Soy Invisible ©

Un día con el desconocido

6 de Octubre.

Era domingo, no sabía que hacer, estaba sentada en el bordillo de la cama, pensando en los resultados si me iba de casa, mire por la ventana, durante este año no sabía que hacer. Vi a Walter en frente de la entrada, tocó el timbre y vi como mi madre le saludaba, al parecer mi madre le dejó entrar.

- ¡ Laila tienes visita ! - llamó mi madre.

Me mire en el espejo, estaba bien, tenía puesto mi casaca roja, debajo de la casaca tenía una polera sin mangas de color verde, llevaba puesto mis leggins brillantes verde y las botines rojos, tenía el pelo recogido en un moño. Baje las escaleras y vi a Walter, tenía el pelo marrón claro, no lo tenía negro, sus ojos azul zafiro me miraron de arriba abajo.

- ¿ Que haces aquí ? - pregunté.

- Y esos modales señorita. - dijo mi madre pero la ignore como ella hacia conmigo.

- Estoy aquí para que salgas de tu casa. - dijo con una sonrisa amplia enseñando sus perfectos dientes blancos.

- Tenía pensado salir sola al centro comercial. Si quieres acompañarme vale has lo que quieras.- no le di importancia.

Subí a mi habitación, cogí mi bolso y baje de las escaleras, abrí la puerta de la salida de la casa y me encamine hacia la parada de autobús.

- ¡ Laila ! - llamó la voz de Walter. - ¿ A donde vas ?

- Me voy a la parada de autobús que hay en la plaza.

- Yo te llevo he traído mi coche.

Le mire inexpresiva, vi su coche parecía que le hubiera costado un montón de dinero.

- Prefiero ir en autobús.

- ¿ Por qué ? Es más cómodo ir en coche.

- Los de clase media van en autobús como los de la clase baja y vosotros los de la clase alta vais con vuestros coches de lujo pero nosotros de la clase media vamos con un coche o en autobús, así que yo por eso voy en autobús porque no tengo coche.- Él se acercó a ella, su proximidad la agobiaba. La cogió y la puso en su hombro. - ¡ Bajame Idiota, no me lleves así, no me pienso montar en tu coche, oyes, que me bajes ! 

Laila se revolcaba en el hombro de Walter, le pedía que la bajase que no le gustaba pero él ignoraba sus súplicas. La sentó en el copiloto, al parecer la había sentado en su coche que era un descapotable. Él entró en el conductor y había arrancado el coche y se dirigía hacia el centro comercial. Ella le miraba enfadada, Walter sabía que lo había echo mal pero tenía que hacerlo para acercarse a ella, desde que la vio en la casa de su ex para sacarle unas fotos a ellos dos, se la había quedado mirando todo el rato su estabilidad en si misma pero que a veces se caía en picado, él entendía muy bien eso, él había pasado por eso, el primer año de instituto venía con sus amigos pero el no hablaba con nadie, si no que le dejaban de lado, así pasando todo el rato, pero consiguió quitándose esa maldita invisibilidad mediante sus actos del hijo de la directora.

Cuando llegaron al centro comercial, Walter estaciono el coche en una plaza libre, Laila bajo del coche donde después cogió su bolso, se dirigió a la entrada, al parecer notaba la mirada de Walter en su espalda, subió a las escaleras mecánicas para ir a ver las tiendas. Entró en una, miraba la ropa pero a ella lo que le más le gustaba era esas blusas que podías meter una polera sin mangas o una camiseta, miro los pantalones, los pitillos y los leggins. Seguía notando esa mirada de Walter, oyó un bostezo. Miro hacia atrás, temía que Walter se aburriese.

Lo vio el estaba eligiendo ropa de mujer donde se lo dio así que no se aburria entonces de. ¿ quien era el que estaba bostezando ?

- Pruebatelo esto te quedará de maravilla.

Ella parpadeo varias veces fue a los cambiadores, se lo puso y le quedaba bien esa blusa de vestir de color azul celeste, con esos pitillos marrones. Se puso una polera de color negro con estampados de rosas con unos pitillos rosas. Luego se puso un vestido de falda de vuelo de color verde musgo, con ese vestido le quedaría de maravilla con unos leggins negros brillantes con unos botines del mismo color del vestido. Se puso otra vez su ropa, salió de los cambiadores y se dirigió a Walter, le sonrió.

- Son divinos lo que me haz cogido.

- Como los he cogido yo te lo pagó.

Laila se quejaba todo el rato que Walter le pagará su ropa, se lo estaba pasando bien con el nunca le había pasado eso pero sabía que se harían amigos en un futuro.

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Hola !

¿ Que les gusta ?

Bueno espero que les haya gustado, la pregunta es.

¿ Que más secretos tiene Walter ?

¿ Quien era ese chico que iba con Verónica ?

¿ Va a parecer alguien más para conseguir el corazón de Laila ?

Bueno también quería pediros unas ideas para la historia, comentar y votar.

@Neklie y @erisaegipt1

os saludan. @-}-- :-D ;-) :-) :$ B-)