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Capítulo 18.

Bajamos de la azotea porque ya teníamos hambre y Zayn nos había avisado de que las pizzas ya estaban de camino. Al llegar al salón veo que Zayn está tumbado en el sofá mirando la tele y decido tirarme encima de él.

- ¡Ah, Jane! Que bruta que eres... - me dice con una gran sonrisa en el rostro seguida de una mueca de dolor fingido. - Me has hecho daño, tonta.

- Oh, perdona, que ahora resulta que el señorito Malik es un flojo. Tonto tú. - le digo sacando la lengua y dirijiendo mi mirada hacia Edward, que nos estaba mirando de brazos cruzados y con una sonrisa.

- Yo no soy un flojo, solo que tú eres más masculina que yo, ts. - me dice mientras me gira y queda encima de mí y me empieza a hacer cosquillas. -¡Edward, ayúdame con este monstruo!

- Menos con mi novia que te pego. - dice Edward mientras se tira encima de mí y entre los dos me empiezan a hacer más cosquillas.

Estamos así durante minutos. Yo estaba un poco en mi mundo porque... Edward había dicho que yo soy su novia y eso sonaba realmente bien. El timbre me salvó de ellos porque de verdad que me estaba empezando a ahogar. Zayn se levantó para ir a pagar, no sin antes pellizcarme un moflete. Edward se senté y me tiró hacia él mientras me besaba. Zayn trajo las pizzas y bebida y estuvimos cenando mientras mirábamos Monstruos S.A. Parecíamos tres niños pequeños haciendo travesuras de las suyas y eso me encantaba. Al cabo de un rato, el móvil de Zayn empieza a sonar y se va a su habitación para cojerlo, mientras dice: "Es Kate". 

- ¿Estás mejor, tonta? - me dice Edward mientras me rodea con su brazo y me besa la cabeza.

- Sí, enserio... Sin vosotros no sé qué haría.

- Seguramen...

- ¡Chicos! Kate me acaba de llamar diciéndome que un amigo suyo da una fiesta en su casa y me ha dicho que si quería venir, y bueno, le he dicho que estaba con vosotros y me ha pedido que vengáis vosotros también. ¿Os apuntáis, porfavor? - interrumpe Zayn.

- Sí, si Jane quiere ir, vamos.

- Por mí vale. ¿A qué hora?

- Ha dicho que a las once empieza. Nos queda... una hora y media.

- Entonces voy a arreglarme. - digo yo mientras me levanto. 

- ¿Me puedo duchar contigo? - dice Edward con tono picarón.

- Haz lo que te dé la gana, mientras no me estorbes... - digo con una risita mientras me dirijo a mi habitación.

- ¡Jane, cuidado con lo que hagáis que no quiero ser tío! ¿Me oyes? - chilla Zayn desde el salón.

- Que sí, que sí.

Edward y yo entramos en mi baño entre risas y me acorrala en la pared.

- Bueno... ¿y si en vez de ir a la fiesta nos quedamos encerrados en tu baño? - me dice mientras guiña un ojo.

- Ay, Edward no estor...

Y me interrumpe con un beso.