With You

08: Sentimientos

Disclaimer: MARVEL & Disney no me pertenece.

Notas de la autora: La letra cursiva es flashback de Natasha (...)

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No sabía muy bien como habían llegado a esa base, lo único que recordaba era que lo golpearon en la cabeza y ahora sufría de una jaqueca horrible. Con su mano derecha se palpó la nunca. Tenía algo de sangre. Su brazo derecho estaba quebrado así que no podía moverlo. Con su mirada intentaba ubicar a Natasha, que se imaginaba estaba en la misma prisión que él. Y la vio en una esquina. Estaba ensangrentada, con muchas heridas en el rostro. Su traje estaba desgarrado en las piernas. Se acercó rápidamente hacia ella para examinarla y que no estuviera de gravedad.

─ Nat... Nat ─su compañera no reaccionaba. Steve tragó saliva y empezó a sudar frío. Se acercó mas a ella intentando tomar el pulso. Puso sus dedos en el blanco cuello de la espía y esperó. Un suspiro salió de sus labios, estaba con vida─ Natasha...

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─ No intentes embriagarme, sabes que no lo lograrás... ─decía Steve tomando de su vaso un poco de Vodka que le quedaba

─ Déjame intentarlo por esta vez... mira este trago es fuerte, te lo aseguro.

Estaban en un pequeño bar en Nueva York. Habían tenido muchas misiones estos últimos meses, así que Natasha decidió tomarse un pequeño descanso junto a su compañero y líder de los vengadores, Steve Rogers. Ésta era la tercera vez que salían juntos. Al soldado parecía agradarle el ambiente, o más que el estar ahí, era estar ahí con ella.

─ ¿Que pediste? ─ preguntó desorientado, pues no conocía los brebajes de la actualidad

─ Se llama Tequila, se toma así ─ Natasha sirvió un poco en un pequeño shot mientras el barman le servía en un plato limones y un poco de sal

─ ¿Con sal y limón?

─ Así es. ─Natasha se colocó sal en la mano y luego dio un sorbo al limón, para luego tomarse el shot. Steve quedó de ojos abiertos.─ Bueno, ahora es tu turno capitán.

─ ¿No crees que es demasiado? O sea, son las dos de la madrugada, deberíamos-

─ "Deberíamos esto, deberíamos esto otro". Steve, disfruta la vida. No cualquiera regresa de estar congelado setenta años...Ya veremos que haremos mañana, o en un par de horas más, mientras, bebe conmigo.

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Poco a poco la espía comenzó a abrir los ojos. Estaba desorientada, además de que le dolía todo el cuerpo, no recordaba donde ni con quien estaba en esa misión, hasta que una voz empezó a resonar en su cabeza. Era Steve. Aún semi inconsciente, trató de acomodarse en la pared, mientras que una mano se posaba en su espalda tratando de ayudarla.

─ ¿S-Steve?

─ Aquí estoy Nat, no te preocupes. ¿Te fracturaste algo?

─  Me duele todo el cuerpo, como si hubiera caído desde un barranco, no lo se... ─aún no abría completamente los ojos, ya que se sentía muy mareada. Pero de a poco empezaba a recordar la misión: Estaban en Rusia, rescatando a unos rehenes que estaban en la base─ ¿Y... los rehenes?