Destinada A Ti

Capitulo 15

_Buenos días_ digo mientras entro en la cocina, donde la abuela Kovalov y Julián ya se encuentran desayunando.

_Buenos días_ dicen ambos al unísono_ Siéntate querida ya te sirvo_ niego con la cabeza.

_No es necesario yo puedo servirme, no se preocupe

_Oh por favor déjame hacerlo, es mi oportunidad de consentirte, por favor Amelie_ me lo dice con una mirada tan esperanzada que no me queda de otra que aceptar.

_Está bien, muchas gracias_ me siento junto a Julián y él me sonríe mientras se tapa la boca con la mano y mastica rápidamente.

_¿Te gusto tu cuarto? Mi abuela y yo pasamos dos semanas dejándolo como esta, yo escogí el sofá, la computadora y el escritorio, están geniales ¿A que si?_ dice con una sonrisa radiante de orgullo.

_Definitivamente tienes un excelente gusto, me encantaron_ el asiente de acuerdo en que lo que escogió es de excelente gusto, es un niño muy tierno, pero al mismo tiempo es seguro de sí mismo, alegre, divertido y te da una sensación agradable cuando estas con él, ayer en la cena fue de lo más divertido, contamos anécdotas de nuestra niñez y luego hablamos de algunos eventos a los que quieren llevarme este fin de semana.

_Aquí tienes cielo_ coloca un plato de panqueques con miel, junto a un tazón de frutas, en la mesa ya hay jugo de naranja y leche, opto por el jugo y comienzo a desayunar._ Muchas gracias esta delicioso_ digo luego de saborear el primer bocado.

_Todo lo que hace nuestra abuelita es delicioso, espera al almuerzo_ se acerca a mí y susurra como contándome un gran secreto_ Me dijo que hará Lasaña, es deliciosa, lo juro te encantara.

Luego del desayuno decidí explorar la casa y el jardín, la casa es preciosa, espaciosa, cómoda, podría decirse reconfortante, te sientes bien solo al estar en ella y debo reconocer que me agrada estar con la abuela Kovalov y Julián, se están ganando mi corazón y hasta cierto punto eso me atemoriza, no sé si llegar a quererlos sea bueno o malo.

En la mitad del jardín junto a unos limoneros se encuentra una mesa con sillas a juego, en ella está sentado Julián con los ojos cerrados y unos auriculares en sus oídos, me dirijo a él y me siento en la silla que está a su lado.

_Hola ¿Puedo sentarme contigo?

_Si, puedes_ dice mientras se quita los auriculares_ ¿Te gusta?_ pregunta señalando con la cabeza el hermoso jardín.

_Me gusta_ nos quedamos un momento en silencio, hasta que me decido a preguntarle la duda que he tenido desde que lo conocí_ ¿Julián?_ voltea a verme.

_Dime

_No sé si te incomode la pregunta pero en serio tengo curiosidad _hago una pausa_ ¿Dónde están tus padres?_ en sus ojitos pasan muchas emociones pero la que más predomina es la tristeza.

_¿No te lo comento Nicolás?_ niego con la cabeza y el suspira_ Bueno mis padres... no están_ ¿No están?-_ Mi mama murió hace unos años, tenía casi 5 años, no recuerdo mucho, solo que mi padre lloraba, así que me asuste y llore también, mi abuelita me consoló, me explico que mama se había ido para siempre y por eso papa estaba triste, estuvo a mi lado todo el tiempo, el resto de ellos fueron amables y cariñosos pero yo no quería que nadie me dijera nuevamente "Lo siento mucho pequeño" _sus ojos azules se cristalizan_ se sentía peor.

Sus ojos azules me observan.

_Porque sentía que cada vez que lo decían me confirmaban que ya nunca más miraría a mi mama_ su mirada y expresión cambian a una seria en segundos.

_Oh, no debí preguntar, lo siento_ Niega con su cabeza

_Está bien, no lo sabias, además sé que ellos me cuidan.