Capitulo veinticuatro.

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Caitlin's POV.

Ya han pasado dos semanas, y mi castigo todavía no había terminado. En estos días, me la he pasado en la cabaña con Jack, hemos visto películas y demás, todo con la excusa de que tenía que estudiar con Bea para que mi madre no se enterara de que estaba con él.

Me he dado cuenta de que estoy completa y estúpidamente enamorada de él. Me gusta su forma de ser, su manera de hacer que todo lo malo se me olvide y cómo me hace sonreír tan fácilmente.

Las cosas con Zoey se pusieron un poco feas, porque en los almuerzo siempre hacia algo para vengarse por haberle robado a su chico o eso era lo que ella decía. Bea siempre la hacía enojar porque le decía lo que Jack y yo habíamos hecho el día anterior, que obviamente Zoey creía que era mentira.

Jared ha estado detrás de mí todo el día, todos los días. Mi recorrido de estas dos últimas semanas fue algo como: colegio, casa de Bea, cabaña. Jack me pasaba a buscar a casa de Bea una vez que Jared ya no estaba cerca.

Todavía no logro hacer que ninguno de los dos me diga que es lo que paso entre ellos, o cual es el motivo por el cual se odian tanto. Sé que debo ser paciente con eso, y que ambos prometieron contármelo, pero la espera de respuestas me está matando por dentro.

No he visto a Matt desde hace semanas porque se tuvo que ir de viaje con sus padres, necesito contarle sobre lo que está pasando, pero supuestamente su celular no iba a tener señal a donde iba o eso fue lo que me dijo antes de irse.

He estado hablando con mi padre estos días y también con Sara, les conté a ambos lo que me pasaba con respecto a mi madre, Jared y Jack. Sara actúa como si fuera mi verdadera madre, me aconsejó, me dijo que tenga cuidado, y que no dejara que jueguen conmigo, ni que haga algo de lo que no estoy completamente segura. Mientras que mi padre me dijo que si las cosas con mi madre se ponían peores, podía mudarme con él cuando quisiera. 

Ahora estoy en el colegio y Bea me estuvo evitando desde que llegue. En realidad, lleva así estos últimos tres días. Se la pasó hablando con otras chicas, y no se sentó conmigo en las clases. La conozco perfectamente y sé que cuando actúa de esa manera, es porque tiene un secreto y no quiere decirme.

Apenas toco el timbre del almuerzo corrí detrás de ella y la arrincone contra los casilleros.

—Ahora si Beatrice, me vas a decir lo que estas ocultando...

—Ho...hola Caitlin, no te he visto en toda la mañana. —dijo mirando hacia otro lado.

—No te hagas, me estuviste evitando que es diferente. Ahora, dime lo que ocultas.

—Aunque quiera, no puedo decirte, no quiero arruinar nada.

— ¿Arruinar? ¿De qué se trata?

—No puedo decirte nada....espera, ¿ese no es Matt? —señalo a mis espaldas, y yo como la estúpida que soy me voltee y deje que Bea se escapara. — ¡LO SIENTO! ¡NO PUEDO DECIR NADA!

Camine hacia mi mejor amigo que venía con un una cara de no entender nada.

— ¿Por qué no me dijiste que volvías? —dije mientras lo abrazaba. —Te extrañe idiota.

—Quería darte una sorpresa enana...—respondió despeinándome un poco. — ¿Qué le sucede a Bea?

—No lo sé, esta así desde hace varios días, oculta algo y voy a descubrir que es.

— ¿Vas a jugar al detective? —dijo riendo.

—Te equivocas...vamos a jugar al detective, tú vas a ayudarme.

Stay with meWhere stories live. Discover now