó las 2:30 de la madrugada y Jos supo que tenía que descansar.
¿Qué pasaría con Alonso y con él? ¿Estaba dispuesto a dejarlo? ¿Qué tan grande era su amor por él? ¿Cuánto tiempo más tendría que soportarlo?
Bajó del coche dando traspiés en la oscura calle. La noche era cubierta por feroces truenos y una escandalosa lluvia. Pero ni siquiera las frías gotas cayendo sobre Jos le hicieron avanzar con rapidez hacia su hogar. Tenía miedo y no estaba seguro del por qué.
De su bolsillo trasero sacó el manojo de llaves y tras abrir la puerta del color del chocolate se adentró con pasos sigilosos. Todo estaba a oscuras y no parecía haber indicio alguno de que Alonso se encontrara despierto.
Subió las escaleras y se adentró en su habitación. Se sacó sus pertenencias de los bolsillos de sus jeans y se deshizo de sus tenis antes de caminar hacia el closet de donde extrajo su pijama y se dirigió al baño para darse una larga ducha.
Una vez dentro de aquella regadera, con el agua cayendo sobre su cuerpo, Jos se permitió pensar una vez más en el lío dentro de su cabeza.
Quería llorar y patalear tan fuerte como lo haría un niño cuando no obtiene lo que desea. Jos deseaba que el mundo entero supiera lo mucho que amaba a Alonso, sin embargo, eso era algo que todavía no le concedían.—¿Jos?—escuchó la voz de Alonso apaciguada por el ruido del agua al caer—. ¿Eres tú?
El chico sorbió su nariz y aclaró su garganta esperando que Alonso no se diese cuenta de que había estado llorando en silencio.
—Sí—afirmó, con voz temblorosa—, soy yo.
Cerró el grifo ocasionando que la lluvia artificial se detuviera y dejara de mojarlo a él y a sus pensamientos.
Enroscó la toalla sobre su cintura y con otra secó su cuerpo. Abrió la puerta del baño encontrándose a Alonso de pie observándolo con curiosidad.—No debes bañarte cuando caen relámpagos afuera—le dijo—, podría pasarte algo.
—Lo siento—se disculpó, evitando su mirada—, no lo sabía.
—¿Estás bien?—inquirió tocando con sus dulces manos su rostro haciendo que girase a verlo—. ¿Por qué lloras?
—Estoy bien—sonrió, alejando su rostro lo más lejos posible de Alonso—, no es nada.
—¿Por qué te fuiste así esta tarde? ¿A dónde fuiste?
Jos pasó la playera por encima de su cabeza mientras pensaba en que es lo que podía decir.
—Lo siento yo.., tuve un asunto que arreglar con Yaya, nada importante.
—¿Estás seguro?
Jos lo pensó dos veces antes de responder. ¿Estaba bien? ¿Ambos los estaban? Cerró los ojos sintiendo los pequeños brazos de Alonso envolverlo desde atrás, besando su hombro.
—¿Quieres que hablemos?
Jos asintió. Si no sacaba las dudas de su cabeza se iba a volver loco.
Sin embargo, un vistazo al rostro sereno y vulnerable de Alonso le hizo querer retractarse. Nada bueno salía de aquello cuando lo discutían.
Alonso se sentó al borde de la cama y le hizo una seña a Jos para que sentara a un lado suyo. Suspiró y tomó asiento.—¿Qué sucede?
Alonso se encogió de hombros en su lugar.
—No lo sé—le dijo—, tú dímelo, y no me digas que no ocurre nada por qué se que algo está molestándote.
Jos admiró algún punto ciego de su habitación. Pensaba en algo bueno que decir.
—Jos...
—Creo que deberíamos terminar
ESTÁS LEYENDO
Into you (J.V) |Libro 1 |
FanfictionAlonso y Jos han estado juntos por un tiempo ya. No todo es para siempre, ¿o sí?