¡¿Por qué Tú?! (Budo x Ayano) 1era Temporada

7. Celos

Domingo 8:00 AM

-¿Hola? ¿Mamá?
-Hola hijo, estoy preocupada; ¿cuando vuelves a casa?
-Oh, mamá, a mi amiga ya le dieron salida.
-Ah, que bueno por ella. Pero tú... ¿Cuando vuelves?
-¡Mamá!- Se escucho un suspiro quejumbroso al otro lado de la línea.
-Ya, dime cuando.
-Esta bien. Posiblemente el lunes, planeo quedarme con ella otro día más.
-¡¿Qué?! ¡¿Acaso te has enamorado?!
-¡¿Que estoy enamorado?!
-Sí. Eso es lo que sientes.
-¿Y ahora que hago?

No lo puedo creer, yo, Budo Masuta enamorado, ni mas ni menos de Ayano Aishi.

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-Buenos días, Masuta-kun.- saludo sonriente una pelinegra.
-Ah...? B-buenos dí-días...- Aquel joven no podía articular ni una sola palabra frente Ayano, no después de la incómoda llamada de su madre.

-¿Hoy vamos a mi casa, no? Me imagino lo desordenada que deb-
-¡No! ¡Lo había olvidado!
Gritó interrumpiendo a Ayano. Cuando se dio cuenta de eso, se puso más rojo que un tomate. Se moría de la vergüenza. Literalmente se había olvidado de eso. «Oh, no. ¡Hoy iré a la casa de Ayano-chan! ¡Que alguien me mate!»

-Señorita, aquí esta la orden de salida, puede retirarse. No olvide cuidarse bien.-Decía un doctor que acababa de entrar a la sala donde se encontraban ambos jóvenes.
-Sí, no se preocupe, estaré bien.
-Bueno, adiós y que tengan un buen día. -dijo ahora mirando a Budo.
-Claro, adiós señor.

*-*-*-*-*-*-*-*

Ahora, Ayano se encontraba frente a su casa. Budo la miraba desde unos centímetros atrás, primero a Ayano, y, después a la gran casa que se encontraba frente a él.

-Hogar, dulce hogar.-comentó la chica.

Avanzaron hasta la entrada, donde Ayano se agachó para buscar la llave justo entre la puerta y la pared, en cierto punto, el cual solo ella y sus padres sabían cual era exactamente, bueno, hasta ahora.
-Shh... No le digas a nadie, Masuta-kun.
-Claro, como digas.

Cuando entraron, estaba todo como lo imaginaron. Vuelto un chiquero. Ayano suspiro pesadamente y sin pensarlo dos veces, invito a Budo a pasar y subió las escaleras corriendo, hasta su habitación. Obviamente a esconder las "reliquias" que tenía de su tal "Senpai"; porque en cierto modo, le causaba vergüenza que alguien más viera aquellos preciados objetos. Al terminar de esconder todo, bajo llamando a Budo, por que tenía hambre y quería que desayunaran juntos.

-¿Masuta-kun?
-¿Si?
-Vamos a desayunar juntos.
-Ok.

*-*-*-*-*-*-

-¡JAJAJAJA! ¡BUDO TIENES TODA LA CARA LLENA DE HARINA!
-¡DEBERÍAS MIRAR LA TUYA!

Ambos chicos reían mientras terminaban de preparar su "desayuno" puesto que decidieron hacer panqueques, pero, como no cocinaban a la perfección mas un pequeño error terminó en una guerra de comida.

-¡Ayano-chan, se esta quemando ese panqueque!
-¡¿AH?! ¡Ya lo apago!
-Oh, no. Se arruinó. Tendrás que comerte uno menos.
-Ayy~ Budo es muy bueno conmigo y me dará uno...- canturreo Ayano, consiguiéndole un buen sonrojo a Budo-¿o no?
-C-claro que n-no. Harás otro o no comerás.

Su charla fue interrumpida por unos golpes en la puerta. Budo y Ayano se dirigieron ambos a ver quien era.

Al abrir la puerta se encontraron con un chico y su madre, la cual tenía una tarta en sus manos. El chico no era tan alto, pues solo se veía unos 4 centímetros más alto que Ayano, tenía un poco largo y ojos azules claros. Ha Ayano le pareció en cierta forma atractivo.

(Marou ↑)

-Buenas, jovencitos, yo soy Sophia Fille, su nueva vecina y el es Marou, mi hijo. Pasábamos a saludar y a presentarnos, ya que somos nuevos en el barrio.
-Ah, ok. Soy Ayano Aishi y él es Budo Masuta, mi...
-Novio, mucho gusto señora Sophia y...¿Marou?-respondió Budo con cierto tono de molestia en la voz, una a la que se le podría llamar celos.
-Sí, soy Marou Fille, mucho gusto, Ayano-san.
-El gusto es mió, Marou-san.

La forma en la que se miraban, se sonreían molestaba mucho a Budo.

-Bueno, solo veníamos a dejarles esta tarta, como primer paso para reforzar nuestra confianza, ¿no es así, vecinos?
-Sí, muchas gracias.

*-*-*-*-*-*-*

Ambos pelinegros ya se encontraban desayunando, pero había algo que a Ayano incomodaba en la mirada fija de Budo.

-¿Qué? ¿Tengo algo en la cara?

Él no respondió, solo se levanto, se acercó a la joven y la cargo como un costal de papas, mientras subían las escaleras en dirección al cuarto de Ayano.

Muahajajaja c:
Les dejó el suspenso nuevamente :v
Gracias por leer y por enviar sus OC, aparecerán pronto, en algún cap. Además, este me salió muy largo :p
Créditos a Tomoshibi_03 Por el OC del cap. De hoy.

Bueno, que tengan un buen día,
Juanita 😊