HOMOSEXUAL (relatos gays)

El Aeropuerto.

Que haces cuando tú vida no tiene el mismo ritmo de siempre? no te quedan amigos, no te sientes querido ni importante y la soledad va consumiendo tus ganas de sonreír, de salir, de comer, de respirar el aire de la mañana o simplemente ver el atardecer? que haces Cuando te das cuenta que ella te está quitando hasta las ganas de vivir.

El vuelo con destino a Barcelona saldrá en 30 minutos, Se pide a los pasajeros que vayan acercándose a la puerta numero 10.

De pronto ese sonido hizo que dejara de leer el libro que estaba leyendo en aquella librería del aeropuerto. Ya casi era mi hora.

Luego de pensar una y otra vez que hacer con mi destino, me encuentro aquí , en el final de un próximo comienzo, una nueva página para mi vida.

Comencé a caminar con destino a la puerta número 10 donde me esperaba mi vuelo rumbo a aquel país desconocido para mí.

Mientras que caminaba, por inercia busque mi móvil dentro de mis bolsillos pero recordé que lo había tirado en la basura cuando entre al aeropuerto.

No quería despedidas falsas de aquellas personas que nunca se preocuparon por mi o que simplemente se olvidaron de mi existencia como si yo ya no era parte de la vida.

No quería irme, pero tampoco quería quedarme, acaso para que lo haría? para seguir viviendo una pseudo vida? no, ya estaba harto de fingir algo que no era.

Cuando estaba cruzando la mitad del aeropuerto escucho una voz familiar gritando mi nombre.

-Ángel!!

Me di vuelta con las idea de estar equivocado o simplemente ya alucinando pero no, era ese chico acercándose a toda velocidad hacia mí y prácticamente empapado de sudor.

-Que haces aquí Aarón?

-Mejor dicho tú que mierda haces aquí con tus maletas, a donde vas? porque?

Solo suspire y quede en silencio por unos momentos.

-No me hagas una escena cliché de una película romántica de los 90

-Necesito una respuesta.

-Dejo irme, no tengo nada que hacer aquí.

-Pero donde vas?

-Barcelona, mi padrino me propuso una oportunidad laboral y lo acepte.

-Pero te vas sin decir nada?

-A quien debí decirle, a ti?

-Nadie lo sabe, te busco hace días y no respondes el móvil, tú familia no sabe nada y tampoco tus amigos, tuve que ir hasta tú departamento y ahí el guardia me conto que te ibas, sin pensarlo vine a detenerte, porque no te puedes ir, no me puedes...

-No te puedo que Aaron?

De vuelta el silencio se apodero de la situación.

-No quiero que me dejes.

Esas palabras penetraron en mi corazón e hicieron que se me erizara la piel y cuando estaba a punto de derrumbarme mi cerebro tomo la posta de la situación.

-Lo siento Aaron, eso debiste hacérmelo dicho hace mucho tiempo, hoy me voy, lo siento, en verdad lo siento.

-Ángel, yo te amo, si te vas, yo voy contigo, pero no pienso dejarte ir solo.

-Lo que siento por ti no lo puedo explicar con palabras pero no digas cosas que no puedes cumplir, las cosas pasaron por algo y me tengo que ir.

Aaron agarro fuerte mi brazo y me trajo hacia el abrazándome con fuerza.

-No me dejes.

Su voz estaba entrecortada y las lágrimas salieron de sus pupilas.

-No llores.

-Soy un idiota, hoy voy a perderte.

-No solo es tú culpa, hoy no pertenezco aquí, pero te prometo que algún día volveré volveré.

-Volverás?

-Si lo prometo y cuando vuelva, si el destino así lo quiere, estaremos juntos.

-Tenemos que estar en contacto, ahora la tecnología nos podrá ayudar a no extrañarnos.

-No Aaron, los amores a distancia no funcionan, solo nos dañaremos mas, lo mejor es que cada uno viva su vida, no me busques, no pienses en mi, vive tú vida y si el presagio quiere que vuelva, pues bueno esperemos hasta ese momento.

-No me parece justo que decidas por los dos.

-Es lo mejor, guárdame como un lindo recuerdo y...

El vuelo con destino a la ciudad de Barcelona saldrá en 5 minutos.

-Ese es mi vuelo.

-No hay forma que te quedes verdad?

-No, no hay forma, debo irme.

-Te esperare.

-Tal vez sea así.

Tome mis cosas y me aleje de el lentamente hasta la puerta donde tenía que subir al avión.

-Ángel, espera.

Me detengo y veo que Aaron quita una cinta de su bolsillo.

-Que haces?

-Supuse que no iba a poder detenerte por lo terco que eres y traje esto.

-Por favor no hagas una escena patética de chico enamorado.

-Conoces la leyendo del Hilo Rojo.

-Por favor, me rehúso a dejarte hacer esto.

Aaron corto la cinta roja que llevaba y la corto por la mitad, agarro mi brazo derecho y ato uno de los pedazos a mi muñeca y luego hizo lo mismo con el suyo y el otro pedazo restante.

-Ahora no nos olvidaremos fácilmente.

No sabia si golpearlo por lo patético que fue esa escena en pleno aeropuerto o besarlo por lo tierno que fue.

-Esta bien, así será, debo irme, adiós Aaron.

-Hasta pronto Ángel.

Fui alejándome de Aaron, el seguía ahí, podía sentir su energía, podía sentir que ya no estaba triste y al verdad yo tampoco lo estaba, no sabía si era la mejor decisión de mi vida pero estaba seguro que era la apropiada por este momento, era la hora de comenzar de nuevo, puedo decir que me voy contento y no estoy arrepentido de mi decisión, ahora se mejor que nunca que debo volver, hay una promesa que debo cumplir.