Reencuentro/Clexa/Elycia (Terminada)

Capítulo 14

-¿Le has visto la cara? -Lindsey comenzó a reírse mientras se colocaba nuevamente la camiseta.

-La verdad es que no.

-Claro, estabas entretenida mirando otras partes de su cuerpo... -alzó las cejas varias veces. Alycia notó cómo se ponía colorada. La rubia había bajado con unos pantalones vaqueros rotos y una camisa de cuadros, de la cual tenía desabrochado los tres primeros botones haciendo que se le viera un pronunciado escote y aunque estuviera enfadada con ella no pudo evitar que sus ojos se le fueran momentáneamente a sus pechos.

-Eso no es verdad -se cruzó de brazos-, por cierto, lo del beso sobraba.

-Si sabes que te ha encantado -comenzó a reírse.

-Si, bueno, lo que tú digas. Yo creo que me voy a dormir ya, estoy muy cansada -Alycia estiró los brazos hacia atrás y bostezó-. Buenas noches. No hace falta que recojas esto, ya lo haremos mañana.

Se acercó a ella y depositó un beso en su mejilla.

***

Marie y Eliza se encontraban tumbadas en la cama de la morena, mientras esta abrazaba a la rubia. La había encontrado llorando delante de su puerta incapaz de andar por sí misma. Marie la miraba tiernamente y esbozó una triste sonrisa. Sabía lo que había sufrido Eliza cuando Thomas la dejó por otra chica, tardó casi dos años en volver a confiar en alguien, siempre pensando que la dejarían por alguien mejor. Pero nunca la había visto así antes por alguna persona, debería quererla realmente, pero se negaba a confesarlo y eso la estaba perjudicando. El lunes hablaría con Lindsey sobre ellas, pero ahora era momento de descansar. Marie besó su frente y se quedó dormida abrazándola.

Ya era lunes y Marie acababa de llegar a la facultad donde había quedado con Alycia y con Lindsey. Todavía quedaba más de media hora para que comenzaran la clases, pero ella le había mandado un mensaje a su amiga por si podían verse antes.

-¡Marie! -Lindsey la llamó. Alzó la mirada de la pantalla del teléfono y vio a la chica dirigirse hasta ella. Alycia no estaba. Cuando llegó a su altura la abrazó y le dio dos besos, dejándola atónita no esperaba esa acción de ella.

-¿Y Alycia?

-No pudo venir, le han surgido un par de cosas, pero si no te importa, ¿desayunamos las dos?

-Claro, espera que recoja mis cosas -las guardó todas en su mochila y se la echó al hombro-. Bueno...,¿y a dónde me vas a llevar?

-Aquí cerca hay un bar al que estamos a costumbradas a ir, seguro que te encanta.

Tardaron a penas unos minutos en llegar. Tenía un aspecto muy moderno, con unas grandes cristaleras que dejaban ver perfectamente el interior. Tenía al menos una docena de mesas y unos sillones blancos. Al fondo había un pequeño escenario donde seguramente tocaban algunos grupos los fines de semana. Se acercaron a la barra y se sentaron en unos taburetes. Parecía que no había nadie, hasta que una muchacha rubia salió por una puerta que debía dar a la cocina.

-Hola, Harper.

-Hola, Lindsey -se giró hacia Marie-. ¿No nos presentas?

-Harper, ella es Marie una compañera y amiga de Aly. Marie, ella es Harper, trabaja en este bar donde quedamos normalmente.

-Encantada -dijeron a la vez. Pidieron unas tostadas y zumo de naranja.

-Bueno, en el mensaje decías que querías hablar, ¿y bien? -se llevó la tostada y le dio un bocado, cuando terminó dijo: Aunque Alycia no está, a lo mejor querías hablar con ella.

-No, tranquila. así mejor, realmente quería hablar contigo -se limpió las manos en la sevilleta y la dejó encima del plato vacío-, no sé si sabes lo que pasó entre Alycia y, mi amiga, Eliza.

-¿Te refieres a cuando tu amiga de dio falsas esperanzas a la mía y después la dejó tirada? Porque si de eso, sí estoy al corriente -lo dijo con un tono borde y cortante. Marie no sabía que decir, quería defender a su amiga, pero sabía que lo que le había hecho a Alycia no estaba bien.

-Alycia también es mi amiga. No puedo negar que lo que Eliza le hizo estuvo muy mal, pero...

Lindsey se giró hacia ella y la interrumpió.

-No hay peros, sé que ella sufrió por que la dejaron por otra, pero si sabe qué se siente cuando le hacen eso, ¿por qué lo hizo ella? -al ver que se quedaba callada, se volvió a girar y se bebió lo que le quedaba de zumo de golpe.

-No lo sé... -dijo en un susurro-, pero la quiere, créeme que la quiere.

-¿De verdad? -preguntó con sorna.

-No estoy de broma -Marie se puso seria- por eso quería hablar, quiero que me digas si Alycia sigue queriéndola. Eliza sólo está confundida pero estoy segura de que la quiere.

-Eso deberías preguntárselo a ella.

-Necesito tu ayuda, de verdad. Nunca había visto a Eliza así... el otro día cuando volvió de vuestro piso después de pediros que quitarais la música me la encontré encogida en el suelo, llorando frente a mi puerta. Ni si quiera podía levantarse la tuve que llevar yo hasta mi cuarto. Me contó que os había visto besándoos. Se moría de celos.

Lindsey recordó ese momento y se le formó una sonrisa.

-¿Por qué sonríes?

-¿De verdad que estaba celosa? -respondió con otra pregunta. Marie asintió lentamente-. Vaya pues si que sirvió.

-No lo entiendo.

-Te lo explicaré de camino a la facultad.

Dejó el dinero sobre la barra y salieron del local.

Siento mucho el retraso, pero he tenido toda la semana llena de exámenes. Muchísimas gracias por las 10K de lecturas. Quería dedicarle este capítulo y el anterior a @celiafirefly, en serio, me caes genial, gracias por esas conversaciones y ayudarme en el anterior.

Por cierto intentaré subir más a menudo ahora que tengo más tiempo.