¡¿Por qué Tú?! (Budo x Ayano) 1era Temporada

10. Cordura

(N/A: En el cap. habrá gore, solo te advierto).

Miércoles. 6:10 AM

Dos pelinegros caminan juntos por una gran ciudad, algunas personas tal vez piensen: "Que lindos" o, "Hacen linda pareja" y cosas así de cursis que molestaban a ciertos jóvenes.

Hoy, es un día difícil tanto para Budo como para Ayano. Ambos intentan aclarar sus pensamientos y sentimientos, pues últimamente han estado muy irritables e inquietos.

-Oye, al menos salúdame, Budo.
-¿Y? ¿Es que acaso no puedes saludar por ti misma?
-Pues discúlpeme, señor, no le volveré a dirigir la palabra si así lo desea.

Él solo bufo molesto.

Mientras caminaban, se encontraron con una no tan grata sorpresa.

-Vaya, vaya, vaya... Mi "querido amigo" Budo. -dijo el joven que recién se integraba a la no tan amable conversación que mantenían los pelinegros.
-Oh, querido Enano... ¿Cómo has estado?
-Muy bien. Hasta ahora.

La tensión que se sentía en el ambiente parecía que se podía cortar fácilmente con unas tijeras.

Ella solo se aclaró la garganta.

— ¡Cariño!—una voz chillona se escuchó desde el otro extremo de la calle.—Oh. Tú de nuevo. Maldita niñata.—Expreso con fastidio la dueña de esa voz al ver a la pelinegra.      
—Oye, ya te dije que no me digas apodos absurdos cuando tenemos la misma edad. Idiota.—le respondió Ayano a la "amiguita" de Budo. 

—Sí, sí. Como digas.
—Oigan, dejemos las peleas, ¿por qué no vamos juntos al instituto?
 —Sí, por qué no.

El grupo de muchachos se dirigió hacia su instituto, sin esperar lo que iba a suceder más adelante, en el transcurso del día.

(•••)

Lentamente, Ayano intentaba recordar la sensación cuando el  filo del cuchillo atraviesa la piel. La mirada de desesperación de la víctima, que aun guardaba la esperanza de salir viva de eso.

«Oh, por supuesto; no lo he olvidado.»

Con la mirada buscaba cualquier chica, o hasta incluso un chico. Necesitaba practicar. Desde que empezó a acercarse más a Budo, se había distraído totalmente de la razón por la cual se había unido al club de Artes Marciales. Sí, era para mejorar su técnica; pues ya no se sentía segura de sí misma, ya que cualquier paso en falso o algún error, le podría salir muy caro.

«¿Por qué no practicar con unas queridas "amigas" de Taro, Ayano?

—Sí, ¿por qué no?

¡Excelente! Sólo necesitamos alguna estúpida que te ayude a recordar.

—Y si... ¿Observamos a Taro-senpai? Como antes. Solo digo.»

Muy tarde la pelinegra se dio cuenta que ya se encontraba en la azotea, observando detenidamente a su supuesto "Senpai" del cual estaba enamorada.

—Vaya, ya hasta hablo conmigo misma. ¿Acaso más loco se puede estar? Yo cre-

No pudo terminar. Visualizo a su objetivo. Oka-san, del club de Ocultismo; ya lo había olvidado.
Según Info-chan, a Oka le gustaba Taro, mejor dicho, está enamorada de él.