Código binario (Larry Stylinson)

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Louis se quedó callado cuando los pasos se hicieron más claros y los hombres entraron. Aún podía sentir la respiración pesada del omega, aunque eso me daba cierta tranquilidad. Él seguía bien e íbamos a salir de esta con total seguridad. 

Eran dos hombres, vestidos de negro con trajes. 

"Dices que este es el segundo banco en el que lo guardó" dijo el hombre más grande.

"La información de Noname road ya la tenemos. Tenemos que conseguirlas todas. Mi hermano no era idiota" la voz tan familiar me hizo mirar. Abrí mucho los ojos al ver...

"Es el profesor Thomson" dijo Louis, por lo bajo. Ellos seguían hablando a lo suyo.

"Robarle la identidad a tu hermano no fue suficiente, que también te quedas con su mujer"

"Es mi hermano gemelo. Lo suyo es mío y lo mío...

Yo quería vomitar. No era que no se esperara que el verdadero profesor ya no estuviera, pero de verdad quería que Louis por una vez estuviera equivocado. Obviamente, el más afectado de toda la ecuación era mi pequeño omega, que era muy cercano a él. 

"Voy a meterme al sistema y hacer una evacuación falsa. Tendréis que salir corriendo, solo tenéis una oportunidad" me siguió diciendo Louis, aunque obviamente estaba tratando de mantener la compostura. 

"Además, mejor tener una coartada, ¿no?" se rieron como hienas y vi rojo por un momento. Puede que Thomson fuera un desastre, pero era un buen hombre. Y nadie tenía derecho a meterse con él. 

Me tuve que recordar a mí mismo que no debía enfadarme o mis feromonas se saldrían de control. Se escuchó a uno de ellos olisquear el aire. 

"¿No notáis algo?" Apreté contra mi pecho los papeles, pensando en cómo coger a Niall de ahí y salir pitando. El miedo saliendo del cuerpo del rubio era demasiado notorio y reconozco que yo no estaba mucho mejor. ¿Tendrían armas? Apuesto a que sí, totalmente. Podría con ellos en una pelea cuerpo a cuerpo, pero si había armas involucradas, sería imposible. 

Ya estaba planeando correr, las mil y una salidas, cuando algo llamó mi atención.

Una alarma empezó a sonar por el lugar. La policía. Bueno, Louis haciendo parecer que era la policía.

"¿Qué cojones...?" Empezó a decir uno de ellos. Niall y yo nos quedamos quietos como muertos, tirados en el suelo.

"¿No decías que habían quitado todas las alarmas?" Preguntó el otro, metiendo las manos en la caja y sacando los papeles que yo había dejado.

Se marcharon tan rápido como habían venido, y nosotros, por suerte, nos quedamos con los papeles verdaderos. Cuando se enteraran estaríamos en graves problemas, ¿dónde nos estábamos metiendo?

"Vámonos ya, antes de que Louis..."

"Salid de ahí ya" la voz fina de mi omega nos hizo levantarnos por fin y salir tan rápido como pudimos.

Louis

Solo tuve que esperar a que los demás volvieran, mientras que metía de manera prestada, en una cuenta en las Caimán, una pequeña cantidad de dinero. Quien dice pequeña, dice dos millones, nadie los echaría en falta.

No me juzguéis, haríais exactamente lo mismo si pudierais.

Como para darme la razón, los bebés empezaron a removerse. Algo no iba bien, era un mal presentimiento en mi nuca. Y mis presentimientos siempre estaban acertados. La casa estaba en un silencio sepulcral, cosa que es extraña. Sólo escuchaba mi propia respiración pesada y una presencia se movió por la derecha, lo vi por el rabillo del ojo.