♂ Contrato de Almas ♀

Movimiento Forzado

Add salió corriendo tras su compañera, un tanto incrédulo por lo que acababa de afirmar o mejor dicho, por lo que creía haber escuchado. Como portador del cuerpo robótico de Eve, no tardaron en seguirlo los Módulos Nasod, Moby y Remy y el par de sirvientes robóticos; pero Add los convenció de que no había de qué alarmarse, así que lo dejaron tranquilo. Eve se dirigió a un pasillo amplio y descendió las majestuosas escaleras. Los demás ya estaban reuniéndose en el vestíbulo y no estaban solos; finalmente Rose y Elesis estaban de regreso, en compañía de Ariel, quien lucía preocupada y denotaba una expresión sumamente seria.

"-Hora del show-"pensó Add al ver que los demás le observaban, no como él, sino como la reina Nasod. El desafío apenas comenzaba, pues el también entendía que tenía que personificar a Eve lo mejor que pudiera; cuando se integró, Rena fue de inmediato y con el rostro lleno de asombro le soltó lo siguiente:

-¡Santos cielos, Eve! ¿Qué acaso no dormiste bien?- su voz sonó tan chillona al soltar la última frase, que Add tuvo que contener las ganas de reírse de ella.

-Diablos, es cierto, luces terrible- agregó Elsword abriendo mucho los ojos.

"-Maldita sea-"masculló Add mentalmente "-precisamente estaba evitando llamar la atención y ocurre esto...-"

-¡Idiota!- exclamó Aisha golpeando con rudeza al enano pelirrojo – ¡esa clase de cosas nunca se le dicen a una chica!-

Add suspiró mientras Aisha le lanzaba una mirada cómplice. Lo que menos quería era que lo irritaran, pues conocía de sobra su arrogante y violenta personalidad y no quería que se destapara.

-¡Vamos, vamos! ¡Tranquilos todos!- anunció Rena siendo entusiasta y dirigiéndole una sonrisa pícara a su amiga Nasod mientras miraba de soslayo al chico vestido de purpura al otro lado de la habitación.

Un golpe seco y un quejido captaron la atención de todos.

Lu había intentado bajar, deslizándose por bello barandal de acabado fino pero en un descuido había terminado en el piso.

Un gorgoteo salió de la garganta del cuerpo de la Nasod, ya que Add apenas podía contener la risa y rápidamente, se tapó la boca con ambas manos. Lu estaba preparada para reprochar cuando noto que aquella risa contenida, había provenido no de Add (quien "aparentemente" permanecía demasiado frívolo) sino de Eve...

Lu enderezó el cuerpo levantando su torso del suelo tétricamente hacia arriba –sin apoyarse de sus diminutos brazos- mientras miraba a su compañera robótica, con las pupilas fijos e inmoviles las de un búho, mientras lentamente inclinaba la cabeza. Su pequeño rostro permanecía imperturbable, sin siquiera mostrar signos de dolor por la caída.

El psicópata sentía un extraño sudor frio acompañado de un escalofrío recorriéndole la columna...

-¡Lu! ¿Estás bien?- gritó Ciel mientras los demás aún estaban conmocionados por lo repentino que había sido aquel percance.

La pequeña diableza le devolvió el rostro radiante.

-Sí, Ciel...-

Regresó la macabra inspección de nuevo al rastreador y esta vez, él sintió como si aquella mocosa pudiera ver dentro de su alma...

-...estoy bien- dijo sin dejar de mirarlo para después levantarse y caminar como si nada.

Add sintió una mirada consternada a sus espaldas; provenía de Eve. Los luceros celestes de Lu también la acechaban a ella.