Capítulo 14.

853 38 4
                                    

Me desperté recordando todo lo que hice ayer y una sonrisa se me posó en mi rostro. Edward me había dicho "Te quiero" y aún no podía dar crédito. Me giré hacia la derecha y ví el rostro de la persona que más quiero en este instante. Aún durmiendo, tiene su cara de malhumorado permanente. Su ceño sigue fruncido y sus labios presionados en una fina línea. Mi tentación por besarlo va en aumento hasta que no puedo más y lo hago. Lo noto removerse y sé que está despierto. Lo vuelvo a besar y sigue "dormido"

- Edward, sé que estás despierto. No soy tonta. - digo mientras lo muevo y él intenta reprimir una risa.

- No. Estoy dormido. Si quieres que me despierte, me tienes que dar un beso. - me dice lo más rápido posible y ocn los ojos tadavía cerrados.

Le doy un beso y aún sigue con los ojos cerrados. Este chico es tonto.

- Edward, levántate ya. - le digo intentando esconder una risa.

- No. Dame otro beso.

- No. Levántate que tengo hambre. Luego te doy un beso.

- Joder, con lo bien que se está en la camita... - me dice agarrando las sábanas y enrollándose en ellas mientras se levanta. - Buenos días, cosa fea.

- Buenos días, masa amorfa.

Y así nos pasamos la mañana. Haciendo tonterías, riendo, besándonos, duchándonos juntos y viendo películas. Cuando miro el móvil, veo un mensaje de mi madre. Me había olvidado completamente de ella. Hace más de dos meses que no hablamos, ya que estoy aquí y he estado demasiado ocupada como para hablar con ella. Leo el mensaje y veo que pone:

"Jane, ¿tienes pensado volver algún día? Quiero que sepas que yo te quiero a pesar de todo. Me gustaría informarte de que Cory y yo nos vamos a casar dentro de dos semanas. No te lo conté antes porque sabía que te pondrías echa una furia. Espero que lo aceptes como padrastro.

Te quiero, Mamá X.

Pd: Vas a tener un hermanito pequeño."

¡¿SERÁ PUTA?! Vale, no puedo captar tanta información en un puto mensaje. Primero: ¡¿Cory y ella se van a casar?! No. Eso no puede ser. 

Cory y mi madre empezaron a salir hará como un año y medio. Tiene dos hijas, una de mi misma edad, con la cual iba a clase y odiaba, y otra de nueve años. Eso significa que las tendré como hermanastras y no me da la gana.

Segundo: ¡¿LA PERRA DE ROSE ESTÁ EMBARAZADA?! Dios, eso sí que no. No volveré a Australia nunca, y menos para su boda. Ella no es mi madre. Ya no. Se vé que necesita formar una família de nuevo y no sabe por donde empezar. Pues bien, a partir de ahora, mis padres murieron en un accidente junto con mi hermano y solo yo quedé viva. A partir de ahora, mi historia será así.

- Jane, ¿estás bien? - me pregunta Edward.

- ¿Eh? Ah, sí.

- ¿Seguro? Estás pálida y las manos te tiemblan. - me dice mientras me coje las manos y las entrelazaa con las suyas. - Me tienes aquí para lo que quieras, enserio. 

- Edward, ahora no... Necesito estar sola. ¿Me puedes acompañar a casa, por favor?

Él asiente, cojo mis cosas y nos vamos hacia mi casa. Durante el trayecto, voy pensando en todas las cosas que me han ocurrido esta mañana. Ha empezado genial, pero la puta de Rose lo tiene que joder todo. 

Bajamos de la moto y me acompaña hasta la puerta. Una vez ahí, abro y me giro para despedirme de él, pero se adelanta. Me coge la cara con sus dos manos y me besa.

- Adiós, Jane. Si necesitas algo, llámame. Enserio. No quiero verte así.

- Tranquilo. Esta noche te llamaré. 

Se aleja y cuando está apunto de cojer el ascensor, se gira y me dice:

Te quiero.

He.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora