Capítulo 29

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Hoy es el matrimonio de Elizabeth y Tamara, no estoy tan entusiasmada como pensé que lo estaría pero al menor iré a disfrutar. En cada boda que he si invitada siempre iba con Valery, esta vez toca ir sola y es inevitable no pensar en ella cuando estás cosas las hacía con ella. Gruño de frustración pero sé que podré divertirme como siempre lo hago pero me faltará algo importante.

Anoche se quedó a dormir conmigo Amanda, no quería dejarme sola. Me encanta que ella me cuide, y me ame como lo hace, es tan extraño que Cass la cele de mí, no debería por el simple hecho de que no son nada y que sus sentimientos hacia Amanda es netamente de amistad y cariño, eso lo ha dejado bien en claro, cosa que mi amiga sabe y no se hace ilusiones.

—¿Por qué Cass se comporta así cuando estamos juntas? — Le pregunto mirando mi vestido.

—No lo sé, yo también quisiera saber — Responde lo más tranquila.

—¿Será que le gustas? — Pregunto mirándola fijamente.

—No lo creo — Se ríe sutilmente — Lo siento, es una locura que ella se fije en mí, teniendo en cuenta que "soy una loca inmadura que no tiene estabilidad emocional" como para que ella quiera algo conmigo — Se encoge de hombros.

—¿Eso te lo dijo? — Pregunto frunciendo el ceño.

—Sí pero no le presto atención, total, nunca me fijaría en ella — Confiesa arreglándose el cabello frente el espejo — Es una tonta.

—¡Ay, Dios! — Me siento en la cama sin palabras — ¿Te gusta? — Le pregunto directamente.

—No — Dice en seco — No me gusta, no me gustará — Confiesa sin un rastro mínimo de inseguridad — Estoy bien así, feliz, alegre, disfrutando mi vida.

—¡Wow! — Alzo mis cejas y suelto un silbido de asombro — Eso es asombroso.

—¿Por qué? — Pregunta admirando sus rulos.

—Porque no creí que te sintieras así al respecto — Confieso levantándome de la cama y me situo detrás de ella — Es hora de está mamasita se vaya a mojar este rico y sexy cuerpesito — Se ríe Amanda y me acerco a su oído — Sabes que pienso al respecto, debes buscarte a alguien y te harás más feliz de lo que eres.

—¡Ay, mami! — Se gira mirándome con lujuria y deseo — Ven, te desnudo por completo y no salimos de la ducha — Se muerde el labio y suelto una risa — ¿Y qué tal si te quiero a ti pero estás aferrada a Valery?

—No bebé, tú quietecita aquí que tu mami necesita ducharse — Le guiño un ojo y salgo del cuarto meneando mi culo, ignorando su pregunta.

Es una chica loca y la verdad me agrada pero espero que no se esté haciendo una idea errónea de lo que siente por mí y lo que quiere. Cassandra tiene un serio problema con no fijarse en Amanda. Ella es feliz a su manera y sabe cómo alegrar la vida de las demás personas, tiene ese brillo y esa tranquilidad que con solo verla ya estás alegre y te tranquilizas, sabiendo que todo irá bien.

Sabe cómo mantener la calma en tiempo de tormenta y siempre tiene varios puntos de vista, no se queda con una sola opinión, siempre busca más, no se queda de brazos cruzados, ella sabe cómo resolver las cosas. Tiene un carácter dominante, fuerte y firme, su personalidad es tan limpia y tan amplia, da sin recibir nada a cambio. Es bondadosa, dadivosa, amable.

Una mujer así, es completa y sin ninguna duda cualquiera quiere tener a su lado, pero si Cass no lo ve, entonces está muy errada, aunque acepto su limitante, tiene novia y mirar a otra chica está mal pero si estoy buscando a alguien y tengo a una Amanda a mi lado, como se la conquisto y me quedo con ella. Ella tiene razón si no tuviera tan aferrada a Valery estaría con Amanda.

Mariposas OcultasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora