HOMOSEXUAL (relatos gays)

Bienvenido a mi Mundo II

Relata Iker

El alama de mi celular puso fin a mi descanzo, era de vuelta uno de esos días de los cuales no quería levantarme, la verdad estaba muy cansado, daba y daba varias vueltas sobre mi cama, mi cabeza me dolía, justo cuando estaba a punto de preguntarme porque estaba con esa resaca todo los recuerdos de mi realidad vinieron a mi.

Odiaba los primeros minutos de las mañanas pues tengo una breve amnesia de quien soy en verdad, creo que soy un chico normal como todos hasta que vuelvo en mi y todo es la misma mierda de siempre.

Hoy era viernes de nuevo, como si fuera que hay alguna diferencia entre un día y el otro, para mi todos son iguales, la misma rutina de siempre.

Luego de darme una ducha con agua fría, me prepare mi desayuno para ver si así la mierda de resaca salía de mi cuerpo, me senté en la mesa, me prepare el café mas fuerte que se pudo a ver preparado en la vida y comencé a recordar la noche anterior, o al menos lo iba intentar. Después de unos minutos por fin pude traer algunas secuencias de imagines en mi cabeza, la noche anterior la victima fue uno diferente, era un hombre casado.

En esos momentos un sonido familiar me quito de mis pensamientos, era móvil avisándome con el rostro de mi madre en el que estaba recibiendo una llamada de ella.

-Hola mama

-Hija que bueno que estas despierto.

-Si tengo muchas cosas que hacer.

-Como vas en la universidad?

-Bien mama sobre eso son mis actividades que tengo que comenzar.

-Entiendo mi hijo, no te olvides que la próxima semana te tendré listo tú dinero.

-Si mama, no te preocupes estoy bien.

-Estoy mas tranquila así, te dejo hijo, te cuidas, llamame mas seguido si.

-Lo prometo mama.

FIN DE LA CONVERSACION.

Odiaba mentirle a mi madre, ella pensaba que iba a la universidad pero no estoy interesado en llevar ese tipo de vida tan falsa, como si todo en mi vida estuviera bien, la verdad no lo necesito.

Me quede de vuelta sentado en una de las sillas del comedor, de nuevo esa sensación de angustio mezclada de ansiedad volvía en mi, era como que quería llorar pero no podía, quería ser tan fuerte pero la verdad era uno de los seres ms frágiles que habitaba en el mundo.

El día transcurrió normal, trataba de no pensar en lo que paso anoche, pues eso me hacia sentir mal, mas de lo que suele pasar, tal vez esta vez por las circunstancias, o porque recibi mas información que de la que debía tener, era algo que quería eliminar de mis recuerdos.

Para poder hacer pasar el día, comencé a limpiar mi departamento, generalmente cambio de lugar todo para no sentirme tan en la rutina. Cambie mi cama a otro rincón, también hice lo mismo con la sala y el comedor. Estaba cansado que me recosté un momento en el sofá para recobrar fuerzas.

De vuelta ese sonido tan molestoso que suelo escuchar por las mañanas, si mi alarma, pero se escuchaba a lo lejos, en consecuencia hice un pequeño movimiento y seguido a este un golpe en mi cabeza hizo, que me desate totalmente de los brazos de Morfeo; me había quedado dormido en el sofá otra vez. Mientras pensaba todo esto mi alarma de mi móvil seguía sonando pues ahí recordé que lo había dejado en la mesa del comedor.

Luego de levantarme del piso, desperezarme con fuerza fue a recoger mi móvil y ahí me percate que hora era en realidad, mire por la ventana y me percate que mis sospechas eran ciertas, ya estaba anocheciendo y hoy era viernes, las discos y bares estaría llenas de personas, hoy habría muchas victimas.

Fui a dame una ducha rápida, luego me dirigí a sacar una de mis mejores camisas acompañados de unos jeans ajustados, no tenia muchos ánimos de salir hoy pero una promesa es una promesa y mas cuando es con uno mismo.

Volví a fijarme en mi reloj, ya casi pasaría ese chico a buscarme, espero terminar rápido con este pues es un pedante, se cree tanto por su dinero y por su cara bonita, no se como puede a ver gente tan superficial en este mundo, ojala pueda exterminarlos a todos de una manera mas rápida pero ser una especie de superhéroe esta muy lejano a mi realidad.

El timbre de mi departamento comenzó a sonar al igual que mi móvil, este chico a demás ser insoportable es un impaciente, nunca fue buena idea darle mi dirección pero su maldita insistencia no me dejo de otra además con el deberé ser totalmente discreto o mis planes pueden terminar mal.

La platica en su auto era totalmente nula, pues el que hablaba era solo el, contándome de sus viajes y sus multiples actividades de niño rico, estaba a punto de mandarlo a la mierda pero tenia que controlarme aunque la paciencia nunca fue una virtud.

Llegamos por fin, como lo supuse el lugar estaba lleno de chicos y chicas de todo tipo, la diversidad en su máximo esplendor se veía reflejada por eso tenia que actuar rápido si quería que hoy valiera la pena.

El chico este comenzó a tomar y a decir los mismos comentarios de antes, estaba harto entonces procedi, tuve que besarlo para que se callara, por suerte eso del alcohol sirvió para que el chico pierda el control y quiera solo tener sexo, sin importarle donde sea y eso para mi era ir a la perfección.

Entramos en uno de lo cubículos, comenzamos a besarnos y a desprendernos las camisas, el chico este de tan borracho casi no sabia lo que iba hacer, era algo estresante pero yo tuve que hacer casi todo el trabajo, es mucha ironía siendo yo el de rol pasivo lo este haciendo todo, pero ya nada me sorprende en esta vida.

Fue una de las experiencias mas corta que pase en la vida, corta en todos los sentidos. Deje al chico con su grado de ebriedad sentado en el inodoro del baño semidesnudo mientras yo trababa de limpiarme lo mas posible pues siempre estoy preparado para estos casos.

Mientras estaba lavándome las manos escuche una voz familiar dentro de uno de los cubículos, no podía ser posible que este aquí justo hoy y en este momento, tenia que desaparecer antes que pueda verme, ese chico definitivamente no podía verme.

Salí corriendo del baño dejando al chico con su suerte, la verdad poco me importaba, solo quería ir a casa y olvidar lo que había pasado pero cuando esto estaba pasando por mi cabeza, siento un golpe brusco que hace detenerme.

-Lo siento

-No importa estoy bien.

Era un chico bastante hermoso, nunca lo había visto, tenia que ser mío, y tenia que ser esa noche.

Luego de un par de conversaciones sin sentido se ofreció a llevarme a casa, cosa que sabia en que iba terminar pero creo a su amigo no le gusto mucho.

No se como paso pero de un segundo a otro ya estábamos en su auto destino a un lugar que sabia bien que no era mi casa, pero eso era lo que yo esperaba.

La noche paso demasiado rápido pues de nuevo el sonido de mi alarma hizo que saliera de mis sueños. Esta vez me desperté desnudo en una cama que no era la mía pero cuando gire a mi costado encontré a ese chico de la noche anterior y ahí todo quedo claro.

Tuve que vestirme con cautela a modo que no se despertara y cuando estuve listo tome mis cosas y prepare para irme no sin antes pasar al baño a dejar mis mejores despedidas para mi acompañante casual de la noche.

Bienvenido al SIDA