Serendipity •Quicksilver• [Season One]

12

Capítulo 12:
"El Beso"

-¿Cómo es eso de que quieren explotar el mundo?- preguntó Steve cuando íbamos en el carro rumbo a la torre.

-¡Cómo te lo digo! ¡Quieren mezclar dos de los químicos más potentes existentes! ¡Es inaudito! ¡No es fortuito! ¡Es...!-

-Cálmate Lea. Estoy seguro de que tienen una muy buena razón par mezclar eso-. Me calmó Pietro.

-No es una buena razón. Quieren vendérsela a papá. Él aceptará. ¡Pueden volar una ciudad entera!-reclamé indignada.

-Hay que hablarlo con Tony. Esto puede ser grave.- dijo, cómo no, Capitán América. Asentí dando señal de acuerdo y me acomodé en el asiento.

Luego de un fatigoso viaje --ya que Steve y Pietro no paraban de pelear por la estación de radio-- llegamos por fin a la Torre de los Vengadores. Cansada, salí del auto y me encaminé hacia el interior del suntuoso edificio.

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-¡¿Qué quieren hacer qué?! ¡Esto es muy peligroso! ¡Hay que pararlo! Aunque valdría millones... Digo, ¡No! ¡Es inaudito! ¡Es...!- replicó Tony furioso.

-De tal palo, tal astilla-. Recitó el Maximoff.

-Cállate Maximoff-. Le repliqué yo.

-Quilliti Miximiff-. Me imitó infantilmente.

-¡Oh, vamos! ¡No puedes ser mas inmaduro, alcornoque!- le grité, esta vez yo, infantilmente.

-¡Te pareces a mi madre!-

-¡Y tu te pareces a mi hijo!-

-¡Cállate, sabandija!-

-¡Cállate cabeza de guacamole!-

-¡Cállate! -

-¡No, tu cállate!-

-¡Basta los dos! Son adultos, compórtense como tales. Ahora, vayan a trabajar. Que los mayores de 50 años tienen que hablar.- gritó Steve. Lógico, el tiene como mínimo 97 años y papá... bueno, siempre niega su edad, así que no se cuantos tiene.

-¡Hey, cubito de hielo reencarnado! ¿Qué no ves que tengo treinta recién cumplidos? Soy todo un hombrecito-. Contraatacó Tony.

-Si Tony, por supuesto que tienes treinta. Más veinte, y... unos diez mas... si, algo así. -dijo Pietro.

-Vámonos. O seguirán peleando- agarré a Pietro de la mano y lo saqué a rastras de allí.

Nos quedamos en el pasillo, sin saber qué hacer. Bruce no me ha llamado u Natasha me dijeron que estaba en una misión. Tampoco quería ir a mi habitación, ni a entrenar (por supuesto que no quiero entregar, soy demasiado vaga). Al igual que yo, Pietro se quedó aquí.

Tenía que hablar con él. Teníamos que hablar sobre la penosa cita a la que asistimos. Teníamos que aclarar Qué era esto. Pero no me salían las palabras, no iba a decir algo como "Oye, ¿Somos novios o amigos? Luego de la desastrosa cita a la que concurrimos tengo que aclararlo. " Aunque ahora que lo pienso no está tan mal... Digo, no. Tengo que tener un poco mas de propiedad.

Así pasaron varios minutos, en silencio. Pietro abría y cerraba la boca repetidas veces, pero nunca llegaba a decir una palabra completa. Ya me estaba desesperando olímpicamente, así que tome una gran cantidad de aire, me preparé mentalmente y me dirigí a él.

-Piet-

-Lea, déjame a mi. -me interrumpió-Lo siento, no tenía que haber hecho eso. Digo, lo de la cuenta. Me comporté como un completo idiota, y machista. No volverá a suceder. Pero bueno... lo que pasa es que... es un poco difícil la verdad...-

-Ahora déjame a mi. -Respiré hondo- Me gustas Maximoff. Me has gustado desde hace mucho tiempo, inclusive en H.Y.D.R.A. He de decir que ahora me gustas más. Y bueno... coso.. por eso-

No pude hablar más. Nuestras respiraciones se aceleraban, hasta fundirse en una sola. Unos labios presionaban con los míos dulcemente. Me estaba besando. (No me digas) nuestros labios encajaban perfectamente como piezas de rompecabezas. Aunque suene un poco dramático e irreal, fue mágico; como en un cuento de hadas. Era como si danzaban al son de una música imaginaria. Una melodía clásica, pacífica.

El beso no duró mucho, ya que nos faltaba aire. Pero no nos separamos del todo. Quedamos frente con frente, mirándonos a los ojos. Sus ojos cerúlea brillaban por el reflejo del sol por las ventanas.

-Eso sí no lo esperaba- dije.

-¿Pero te gustó no? Digo porque sino lo podemos olvidar todo y...-

-No me gustó-. Dije.

-Oh, entonces..-dijo desilucionado.

-Me encantó-. Sonrió.

-Igual ya lo sabía. A todas les gusta un beso de un Maximoff-. Dijo volviendo a su arrogancia.

-¿Podrías por favor olvidar tu ego por un solo microsegundo? Estábamos tan bien...- dije exasperada.

-Bien, bien-. Dijo levantando las manos. -Ahora que lo pienso, tendría que estar entrenando en este momento. Nos vemos después.-dijo sin antes darme un pico. Lo vi yéndose y yo me fui para ver si estaba Wanda. Caminé sonriendo como estúpida.

Lo que el amor le hace a las personas...

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Hola beibis o_0

¡Se besaron! *hace bailecito sensualón* okno.

Otra vez, perdón por estar inactivaa.

Lo bueno es que se los voy a recompensar, haré los horarios de publicación.

Voy a publicar un nuevo capítulo todos los viernes entre las 16:00- 22:00 (Zona Horaria de Argentina) a más tardar los sábados hasta las 10:00 a.m

Hoy (lunes) publiqué antes porque hacía mucho que no publicaba. Pero tranquilos que también publicaré el viernes.