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Capítulo 14:
"Cómo Un Equipo"

-Pietro, ¿Dónde está el Hulk?-le pregunté. Ya estaba bastante preocupada.

-Y me vienes a preguntar a mi-. Me encogí de hombros. Luego, me dirigí a los rehenes, la mayoría agentes. Me pareció raro que no se pudieran defender, aunque para hablar de defensa, ni los Vengadores pueden parar al Hulk.

-¿Han visto a la bestia?- les pregunté a ellos.

-¿La cosa roja que nos habló y nos ató aquí? Si, por supuesto que lo vimos-. Habló una mujer rubia.

-¿Nombre?-

-Sharon Carter-. Respondió orgullosa.

-Ah, una Carter. ¿Eres algo de Peggy Carter?- Steve me había contado algo sobre ella, sobre su corto amor y su admiración a su persona.

-Si, es mi tía.- respondió. -La cosa roja se fue por la izquierda.- Me miré con Pietro, le hice una seña y nos fuimos a atraparla.

Caminamos silenciosamente por los pasillos de la torre, buscando algún signo de vida.  Buscamos por cada esquina y pasillo rigurosamente, pero ni un signo vital.

  Llegamos a una oficina, pero no cualquiera, era una que contenía archiveros con clave digital, lo que debería estar allí; debe ser algo muy importante. Me extrañé, son demasiados secretos.

Yo pensé que S.H.I.E.L.D era la que tenía muchos secretos. Digo, era dirigida por Nicholas Fury, EL espía, sus secretos tienen más secretos. Pensé que esto iba a ser diferente.

En HYDRA te hacían repugnar a los agentes de S.H.I.E.L.D, te hacían vigilarlos por horas mientras te decían cuán asquerosos eran. Era raro, si, pero eficiente. Si no fuera porque me adentré a los archivos clasificados, no hubiera sabido  quien era mi padre y mis raíces.

Estaba tan sumida en mis pensamientos que no realicé que alguien había hecho un ruido. Miré a Pietro, para ver si fue él, pero el me miró negando con la cabeza. Me giré, con el arma en manos. Apunté a la nada.

Pero derrepente, una sombra abarcó gran parte de la pared frontal, dejandome en desconcierto.

La sombra distinguía una figura esbelta y muy alta. Ancha por los costados, y con piernas larguísimas. Para darse una idea, era como la sombra del Hulk, nada más que con largas piernas y gran anchura de hombros.

Me giré, quedando frente a frente con la criatura. Era tal cual me lo imaginaba. Roja, por la piroquinesis, alta y esbelta como mencioné antes y su cara irradiaba una furia y enojo imprescindible.

Me asusté, claro. Nunca pensé que algo que había sido hecho para el bien, terminara en el bando equivocado. Pero persistí. Me puse en posición de combate, me concentré mucho para que las esferas de núcleo salgan de mis manos, me concentré y lo logre. Ya así, las arrojé al monstruo. Él quedó por unos segundos atontado, pero luego se enojó más de lo que ya estaba.

Me volví a concentrar, pero esta vez trate de que las esferas aumentarán en tamaño. Tomó su tiempo, pero Pietro lo despistaba. Las bolas semi-transparentes se duplicaban en doble tamaño, haciéndolas más potentes. Y luego se las arrojé, haciendo que se desmayara. Pero mi destino no fue diferente; había utilizado mucho de mis poderes en poco tiempo.

  Podía escuchar la voz de Pietro llamandome, pero luego esas palabras se transformaron en murmuros incoherentes que luego no entendí.

Serendipity  •Quicksilver• [Season One]Where stories live. Discover now